Getting your Trinity Audio player ready...
|
Esteban nació en 1913 en la localidad vizcaína de Galdácano, pronto le apasionó la aviación y completó el curso de piloto de turismo en 1934 en la escuela de Teo Pombo, en un pequeño campo en Lamiaco.
A la vez que se iniciaba en el arte de volar, junto con su hermano mayor, son los fundadores de la Falange local en su pueblo, aunque su familia políticamente procedía del Carlismo.
Consiguen formar una pequeña pero potente cédula de falangistas vizcaínos, la mayor parte estudiantes afiliados al SEU.
En julio de 1936 y ante el fracaso del alzamiento en Bilbao, Esteban es detenido y encarcelado primero en el buque prisión «Altuna Mendi», allí vio cómo asesinaron a muchos de sus camaradas, pero la fortuna le llevó a un traslado a la cárcel de Larrinaga de la cual fue liberado al entrar las Brigadas Navarras en Bilbao en junio de 1937.
De inmediato, Esteban Ibarreche se alista voluntario y combate como infante en los frentes de Santander y León sobresaliendo en la dura ofensiva del Puerto de Tarna.
Pronto, dada su condición de aviador, es llamado para formar parte del séptimo Curso de Pilotos de Combate que se desarrolló en El Copero y en Badajoz. Después de un intenso cursillo, ya nombrado Alférez Provisional, pasó a formar parte de la «Caza de García Morato», siendo integrado en el 2-G-3, al mando del Comandante Salas.
Su habilidad y valentía le llevan a alcanzar su primera victoria aérea el 14 de mayo de 1938 en la ofensiva sobre Valencia, cuando su escuadrilla escoltaba a una formación de bombarderos hubo de defenderla ante el ataque de 50 cazas enemigos, Esteban derribó un «Rata» en el sector de Allepuz.
Al poco tiempo, el 19 de junio, pilotando como siempre su Fiat-«Chirri» CR32, derribó esta vez un «Chato» sobre la localidad de Puebla de Valverde, luego en el frente de Extremadura el 29 de julio derriba otro «Chato» y cerca de Campanario el 1 de septiembre derriba un «Rata», entrando a formar parte del escogido grupo de «Ases» de la Aviación Nacional.
Ascendido a Teniente ya en la Batalla del Ebro a finales de septiembre y principios de octubre, derriba otro «Rata» y otro «Chato», por fin volando sobre Fuenteovejuna, el día 24 de octubre, derriba su último aparato enemigo, otro «Chato».
A partir de esa fecha, la actividad aérea de la aviación republicana prácticamente desapareció, y no hubo ningún otro combate aéreo.
Esteban, por tanto, durante la Guerra Civil Española obtuvo siete victorias aéreas derribando cuatro I-15 («Chatos»), y tres Polikarpov I-16 («Ratas»).
Una vez finalizada la Guerra Civil, por su brillante actuación en la misma, a Ibarreche se le concede la «Medalla Militar Individual», sus siete derribos de aparatos enemigos tuvieron mucho que ver, igualmente obtuvo la «Cruz Roja del Mérito Militar» y la «Medalla de Sufrimiento por la Patria», al haber estado cautivo en zona roja.
Esteban ya no dejaría de volar nunca, y por eso ingresó en la Academia de Aviación formando parte de su primera promoción.
En 1941, se presenta voluntario en la Primera Escuadrilla Expedicionaria para combatir en Rusia contra el comunismo, la conocida como «1ª Escuadrilla Azul».
Tras un par de semanas en la escuela de caza alemana de Werneuchen, para adaptarse a los nuevos aparatos y material que tenían que utilizar, ya con sus nuevos aviones Messerschmitt Bf-109E marchan a Minsk en septiembre y de allí al aeródromo de Moschna, donde son encuadrados en el 27 Grupo de Asalto de la Aviación Alemana.
Durante su estancia en Rusia, Ibarreche realizó más de 450 misiones de guerra, fundamentalmente de ataque al suelo y apoyo a la infantería, y participó en muy pocos combates aéreos contra la aviación soviética al igual que todos sus camaradas, a pesar de lo cual, Esteban logró derribar un biplano ruso el 13 de octubre sobre el aeródromo enemigo de Kalinin.
Por su brillante actuación fue condecorado con la «Cruz de Hierro» de Primera y Segunda Clase, así como con la «Cruz de la Orden del Mérito del Águila Alemana» de Tercera Clase.
La Primera Escuadrilla Azul fue relevada por la segunda, y Esteban al regresar a España es ascendido a Capitán y destinado al 21 Regimiento de Caza, dedicándose a una importante labor en el campo de la enseñanza en vuelo, especialmente adiestrando a los siguientes miembros de las sucesivas escuadrillas azules.
Pero su salud le jugó una mala pasada obligándole a irse apartando de la aviación y ello a pesar de que casi diariamente realizaba cientos de filigranas y acrobacias en el cielo de Villafría.
Al poco de ascender a Teniente Coronel, y ostentar la Jefatura del Sector Aéreo de Burgos, el 15 de septiembre de 1963, falleció repentinamente despegando su alma en un último vuelo hacia el paraíso de los «Guerreros Azules».
Fue ascendido a General de Brigada a título póstumo.
Ibarreche, en su condición de falangista, formó parte del escogido grupo de pilotos, que tanto durante la Guerra Civil como después en los cielos de Rusia, llevaron al triunfo sus «alas azules».
( fotografia de Ibarreche en el frente ruso, es el de la derecha. En esta reseña ha colaborado » Azul Bilbao» , otro de los Guardianes de la Memoria Azul)
Autor
Últimas entradas
- Actualidad26/12/2023Reinventando la historia. Magnicidio frustrado. Por Fernando Infante
- Destacados15/08/2023Lepanto. ¿Salvó España a Europa? Por Laus Hispaniae
- Actualidad15/08/2023Entrevista a Lourdes Cabezón López, Presidente del Círculo Cultural Hispanista de Madrid
- Actualidad15/08/2023Grande Marlaska condecora a exdirectora de la Guardia Civil