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Entrevista a Francesco Giubilei, editor de Historica y Giubilei Regnani, profesor de la Universidad Giustino Fortunato de Benevento y presidente de la Fundación Tatarella. Es autor de ocho libros, entre ellos  “Giorgia Meloni. La mujer al frente del partido revelación de Italia”, publicado en España por Homo Legens. En 2017 fundó la asociación Nazione Futura, es miembro del comité científico de algunas fundaciones y de los Aspen Junior Fellows. Fue incluido por “Forbes” entre los 100 jóvenes menores de 30 años más influyentes de Italia.

¿Qué es Nazione Futura? ¿Cuáles son sus objetivos?

Nazione Futura es un think tank nacido en 2017, que en los años siguientes se ha convertido en el principal think tank conservador italiano. La actividad de Nazione Futura se materializa en la publicación de una revista trimestral en papel, un periódico en línea, la organización de conferencias y reuniones, y mediante las actividades de más de 70 clubes locales en toda Italia. Nuestro objetivo es llevar a cabo una serie de batallas político-culturales y difundir los valores del conservadurismo tanto en Italia como en Europa. Hemos logrado obtener resultados importantes a partir de la legitimación del término conservador en el debate político italiano y hemos librado una importante batalla sobre el tema del conservadurismo verde,  al explicar cómo el medio ambiente no es solo un tema querido por la izquierda, y centrándonos en la relación entre el mundo de la política y los think tanks y las fundaciones.

En octubre estuvo en Budapest en la formación de la Alianza por el Bien Común (ACG) junto con organizaciones de los países de Visegrado. ¿Cree que Hungría y Polonia son el modelo a seguir para los conservadores europeos?

Hemos firmado una colaboración con algunas de las principales fundaciones de Europa Central con el objetivo de llevar a cabo iniciativas sobre temas comunes que incluyen las realidades húngara y polaca. Lo que está sucediendo en Hungría y Polonia debe seguirse atentamente. Es necesario partir del supuesto de que cada nación tiene su propia historia y del respeto a las voluntades populares. Si húngaros y polacos han votado por gobiernos de derecha, es necesario respetar su voluntad, si falta este respeto significa que se cuestiona el concepto mismo de democracia.

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También mantiene buenas relaciones con organizaciones fuera de Europa y se manifiesta a favor de una Internacional Conservadora. ¿Es posible una respuesta global a la cultura de la cancelación y a lo políticamente correcto?

No solo es posible una respuesta a la cultura de la cancelación y lo políticamente correcto, sino que es necesaria, y la única forma de lograrlo es una gran alianza entre los conservadores occidentales que sea transversal entre el mundo cultural y político, y que se base sobre todo en el respeto al sentido común. Es asombroso cómo un concepto básico como el sentido común ahora se ha perdido por completo y cosas que hasta hace unos años damos por sentadas hoy de repente se han vuelto inaceptables. Los hábitos seculares, los estilos de vida que siempre han caracterizado a nuestra civilización están siendo atacados y corresponde a los conservadores defenderlos. Nos enfrentamos a una batalla que no afecta a un solo estado, sino a toda la comunidad internacional y, por lo tanto, exige respuestas compartidas de los conservadores de todo el mundo.

Usted reveló el infame documento de la Comisión Europea en el que se recomendaba no felicitar la Navidad para no ofender. Ante el escándalo, la Comisión se ha echado atrás.

Fue un logro importante. Tras la primicia, que hicimos con el diario “Il Giornale”, hubo un posicionamiento del mundo político, no sólo en Italia sino en toda Europa, y se produjo un resultado importante y evidente: la Comisión Europea retiró el documento. Se trataba de un texto de consumo interno con las “pautas para la comunicación inclusiva” y con una serie de indicaciones increíbles que incluían la prohibición de usar la palabra Navidad o los nombres María y Juan por ser cristianos. En principio se trataba de un documento con una serie de indicaciones sobre comunicación, pero en realidad era algo más profundo y representaba el intento de revisar nuestra sociedad discutiendo costumbres y hábitos y llevando a cabo un verdadero ataque a las raíces cristianas de Europa.

La deriva ideológica de la Comisión Europea es cada vez mayor, ¿podrá sobrevivir la UE a esta ideología globalista? 

Necesitamos repensar la Unión Europea actual construyendo una Europa diferente que sea una Europa de pueblos y naciones que realmente se preocupe por los intereses de los ciudadanos, evite las derivaciones ideológicas y no se avergüence de su propia historia e identidad. La UE actual se rige por un sistema que no sólo no toma en consideración nuestras tradiciones sino que quiere borrarlas a través de un principio que Roger Scruton define como “oikofobia”, el odio a la patria propia y, por tanto, a la propia historia. A veces parece que estamos asistiendo a una especie de cultura de cancelación institucionalizada.

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Respecto a Italia, ¿cómo ve la correlación de fuerzas entre Lega y FdI? ¿Quién cree que liderará la derecha italiana?

El centro-derecha en Italia siempre ha tenido un acuerdo según el cual el partido de la coalición que sacara más votos sería el líder de la coalición (o en caso de victoria el primer ministro), así fue durante un año con Silvio Berlusconi y luego con Matteo Salvini, y así será cuando se vote. Hoy, Lega y FdI se disputan el liderazgo de la coalición, tanto Meloni como Salvini lideran dos grandes partidos con puntos en común pero también con varias diferencias, y serán los italianos quienes decidan quién será el próximo líder del centro-derecha.

Visto lo que está sucediendo en Italia con la imposición del pasaporte Covid, ¿cree que habrá pronto elecciones o hay gobierno Draghi para rato?

En febrero se elegirá al nuevo Presidente de la República que será el sucesor de Mattarella, existen varios escenarios posibles entre ellos la elección de Mario Draghi. De ser así, sería posible volver a votar en 2022, de lo contrario tendríamos que esperar hasta 2023. La victoria del centro-derecha no es segura ya que hay varios escenarios donde existe la posibilidad del nacimiento de una nueva coalición de centro, mientras que el Partido Demócrata y el Movimiento Cinco Estrellas permanecerán unidos en las elecciones.

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Álvaro Peñas