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Esta mañana, con mucho disgusto y no menos preocupación, tuve conocimiento, pues así me lo contaron, de que lo mismo que sucedió, o al menos algo parecido, el otro día en el colegio La Salle de Palma de Mallorca, aconteció hoy en una clase del Colegio Santo Domingo de La Coruña, donde tampoco permitieron a unos alumnos colocar una Bandera de España para animar a nuestro equipo Nacional.
Al parecer, otra estúpida pijoprogre de esas que tanto abundan, prohibió a un grupo de alumnos colocar una Enseña Nacional argumentando, y esto ya es el colmo, que en su clase que no quería “símbolos políticos”.
Tal vez, esta ignorante patana desconozca el artículo 4º, apartado 1º de la Constitución vigente, la norma suprema que rige el funcionamiento del Estado que dice: “La Bandera de España está formada por tres franjas horizontales, roja, amarilla y roja, siendo la amarilla de doble anchura que cada una de las rojas» que es la que pretendieron colocar los chavales. Por tanto, no se trata de un símbolo político, sino del sagrado símbolo de la Patria, tanto le guste como que no a esta individua que debería ser corregida de inmediato por la dirección del Centro, llegando incluso a su expulsión.
Estoy seguro de que, si en lugar de colocar una bandera de España, colocasen cualquier otra, incluida la multicolor del movimiento lgtbi, no habría tenido nada que objetar, antes bien todo lo contrario como sucede en las ventanas posteriores del rectorado de la Universidad de La Coruña donde, desde hace meses, cuelgan dos banderas del arco iris, financiadas por la propia Universidad ya que así lo indican las leyendas que figuran en la tela.
Igualmente, recordamos aquella mañana que, a la salida del mismo colegio dominico, los niños ondeaban la bandera de la CEE aduciendo de que celebraban el día de Europa. Jamás los vi con una de nuestra Patria pese a que, anualmente, se celebra el Día de la Fiesta Nacional e incluso el de instauración de la Enseña rojo y gualda como símbolo de la Nación.
En cualquier caso, la lectura final es que puede ondear cualquier bandera, sea de lo que sea, menos la nuestra, la de España perseguida por cuanto estúpido y estúpida -de estas hay más que de aquellos- pijoprogres que son los encargados de mal formar a nuestras juventudes al haber permitido que la educación caiga en manos de la izquierda.
Es vergonzoso e intolerable que, en un Colegio de los Dominicos, el mismo en el que tuve el honor de formarme, una idiota, inculta e indocumentada trate de hacer política barata a cuenta de la Bandera de todos los españoles.
Evidentemente, con tropilla como esta, así nos va y, con ello, están logrando desarmar a nuestra juventud de todo tipo de valores salvo todos esos derivados de los mandatos de la perniciosa Agenta 2030: falso ecologismo, animalismo a ultranza, asimilación de la cultura lgtbi, etc., que cumplen al pie de la letra y, de paso, tratan de inculcar al alumnado un odio visceral a España, a su historia y a todo lo que ella representa.
Señora, además de imbécil en grado supino, es usted un elemento tóxico para nuestra juventud y, por supuesto, indigna de dedicarse a la docencia. Realmente, me produce lástima.
Ya está bien de tolerar actitudes como la de esta mequetrefe que se permite ofender y degradar al símbolo más sagrado que tiene la Nación: su Bandera y mi felicitación a esos chavales que siguen siento los colores de nuestra Patria.
Autor
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José Eugenio Fernández Barallobre, español, nacido en La Coruña. Se formó en las filas de la Organización Juvenil Española, en la que se mantuvo hasta su pase a la Guardia de Franco. En 1973 fue elegido Consejero Local del Movimiento de La Coruña, por el tercio de cabezas de familia, y tras la legalización de los partidos políticos, militó en Falange Española y de las J.O.N.S.
Abandonó la actividad política para ingresar, en 1978, en el entonces Cuerpo General de Policía, recibiendo el despacho de Inspector del Cuerpo Superior de Policía en 1979, prestando servicios en la Policía Española hasta su pase a la situación de retirado.
Es Alférez R.H. del Cuerpo de Infantería de Marina y Diplomado en Criminología por la Universidad de Santiago de Compostela.Está en posesión de varias condecoraciones policiales, militares y civiles y de la "F" roja al mérito en el servicio de la Organización Juvenil Española.
Fundador de la Comisión Promotora de las Hogueras de San Juan de La Coruña, del Museo Policial de la J.S. de Policía de Galicia y de la Orden de la Placa y el Mérito de Estudios Históricos de la Policía Española.
Premio de narrativa "Fernando Arenas Quintela" 2022
Publicaciones:
"El Cuerpo de Seguridad en el reinado de Alfonso XIII. 1908-1931" (Fundación Policía Española)
"La uniformidad del Cuerpo de Seguridad en el reinado de Alfonso XIII 1887-1931 (LC Ediciones 2019)
"Catálogo del Museo Policial de La Coruña". Tres ediciones (2008, 2014 y 2022)
"Historia de la Policía Nacional" (La Esfera de los Libros 2021).
"El Cuerpo de la Policía Armada y de Tráfico 1941-1959" (SND Editores. Madrid 2022).
"Policía y ciudad. La Policía Gubernativa en La Coruña (1908-1931)" (en preparación).
Otras publicaciones:
"Tiempos de amor y muerte. El Infierno de Igueriben". LC Ediciones (2018)
"Historias de Marineda. Aquella Coruña que yo conocí". Publicaciones Librería Arenas (2019).
"El sueño de nuestra noche de San Juan. Historia de la Comisión Promotora de las Hogueras de San Juan de La Coruña". Asociación de Meigas (2019).
"Las Meigas. Leyendas y tradiciones de la noche de San Juan". Comisión Promotora de las Hogueras de San Juan de La Coruña (2011).
"Nuevas historias de Marineda. Mi Coruña en el recuerdo". Publicaciones Arenas (2022). Ganadora del premio de ensayo y narrativa "Fernando Arenas Quintela 2022".
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