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Mientras toda la atención mediática y política se centra en la guerra de Ucrania, Armenia, aplastada por la presión de Turquía y Azerbaiyán y abandonada por su aliado, Rusia, sufre. Sobre el terreno, hay necesidades humanitarias que la asociación Solidarité Arménie hace todo lo posible por atender.
Breizh-Info entrevistó a Sarah, una de sus activistas, para saber más sobre la asociación, la situación sobre el terreno y las necesidades de la población.
¿Podría presentarse a nuestros lectores?
Me llamo Sarah, tengo 33 años, vivo cerca de París y soy voluntaria de Solidarité Arménie desde noviembre de 2020.
¿Qué le llevó a comprometerse con Armenia?
Me comprometí por dos razones. La primera es porque mi madre es armenia. Es mi deber ayudar a los armenios y rendir homenaje a quienes dieron su vida para preservar su identidad y su cultura.
En segundo lugar, como francesa y cristiana, no podía quedarme de brazos cruzados cuando Armenia es la cuna del cristianismo. Los armenios son valientes y llevan miles de años luchando por su supervivencia. Este país es el último baluarte cristiano entre los países musulmanes (otomanos).
Háblenos de su asociación y del trabajo que realiza allí.
La asociación Solidarité Arménie nació el 20 de octubre de 2018 en Angers por el deseo de jóvenes cristianos franceses de mejorar la suerte de sus hermanos del Este y aportar una ayuda física y material a las familias precarias de Armenia, en particular a las de las zonas rurales más desfavorecidas del país.
Desde nuestra creación, hemos creado invernaderos agrícolas, renovado escuelas, dirigido campamentos de verano para niños, organizado ayuda humanitaria, incluso en el frente, y promovido la artesanía armenia a través de nuestra tienda online.
¿Cómo se percibe sobre el terreno el compromiso de los cooperantes franceses, en particular de las mujeres como usted?
El compromiso humanitario francés no es sólo una ayuda material real, sino también moral. La población armenia tiene en gran estima a Francia. Las personas a las que ayudamos están muy agradecidas. Se sienten apoyadas y, sobre todo, no olvidadas por todos. A veces, basta con hablar y jugar con los niños para levantarles el ánimo.
No he sentido ninguna diferencia por ser mujer. Aparte de que prefieren que forme una familia. Una abuela me dijo: «Lo que haces aquí es honorable y respetable, pero no hay nada más importante en el mundo que tener hijos.
Política y militarmente, ¿cuál es la situación sobre el terreno y cómo evoluciona? ¿Reciben los armenios alguna ayuda exterior?
Políticamente es muy complicada. La población sigue dividida entre los que están a favor del gobierno y los que están en contra. Armenia tiene acuerdos comerciales con varios países y compra armamento de defensa. Rusia actúa como amortiguador, pero no proporciona ninguna ayuda concreta y no ha impedido que los azeríes violen el alto el fuego desde noviembre de 2020. Los armenios no se benefician realmente de la ayuda exterior. Las fronteras con Irán en el sur de Armenia impiden que turcos y azeríes avancen hacia el interior del país. Irán no tolerará ningún cambio en sus fronteras históricas, ni la presencia a sus puertas de fuerzas de fuera de la región.
¿Por qué cree que es importante ayudar a Armenia, y qué mensaje transmitiría a nuestros lectores?
Cómo europea, es importante ayudar a Armenia porque Azerbaiyán y Turquía sueñan con fusionarse con los demás países turcófonos del Cáucaso (Turkmenistán, Kazajstán, Kirguistán y Uzbekistán). Sin el obstáculo armenio, esta gran alianza islámico-otomana, cuya superficie superaría entonces la de la Unión Europea, constituiría de facto un nuevo bloque continuo que se extendería desde Europa hasta China. Este nuevo poder económico será desastroso para nosotros.
Como franceses, no debemos olvidar que Armenia es nuestra hermana pequeña. La relación especial de nuestro país con los armenios se remonta a miles de años. En cuanto se perpetraron las primeras masacres, entre 1894 y 1896, se crearon en Francia comités de apoyo a los armenios. Durante las dos Guerras Mundiales, los armenios participaron sin vacilar en el esfuerzo bélico. El reino de Cilicia (en la Armenia ocupada) estaba bajo protectorado francés. Se celebraron muchos matrimonios entre reyes franceses y princesas armenias… Nuestras dos naciones siempre han estado unidas.
Como cristianos, tenemos el deber de ayudar a nuestros semejantes. Este país fue el primero en adoptar el cristianismo como religión oficial. La fe cristiana es el pilar de la identidad armenia. El país está lleno de monasterios que datan del siglo IX. Por ejemplo, la catedral de San Etchmiadzine se considera la primera iglesia cristiana del mundo, y está declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Si no ayudamos a Armenia, Europa estará en peligro.
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España y todas las naciones cristianas del mundo occidental tienen el deber moral de defender a Armenia, la primera nación del mundo que aceptó el Cristianismo como religión oficial del país y que actualmente se encuentra bajo la amenaza de ser invadida por los musulmanes turcos y azeríes que desean el exterminio definitivo de los cristianos armenios (que iniciaron a finales del Siglo XIX y principios del Siglo XX).