El Submarino de Isaac Peral
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La próxima entrada en servicio del Submarino “Isaac Peral” (S-81), constituye un buen momento para recordar, aunque sea de forma somera, el historial del Arma Submarina de nuestra Armada y las distintas unidades que la integraron.
La creación del Arma Submarina, sin contar el prototipo del insigne Isaac Peral que, de no ser por las intrigas gubernamentales y otras oscuras motivaciones que merecen una larga reflexión que se escapa del motivo de este artículo, nos hubiese permitido ganarle la guerra a los Estados Unidos en 1898, tiene su origen en la llamada “Ley Miranda”, promulgada con fecha 17 de febrero de 1915, durante el reinado de Alfonso XIII, que, junto con la anterior del Almirante Ferrándiz (1908), constituirían el armazón legal para el resurgimiento de nuestra Marina de Guerra.
En 1917 es nombrado primer Comandante de la Flotilla de Submarinos el Capitán de Corbeta Mateo García de los Reyes quien, ya retirado con el empleo de Contralmirante, es asesinado por las hordas rojas en Paracuellos del Jarama, el 24 de noviembre de 1936, tras una saca de la cheka de Porlier, ordenada por Santiago Carrillo.
Desde aquel lejano 1917, la Armada ha contado con diferentes unidades de este tipo, integradas en varias clases y de distintas procedencias.
La clase “A”
Fue la “Ley Miranda” la que autorizó la adquisición de los cuatro primeros Submarinos de la llamada “Clase A” -A-0 “Isaac Peral”, A-1 “Narciso Monturiol”, A-2 “Cosme García” y A-3”-.
El A-0, de origen norteamericano perteneciente a la clase “Holland”, USS M-1, construido en 1916 en los astilleros Fore River, desplazaba entre 492 y 653,8 tn. (superficie e inmersión); con una eslora de 57,95 m.; 5,8 de manga; 5,6 de puntal y 4,80 de calado en superficie. Con una potencia entre 340 y 600 cv. (inmersión y superficie). Dos motores diésel y dos eléctricos que le proporcionaban una velocidad de entre 15 y 10 nudos (superficie e inmersión). Una cota operativa de 50 m. Un armamento de cuatro tubos lanzatorpedos a proa de 450 mm. y un cañón de 76 mm. Su dotación era de 28 hombres y su entrada en servicio se registró el 31 de enero de 1917 permaneciendo activo hasta mayo de 1932 en que fue desguazado.
Los “Monturiol” (A-1), “Cosme Garcia” (A-2) y A-3, pertenecientes a la clase “F”, fueron construidos en los astilleros italianos de La Spezia entre 1915 y 1916 y entregados a la Armada entre abril y septiembre de 1917.
Estos tres Submarinos desplazaban entre 261 y 320 tn. (superficie e inmersión). Con una eslora de 45,63 m.; 4,22 de manga; 4,27 de puntal y 3,09 de calado en superficie. Su dotación era de 20 a 26 hombres. Estaban propulsados por dos motores Fiat con una potencia de 350 cv. cada uno que le permitían una velocidad en superficie de 13,5 nudos. Su cota de inmersión era de 45 m. Iban armados con dos tubos lanzatorpedos de 450 mm. Su dotación era de 26 hombres.
Fueron dados de baja entre 1931 y 1934.
Submarino “Monturiol” (A-1)
A esta primera flotilla le fue asignado como buque nodriza el Crucero “Extremadura” hasta la incorporación, en 1920, del buque de rescate de submarinos “Kanguro”, construido en Holanda.
Este mismo programa naval del Almirante Miranda impulsó, en 1922, la construcción se seis Submarinos de la clase “B” y en 1927 otros seis de la clase “C”, recibiendo, el primero de esta última serie, el C-1, el nombre de “Isaac Peral”.
La clase “B”
Estos Submarinos fueron construidos por la Sociedad Española de Construcciones Navales (S.E.C.N.) en su factoría de Cartagena entre los años 1922 y 1926. Pertenecientes a la clase norteamericana “Holland” (105F), desplazaban entre 556 y 718 tn. (superficie e inmersión); con una eslora de 64,18 m.; 5,60 de manga; 5,18 de puntal y 3,55 de calado en superficie. Disponían de dos motores diésel de cuatro tiempos Nelseco, dos motores eléctricos con una batería Tudor y dos motores eléctricos de una hora para emergencias que les proporcionaban una potencia de entre 700 y 210 (superficie e inmersión) y una velocidad de entre 16 y 10,5 nudos (superficie y bajo el agua). Podían alcanzar una cota de 60 m. Iban armados con cuatro tubos lanzatorpedos de 450 mm. (dos a proa y dos a popa). Su dotación era de 34 hombres.
Fueron dados de baja entre 1936 y 1952. Los B-5 y B-6 resultaron hundidos durante la guerra civil y los cuatro restantes desguazados o como blancos en ejercicios navales.
Dentro de este mismo programa naval se autorizó la construcción, en la S.E.C.N. de Cartagena, de otras seis unidades que dieron origen a la clase “C”, el primero de los cuales fue bautizado con el nombre de “Isaac Peral” al haber sido dado de baja el A-0 que lo ostentaba con anterioridad.
La clase “C”
Entregados a la Armada entre 1928 y 1930, pertenecían también a la clase “Holland”. Con un desplazamiento entre 1.144 tn. en inmersión y 925 en superficie. Su eslora era de 73,3 m.; 6,3 de manga y 5,7 de calado. Dos motores diésel Vickers y otros dos eléctricos generaban una potencia de entre 1.000 y 375 cv. (superficie e inmersión), permitiéndole un andar de entre 16,5 nudos en superficie y 8,5 en inmersión. Con una cota máxima de 80 m., iban armados con seis tubos lanzatorpedos (dos a proa y cuatro a popa) de 533 mm. y un cañón antiaéreo Vickers de 76,2 mm. Su dotación era de 40 hombres.
Submarino de la clase “C”, tras él el “Kanguro”
Los seis barcos resultaron hundidos entre 1936 y 1951. Los C-3, C-5 y C-6 durante la guerra civil; el C-4 en accidente en 1946; el C-1 en 1950 sirviendo como objetivo en unos ejercicios navales y el C-2 cuando era conducido el desguace en 1951.
Fue por tanto, a inicios de la década de los 30, cuando la Armada dispuso del mayor número de Submarinos en servicio, llegado a contar con un total de dieciséis unidades de las veintiséis previstas en el programa del Almirante Miranda.
La clase “D”
En 1932, ya en la República, se inició la construcción del primero de los Submarinos de la llamada clase “D” que terminaría integrada por tres unidades -D-1, D-2 y D-3- cuya fabricación se prolongaría hasta 1954, resultando ya totalmente obsoletos cuando fueron puestos en servicio.
Estos Submarinos, de diseño y fabricación nacional, basados en las dos clases anteriores, iniciaron su construcción en la S.E.C.N, concluyéndola en la E.N. Bazán cartagenera. Los tres Submarinos con los numerales S-11, S-21 y S-22, entraron en servicio entre 1944 y 1952, causando baja entre 1965 y 1971. Los S-21 y S-22 quedaron integrados en el Plan de Modernización de Buques de la Armada siendo objeto de algunas mejores.
Con un desplazamiento de entre 1.095 y 1.399 tn. (superficie e inmersión). Su eslora era de 84,3 m.; 6,9 de manga y 4.1 de calado. Disponían de dos motores eléctricos que les proporcionaban una potencia de entre 2.500 y 600 cv. (superficie e inmersión), con un andar entre 20,5 nudos en superficie y 9,5 en inmersión. Su cota operativa era de 80 m. y su dotación entre 74 hombres los dos modernizados y 60 el S-11.
La clase “General Mola”
Los “General Mola”, “ex Archimede” y “General Sanjurjo”, “ex Torricelli”, fueron dos Submarinos cedidos, en 1937, por la Marina italiana a la Armada Nacional. Pertenecientes a la clase “Archimede”, habían sido construidos entre 1931 y 1934. Con un desplazamiento en inmersión de 1.240 tn. y 970 en superficie, su eslora era de 70,5 m., 6,87 de manga y 4,12 de puntal. Disponían de dos motores diésel Tossi y dos eléctricos que le proporcionaban una potencia de entre 3.000 y 1000 cv. (superficie e inmersión), con una velocidad de 17 nudos en superficie y 8 en inmersión. Iban armados con ocho tubos lanzatorpedos (cuatro a proa y cuatro a popa) de 533 mm., así como dos cañones de 100/47 y cuatro ametralladoras antiaéreas de 13,2 mm. Su dotación era de 55 hombres. Ambos buques fueron dados de baja en 1959
La clase G
El S-01, antes U-573, fue un Submarino alemán que, al ser atacado en la mar durante la II G.M. se internó en 1942 en el puerto de Cartagena y al no poder ser reparado por la Marina alemana dentro de los plazos establecidos, fue adquirido por la Armada, causando alta en la LOBA el 2 de agosto de 1942 y permaneciendo en servicio hasta 1970.
El “Almirante García de los Reyes” (S-31)
El primer numeral que se le otorgó fue el de “G-7”, como parte de la denominada clase “G” de la que se programó la construcción de seis unidades de las cuales tan solo una fue colocada en grada y, finalmente, cancelada.
Esta clase “G”, surgida del Plan Naval de 1943 incluía la construcción, como queda dicho, de seis unidades del tipo VIIC de fabricación y tecnología alemana, similar al U-573, sin embargo, las vicisitudes de la II G.M. lo impidieron. Pese a todo, en un primer momento, el buque recibió el numeral G-7 que pronto fue sustituido por el S-01.
Construido entre 1940 y 1941 en Hamburgo, desplazaba 769 tn. en superficie y 871 en inmersión. Su eslora era de 66,5 m., 6,18 de manga y 4,72 de calado. Disponía de dos motores diésel y otros dos eléctricos que le proporcionaban una potencia de entre 2.800 cv. en superficie y 750 en inmersión, con un andar de 15,5 nudos en superficie y 7,5 en inmersión. Iba armado con cinco tubos lanzatorpedos (cuatro a proa y uno a popa) de 533 mm., un cañón 8.8/45 y una ametralladora de 20 mm. Su dotación era de 55 hombres. Fue dado de baja en 1970.
La clase “Balao”
S-31, “Almirante García de los Reyes” (ex “Kranken” SS-370), fue botado en Wisconsin en 1944 y trasferido a la Armada en 1959, dentro del programa de la llamada “Ayuda americana”, derivada de los Acuerdos de Madrid, permaneciendo en servicio hasta 1982 en que fue desguazado. Recibió el apelativo cariñoso del “Treinta y único”.
Desplazaba 1.525 tn. en superficie y 2.415 tn. sumergido. Su eslora era de 95 m., manga de 8,3 y calado de 4,7. Su cota de inmersión era de 125 m. m. Estaba propulsado por un sistema diésel-eléctrico, compuesto por cuatro motores diésel y cuatro eléctricos que le proporcionaban una potencia de 4.800 cv. en superficie y 1.375 en inmersión, con un andar de 23 nudos en superficie y 11 sumergido. Su armamento consistía en 10 tubos lanzatorpedos de 533 mm.
Disponía de un sonar pasivo AN/BQR-2.
La clase Balao “Guppy IIA”
También dentro de este programa de ayuda mutua hispano-norteamericana, se recibieron estos buques:
S-32, “Isaac Peral” (ex “Ronquil” SS-396), fue botado en New Hamps en 1944, causando alta en la Armada en 1971 y baja en junio de 1984.
S-33, “Narciso Monturiol” (ex “Picuda” SS-382), fue botado en 1943, causando alta en la LOBA en 1972 y baja en marzo de 1977.
S-34, “Cosme García” (ex “Bang” SS-395), fue botado en 1943, siendo alta en la Armada en 1972 y baja en septiembre de 1982.
S-35, más tarde “Narciso Monturiol”, por baja del S-33, (ex “Jallao” SS-368), fue botado en 1944, causando alta en la Armada en 1974 y baja en diciembre de 1984.
Un Submarino de la clase “Tiburón” y otro de la “Foca”
Las características de estos barcos eran, con carácter general, las siguientes: Desplazaban 1.840 tn. en superficie y 2.445 tn. sumergido. Su eslora era de 93,3 m., manga de 8,2; calado de 5,2 y puntal de 7,01. Su cota de inmersión era de 125 m. Estaban propulsado por un sistema diésel-eléctrico, compuesto por cuatro motores diésel y cuatro eléctricos que le proporcionaban una potencia de 4.800 cv. en superficie y 1.375 en inmersión, con un andar de entre 23 y 17 nudos en superficie y 11 y 14,1 sumergido. Su armamento consistía en 10 tubos lanzatorpedos de 533 mm.
Disponía de un radar SS-24 y dos sonares. Su dotación era de 84 hombres.
La clase “Foca”
En los años 50, aprovechando tecnología germana de la 2 G.M., la Armada acometió la construcción de dos minisubmarinos de asalto que pasaron a ostentar los numeras SA-41 y SA-42, formando la clase “Foca”, basada en el proyecto alemán “Seehunde”.
Ambos buques causaron alta en la LOBA en 1963 y su vida operativa fue muy efímera ya que, en 1969, fueron retirados del servicio.
Con un desplazamiento en superficie de 17,81 tn. y 20,38 en inmersión, su eslora era de 13,75 m., 1,70 de manga y 2,81 de puntal. Disponían de dos motores diésel “Pegaso” y uno eléctrico que le proporcionaban una potencia de 250 cv. en superficie y 220 en inmersión. Portaban dos torpedos externos. Su velocidad oscilaba entre los 9,5 y los 11,5 nudos y su cota operativa entre 80 y 40 m. (con o sin torpedos). Su dotación era de dos hombres.
Ambas unidades se conservan como barcos museo.
La clase “Tiburón”
Con el fin de dar relevo a los dos de la clase “Foca”, se construyeron, en los años 60, los SA-51 y SA-52 que nunca llegaron a ser asignados.
Con un desplazamiento de 76,8 tn., su eslora era de 18,8 m., 1,72 de manga y 2,4 de puntal. Disponían de dos motores diésel “Pegaso” y dos eléctricos que le proporcionaban una potencia de 230 cv. en superficie y 220 en inmersión. Portaban dos torpedos. Su velocidad oscilaba entre los 10 y los 14,5 nudos; su cota operativa de 90 m. y su dotación de cinco hombres.
Dados de baja en los años 60, los dos ejemplares se conservan.
Submarino “Tramontana” (S-74)
La clase “Delfín”
Integrada por los “Delfín” (S-61), “Tonina” (S-62), “Marsopa” (S-63) y “Narval” (S-64), fueron construidos en la factoría de la E.N. Bazán de Cartagena, causando alta entre 1973 y 1975, siendo dados de baja entre el 2003 y el 2006.
Basados en la clase francesa “Danphe”, desplazaban entre 1.038 tn. en inmersión y 860 en superficie. Con una eslora de 57,57 m., 6,74 de manga y 4,6 de puntal, disponían de dos motores diésel y dos eléctricos que les proporcionaban una potencia de entre 1.224 cv. en superficie y 1.600 en inmersión. Alcanzaban un andar de 13,2 nudos en superficie y 15,5 en inmersión y su cota táctica era de 300 m.
Contaban con un radar, dos sónares y un telémetro acústico, además de un detector de radar para guerra electrónica. Su armamento consistía en ocho tubos lanzatorpedos de 550 mm. en proa, dos en popa y dos en las aletas, todos del mismo calibre.
Su dotación era de 56 tripulantes.
La clase “Galerna”
Construidos en la E.N. de Bazán de Cartagena en los años 70, basados en la clase francesa “Agosta”, causaron alta en la LOBA entre 1983 y 1986, recibiendo los nombres de “Galerna” S-71; “Siroco” (S-72); “Mistral” (S-73) y “Tramontana” (S-74). De ellos el “Siroco” y el “Mistral” fueron dados de baja en 2012 y 2020, respectivamente, manteniéndose los otros dos operativos.
“Isaac Peral” (S-81)
Desplazan 1.490 tn., con una eslora de 67,57 m., 6,8 de manga y 5,4 de puntal, disponen de dos motores diésel, uno eléctrico y uno de crucero que les proporcionan una potencia de entre 3.600 cv. en superficie y 4.600 en inmersión, con un andar de 12 nudos en superficie y 20,5 en inmersión y su cota máxima operativa es de 300 m.
Disponen de radar Thomson-CSF DRUA 33C; sónar Thales DUUX 5 y DSUV 22 y elementos de guerra electrónica. Van armados cuatro tubos lanzatorpedos de 550 mm. Su dotación es de 60 tripulantes.
Y, en breve, los “S-80” –“Isaac Peral” (S-81), “Narciso Monturiol” (S-82), “Cosme García” (S-83) y “Mateo García de los Reyes” (S-84). La historia continúa.
Autor
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José Eugenio Fernández Barallobre, español, nacido en La Coruña. Se formó en las filas de la Organización Juvenil Española, en la que se mantuvo hasta su pase a la Guardia de Franco. En 1973 fue elegido Consejero Local del Movimiento de La Coruña, por el tercio de cabezas de familia, y tras la legalización de los partidos políticos, militó en Falange Española y de las J.O.N.S.
Abandonó la actividad política para ingresar, en 1978, en el entonces Cuerpo General de Policía, recibiendo el despacho de Inspector del Cuerpo Superior de Policía en 1979, prestando servicios en la Policía Española hasta su pase a la situación de retirado.
Es Alférez R.H. del Cuerpo de Infantería de Marina y Diplomado en Criminología por la Universidad de Santiago de Compostela.Está en posesión de varias condecoraciones policiales, militares y civiles y de la "F" roja al mérito en el servicio de la Organización Juvenil Española.
Fundador de la Comisión Promotora de las Hogueras de San Juan de La Coruña, del Museo Policial de la J.S. de Policía de Galicia y de la Orden de la Placa y el Mérito de Estudios Históricos de la Policía Española.
Premio de narrativa "Fernando Arenas Quintela" 2022
Publicaciones:
"El Cuerpo de Seguridad en el reinado de Alfonso XIII. 1908-1931" (Fundación Policía Española)
"La uniformidad del Cuerpo de Seguridad en el reinado de Alfonso XIII 1887-1931 (LC Ediciones 2019)
"Catálogo del Museo Policial de La Coruña". Tres ediciones (2008, 2014 y 2022)
"Historia de la Policía Nacional" (La Esfera de los Libros 2021).
"El Cuerpo de la Policía Armada y de Tráfico 1941-1959" (SND Editores. Madrid 2022).
"Policía y ciudad. La Policía Gubernativa en La Coruña (1908-1931)" (en preparación).
Otras publicaciones:
"Tiempos de amor y muerte. El Infierno de Igueriben". LC Ediciones (2018)
"Historias de Marineda. Aquella Coruña que yo conocí". Publicaciones Librería Arenas (2019).
"El sueño de nuestra noche de San Juan. Historia de la Comisión Promotora de las Hogueras de San Juan de La Coruña". Asociación de Meigas (2019).
"Las Meigas. Leyendas y tradiciones de la noche de San Juan". Comisión Promotora de las Hogueras de San Juan de La Coruña (2011).
"Nuevas historias de Marineda. Mi Coruña en el recuerdo". Publicaciones Arenas (2022). Ganadora del premio de ensayo y narrativa "Fernando Arenas Quintela 2022".
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Lo editado correspondiente al S-80 plus es completamente erróneo . Yo no sé de dónde ha sacado Usted esa información , pero ya le digo con plena seguridad que esas características están equivocadas .