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Mi padre decía que había que tener amigos hasta en el infierno, y lo decía porque entendía bastante bien como funcionaba el mundo.
Dentro de cualquier grupo, por secreto y hermético que este sea, existen fugas de información.
En los opacos conciliábulos de la eugenésica y satánica elite, indefectiblemente, también ocurre lo mismo.
Nunca sabes con quién estás hablando ni quién es en realidad quien te está contando aquella historia rocambolesca, pero para algunos que llevamos ya mucho tiempo en el camino, hay cosas que ya nos las imaginábamos.
A continuación voy a relatar lo que ocurrirá seguidamente, según alguien que dice formar parte de dicho grupo de poder que controla el mundo tras bastidores (elite económica).
Las mal denominadas vacunas son una herramienta de despoblación. Eso lo llevamos repitiendo desde antes de que salieran al mercado, ya que para algunos era obvio que todo estaba siendo planificado.
La “mRNA” (eso que llaman vacuna) es una manera de reescribir la biología humana, o sea, reprogramación del DNA/ADN. Esto también lo sabemos y así lo llevamos explicando mucho tiempo.
Ahora viene lo interesante:
Según este tipo, tras el “booster” (acelerador) hay algo llamado “IGG4” que queda activado de manera perenne. Como si fuera una especie de suplantador dentro de la célula cuya función fuera determinar que es un enemigo y que no lo es. Para decirlo de manera más simple y concreta, sería quién decidiría quién puede entrar y quién no.
– ¡Hola!
– ¿Quién va?
– Soy la COVID.
– Déjala pasar que la conozco, es buena gente.
– Pasa, pasa guapa…
Así, ya tenemos el “caballo de Troya” en el interior de las personas, ya que aparecían en la lista de los invitados que podrán entrar en la “fiesta”.
Y la fiesta está planificada para muy pronto, posiblemente para el próximo otoño 2023. Casi todos están invitados, menos los conspiranoicos negacionistas que se quedarán fuera de esta multitudinaria “celebración”.
Será entonces cuando la última cepa del COVID será soltada para que ejecute su función.
Según explica, la fatalidad será de un 90% para los que tengan en su interior el IGG4 activado y añade, que estaría muy próxima a la cifra de referencia recomendada por las piedras guía de Georgia (1) (2).
Alrededor de 5,000 millones de humanos. 3,000 millones de manera directa (por la activación mediante el «IGG4”) y otros 2,000 por las consecuencias de lo que se desencadenará. Somos 7,900 millones en la actualidad, menos 5 billones, nos da la cifra -mucho más fácil de controlar- de 2,500 millones de humanos tras el reseteo.
Siempre según este sujeto, al mismo tiempo habrá un “disclosure” (divulgación) global donde se expondrá que la culpa de todo es de las mal llamadas «vacunas», y que los gobiernos sabían perfectamente lo que causarían.
Desde todo el aparato mediático controlado por “ellos”, se responsabilizará a los gobiernos y así – ineludiblemente – se generará el caos más terrorífico.
Una guerra mediática que esta vez atacara a las instituciones gubernamentales de cada nación, culpabilizándolos a ellos del genocidio en marcha del 90% de los inyectados como se informará reiteradamente.
En plena nueva pandemia, los infectados (inyectados) se revolverán contra el gobierno y contra todo lo que se les ponga por delante, dejando los países en el caos más absoluto como nadie se puede imaginar.
¿Cómo reaccionará uno de esos que se creyó el cuento, sabiendo que lo engañaron y que, debido a esa colosal trola, está condenado a muerte?
Mejor no imaginárselo, aunque si esto es cierto, las películas de zombis nos van a parecer una comedieta amena de Ozores.
El colapso de los servicios básicos como el agua, la electricidad, los aeropuertos, los bomberos, la policía, el ejército, los antes alegres hospitales donde bailaban los simpáticos matasanos y las chachis charitos transTikTokrnadas (enfermierdas), y todo, estará colapsado mientras la gente perece por millones y sin remedio por las calles.
Según este personaje, los que saben del tema, lo llaman “el proceso”. Supongo hará alusión tanto a un “proceso” de «tránsito» como de “juicio”.
Que dios nos pille confesados a todos. Aunque para los no inyectados -con el mejunje genético-, tan solo sería un resfriado normal, las consecuencias también nos afectarían si esto es cierto.
La verdad es que las informaciones sobre muertes – “repentinitis” -, enfermedades extrañas y todo tipo de efectos secundarios causados por esas vacunas recomendadas y patrocinadas por los gobiernos, cada día son más habituales y ya no solo en los medios contrarios, sino incluso en los afines a los gobiernos.
¿Será esto el comienzo del “proceso”? Veremos que sucede tras el recreo vacacional…
Acordemonos de esta fecha: 23 de Septiembre: https://ntvespana.com/13/06/20
(1)https://es.wikipedia.org/wi
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