28/04/2024 07:02
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Pudieran ser un matrimonio de conveniencia, pero no. La emergente barones extremeña es un calco ideológico de Feijóo y su ariete, desde las elecciones, para intentar replicar, con el mediocre López Miras, la jugada andaluza/madrileña que el PP presenta como base para su relato estratégico-táctico con respecto a VOX, al objeto de iniciar el fin de VOX. También para hacer el PP “inclusivo” que es su horizonte.

La convocatoria sorpresa de Sánchez, que muchos esperaban para septiembre, no ha hecho más que acelerar la construcción de ese relato en cuya difusión participan con esmero un grupo de «mentirosos» formado por Borja Semper, López Miras, Martínez Almeida, María Guardiola y Núñez Feijóo…. Bien flanqueados por su corte de periodistas/tertulianos, que más son correas de transmisión del partido que analistas, a no ser que sean ellos los que acaban fijando el argumentario del partido.

El objetivo de Feijóo con respecto a VOX no es distinto del que tenían en su agenda el tándem Casado-Egea. VOX cumplía, y así se comportó, el papel de acumular el voto del descontento, de la desafección del seguidor del PP, y del abstencionismo de derechas (por definirlo de algún modo). Un voto que luego Abascal, aún condicionado por sus lazos con el PP, le entregaría sin contrapartidas bajo el mantra del miedo a la izquierda. Con mencionar el patriotismo para evitar al PSOE y a Sánchez se les invitaba, como mínimo, a la abstención; a caer en el engaño de unos compromisos que nunca pensaron cumplir (ejemplo claro es la política seguida por López Miras en Murcia).

Dicen que el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra, pero parece que Abascal, a media campaña pasada, se dio cuenta de la trampa saducea digna de un gallego como Feijóo. El político que blasonaba de haber impedido que en la Galicia, con el miedo a la izquierda por medio, emergiera VOX. En realidad no había impedido nada, porque muchos de los puntos flacos de VOX tienen una explicación interna derivada de sus limitaciones en el trabajo para la expansión territorial.

VOX tiente tres grandes adversarios: el voto útil/voto del miedo (contrarrestado por un sólido suelo que es posible situar en el 10%); su falta de presencia en los grandes medios televisivos con déficits en la política de comunicación (es a nivel territorial lo que ha limitado su crecimiento en autonómicas y locales, que podría haber sido mayor); que sus votantes inicien un proceso de desafección al contemplar que su voto, al final, no sirve para nada (una cosa es estar en la oposición, aunque sea con gobiernos del PP, y otra entregar los votos a cambio de nada que implicaría la lenta consunción del partido).

El PP y Núñez Feijóo han asumido ese marco y ahora buscan acelerar el proceso. Para ello, contando con los altavoces necesarios, han construido el relato, a base de mentiras y medias verdades, en el que Martínez Almeida se parece cada vez más al portavoz que no quería ser. El relato es fácil: allí donde VOX se ha enfrentado al PP y se ha puesto a reclamar cosas, pasa a la irrelevancia y el ejemplo es Madrid o Andalucía . Y todos le aplauden.

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La realidad es que lo aparente no es exactamente cierto. Lo que dicen los resultados es que en Andalucía, donde el apoyo de VOX al gobierno de Moreno Bonilla no sirvió para nada, y en Madrid VOX resistió. El relativo fracaso en Andalucía fue debido a errores propios de VOX más que a otra cosa; la mayoría absoluta en Madrid Comunidad y Ayuntamiento del PP no es el resultado de un hundimiento de VOX, que asiste a la maniobra de Díaz Ayuso de suplantar, con permiso de Feijóo, el discurso de VOX, sino de la falta de unos miles de votos a PODEMOS. Y, desde mi punto de vista, hay que leer el relato a la inversa: precisamente, por no saber ser oposición al PP en Madrid o en Andalucía se produjo el estancamiento y la desafección, paliada por el fenómeno del cambio de voto hacia VOX de sectores que le eran refractarios (votantes de izquierda que no son de izquierda).

Ahora, Feijóo, tras aceptar el pacto valenciano, porque no le quedaba otro remedio, tras asumir una componenda en Baleares y asegurar por la dificultad de controlar los pactos los ayuntamientos, tiene que retomar el camino de intentar acabar con VOX (igual que Sánchez anotó que tenía que acabar con PODEMOS) debilitándolo electoralmente. Y ello pasa no por medios propositivos sino por el mantra del miedo a Sánchez (nada nuevo en el mundo pepero, primero hay que sacrificarse para echar a Sánchez y luego ya veréis como el PP cambia las políticas, cosa que no ha hecho desde los tiempos de Fraga).

Debilitar a VOX para conseguir su objetivo: un gobierno en minoría. Esa es la táctica de Núñez Feijóo. Y en ese camino se han realizado los esponsales de los «mentirosos».  Así el sucesor de Casado (¿estuvo detrás de la maniobra para destronarle?) encontró a la candidata lanzada por Casado, María Guardiola. Una política de corto recorrido que en su currículum político anota: la alabanza al PSOE de Felipe González frente a eso que llaman el sanchismo; el aplauso  a alabar algunas campañas del Ministerio de Igualdad de la desterrada Irene Montero; por no mencionar su asunción del aborto como un derecho de la mujer…

María Guardiola era la trampa perfecta en el juego de mentiras para llevar a VOX al cadalso. Feijóo encontró en ella (primera afirmación inasumible de la señora Guardiola: que ella no depende-consulta con Feijóo) la pieza necesaria mientras, a buen seguro, le decía al «semper fidelis» López Miras: ¡Tú aguanta!

Si VOX aceptaba la propuesta, pilotada irremediablemente desde Génova, de un acuerdo programático sin fondo, sin garantía de cumplimiento, y se conformaba con cargos rimbombantes (un senador y la presidencia de la asamblea), VOX habrá transigido con las tesis de Guardiola y se vería obligado a aceptar lo mismo en Murcia. Si VOX no acepta (“VOX no tiene más opción que aceptar con unas elecciones a las puertas”, planteamiento de fondo de Feijóo) lo tenemos, porque le responsabilizaremos de llevar al poder a la izquierda (no olvidemos que Fernández Vara ganó las elecciones), porque lo único que quiere son sillones (cuando se dicen estas cosas se suele obviar que lo que reflejan es la forma de pensar de quien lo afirma).

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Y en Génova se han dicho: “Así que todos a una saldremos a rematar el relato afirmando que VOX rechaza un pacto generoso, que solo quiere sillones, que será el responsable de nuevas elecciones, del bloqueo durante meses en Extremadura o Murcia (lo del mediocre López Miras con su tesis del bloqueo es de nota), de permitir que la izquierda pueda gobernar… y todo ello, a través de ese relato, conducirá a un flujo de votantes hacia el PP que nos dará una mayoría suficiente en julio debilitando a VOX, que no podrá ser exigente. Si para ello hay que mentir, se miente”.

Lo único que no entraba en el esquema es que María Guardiola se dejara llevar y dejara al aire su opinión sobre VOX. Compareció con la lección aprendida, con un discurso hecho para respuestas de 10 minutos. Pletórico de medias verdades. Confiada en la complacencia mediática. Pero cuando la entrevista se prolongó, se abrió el tartamudeo, el entrar en bucle y la inconsistencia.

La señora Guardiola, en su discurso porque yo lo digo, incapaz de asumir que no ha ganado, que ni tan siquiera es la lista más votada, que para ser presidenta necesita apoyos y no verborrea exhibió sin pudor su incoherencia política: no se puede afirmar al mismo tiempo que no pactará con VOX, que no hará un gobierno de coalición con VOX y, a renglón seguido, decir que sigue con la mano abierta. Para luego lanzar una serie de argumentos sobre su NO a VOX copiando el argumentario de la izquierda. Eso sí, le ha aplaudido precisamente toda la izquierda, porque ha hecho su discurso y espera que Feijóo siga esa línea. Que seguirá, no lo duden, si en julio no le queda más opción que pactar con VOX. Y con gran lucidez Guardiola se convertía en replicante de Sánchez o Yolanda acusando a VOX y a sus votantes de ser homófobos, racistas, negacionistas, de ir contra los derechos de las mujeres… Lo demás es literatura.

Ahora VOX solo tiene que recordar a sus electores lo que les han llamado para justificar su postura en Extremadura o en Murcia. Y pudiera resultar que ello condujera a un movimiento de péndulo a su favor en los flujos de voto entre partidos.

Y un recuerdo: en gran parte de España el PP no ha ganado realmente las elecciones al bloque de izquierdas. Son los votos y los escaños de VOX los que han expulsado a la izquierda. Creer que esos votos van a ir nuevamente al PP para dejar un Partido Único cuya cúpula asume las tesis de Guardiola es un error. Si en julio Sánchez no puede formar gobierno será porque VOX y no SUMAR sea la tercera fuerza política.

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Geppetto

VOX no tiene los mismos principios ideologicos, morales y políticos del PP o el Psoe.
De manera que sobra.
Y esta rustica moza extremeña, que es mas corta que el rabito de una boina, va a pagar por las politicas de Feijoo y su cuadrilla.
Peor para ella

Aliena

VOX no sólo tiene os mismos principios ( ideológicos, morales y políticos ) que el PP y el PSOE, sino los mismos fines u objetivos, del tipo que sean, que el PP, el PSOE, Podemos, Ciudadanos, separatistas varios, etc, etc, etc, y viva el Rey ( con su chapita de la agenda 2030 ) y viva la Constitución.

MARÍA RAQUEL JIMÉNEZ GARCÍA

LOS ÚNICOS PRINCIPIOS QUE TIENEN TODOS LOS PARTICIPANTES DE LOS DISTINTOS PARTIDOS POLÍTICOS, SON PARASITAR A LOS SERES HUMANOS UTILIZANDO PARA HACERLO UN SISTEMA APOTROPAICO Y NUMEROLOGICO( BASADO EN LAS ANTIGUAS LETRAS HEBREAS Y EN LA KABALA JUDIA).
SUS PRINCIPIOS: ES INTENTAR SEGUIR PERPETUANDO ESTA PARASITACION, QUE LA HUMANIDAD SIGA SUMIDA EN LA IGNORANCIA, Y EN LA DIVISIÓN A LA QUE LA INDUCEN ESTOS PARTIDOS POLÍTICOS, CON LA CONNIVENCIA ABSOLUTA DE TODOS LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN, PUES EN TODOS ELLOS, TIENEN INFILTRADOS A EXCREMENTOS QUE UTILIZAN, LA NUMEROLOGÍA PARA SEGUIR MANTENIENDO IDIOTAS A LOS HUMANOS.
A LO ÚNICO QUE ASISTEN LOS POBRES HUMANOS, DIA TRAS DÍA, ES A UN REPELENTE TEATRO, DONDE LOS QUE SABEN NUMEROLOGÍA, DOMINAN Y ESCLAVIZAN A LOS PROFANOS( ASI LLAMAN LOS MASONES Y DEMAS SECTORES (OPIPAROS CURATOS, ESTIRPES DINASTICAS, 13 FAMILIAS A LAS QUE ALUDEN COMO LOS MAS PODEROSOS, MULTIMILLONARIOS, CLUB BILDERBERG,,PARTIDOS POLÍTICOS, etc….) A LOS QUE NO SABEN NUMEROLOGÍA.

CAMBIAN LOS PUTREFACTOS CROMOS( AZNAR, ZAPATERO, RAJOY, SÁNCHEZ, FEIJO, ABASCAL, IGLESIAS, ERRREJON, DIAZ, SU TIA………….ELIGAN QUE ESTAMOS DE OFERTON………)Y POR ENCIMA DE ELLO, LOS ORGANISMOS INTERNACIONALES MASONES, CONTROLANDO NUMEROLOGICAMENTE A LOS ESTADOS MIEMBROS DE LA FUNCION.

LAS ELECCIONES ES TAN SOLO UN TEATRO DE MASONES, LOS PARTICIPANTES ESTAN PREVIAMENTE DE ACUERDO, CON EL RESULTADO.

ERGO: VOTAR ES A TU INTELECTO, INSULTAR.

CUANDO MOVIMIENTOS SOCIALES HACEN PELIGRAR, ESTE HEDIONDO SISTEMA QUE HAN CREADO Y SE REBELAN CONTRA EL,. (RECUERDA EL RESPETABLE ALGUN MOVIMIENTO DE PROTESTA CIUDADANA? ) LO PRIMERO QUE HACEN ES INFILTRAR A GENTUZA DE LA SUYA PARA PASTOREAR LA REBELIÓN, PARA RECONDUCIRLA, PARA CONSEGUIR POSTERIORMENTE ELIMINARLA. Y PARA ACABAR CON UNA REBELIÓN, LO PRIMERO QUE HAY QUE HACER ES BAUTIZAR EL MOVIMIENTO. Y DE ESO SE ENCARGARAN ELLOS.

ELLOS SE INFILTRAN EN CUALQUIER REIVINDICACIÓN CIUDADANA, Y LA HACEN SUYA. TENIENDO A SU GENTUZA EN TODAS PARTES, ES COMO LOGRAN CONTROLAR CUALQUIER SUBLEVACIÓN CIUDADANA. MAS QUE NADA PORQUE A ELLOS LES IMPORTA UNA ABSOLUTA MIERDA LA HUMANIDAD, SOLO LES INTERESAN SUS INTERESES COMO GRUPO HE INTENTAR PERPETUARSE SOBRE LA IGNORANTE HUMANIDAD, POR ESO COLABORAN TODOS UNIDOS.

LOS QUE CONTROLAN NUMEROLOGÍCAME A LA HUMANIDAD, SON LOS SEÑORES DE LA GUERRA. LA GUERRA PARA ELLOS SIGNIFICA EL NÚMERO 11.LES SUENA, EL 11 DE SEPTIEMBRE DE 2001, EL 11 DE MARZO DE 2004.

SALUDOS DESDE EL NÚMERO DEL UNIVERSO.

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