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Este es un breve resumen histórico bíblico, con un artículo en cada día del Triduo desde su punto de vista histórico y lo cerrare con una reflexión para el Domingo de Resurrección, a petición de Álvaro Romero.
El Hijo de Dios dijo desde La Cruz, ¨Todo está cumplido¨. Y lo cumplió en tres días, un Triduo Pascual que celebra La Iglesia anualmente en recuerdo de aquel acontecimiento, que en el fondo está en cada Eucaristía. En el Triduo es donde se consagran los oleos de los confirmandos, catecúmenos y enfermos, y en La Vigilia Pascual se bautizan y reciben los demás sacramentos de iniciación cristiana. Que pudiendo recibirlos durante todo el año, se reciben en esos tres días para conmemorar que en tres días se cumplió todo.
¿Qué pasó de histórico esos tres días, siendo breve y para los profanos en la materia?
Hay que empezar por el principio, se cumple el Génesis, ese libro de la Biblia que dicen que no es histórico en sus dos o tres primeros capítulos, sobre todo en el sentido de que Dios hiciera al hombre del barro. Pero se olvidan que siempre se ha llamado el proto-evangelio, la primera buena noticia de esperanza que dio Dios al hombre después de haber sido expulsado del paraíso por culpa de Lucifer:
¨Entonces Yahvé Dios dijo a la serpiente: «Por haber hecho esto, maldita seas entre todas las bestias y entre todos los animales del campo. Sobre tu vientre caminarás, y polvo comerás todos los días de tu vida. Enemistad pondré entre ti y la mujer, entre tu linaje y su linaje: él te pisará la cabeza mientras acechas tú su calcañar.» (Gen 3,14-15)
las genealogías (génesis) de Jesucristo son tres veces catorce desde Abraham, aunque Lucas continuará el linaje hasta Dios:
¨…y Jacob engendró a José, el esposo de María, de la que nació Jesús, llamado Cristo. Así que el total de las generaciones son: desde Abrahán hasta David, catorce generaciones; desde David hasta la deportación a Babilonia, catorce generaciones; desde la deportación a Babilonia hasta Cristo, catorce generaciones. El origen de Jesucristo fue de esta manera: Su madre, María, estaba desposada con José y, antes de empezar a estar juntos ellos, se encontró encinta por obra del Espíritu Santo.¨ (Mateo 1,16-18)
Empezando por Abraham, al que le promete la descendencia que según San Pablo se refería a Jesucristo, Él es el principio y el final en toda la Escritura, porque es el Alfa y la Omega, sin duda un ¨número infinito¨, porque la descendencia de Cristo es como la arena de las playas y las estrellas del cielo, nadie lo puede contar.
Disculpadme por esta pequeña travesura ¨kabalística¨ del número π (pi 3,14), pero es para burlarme de la geometría Masónica que ha rechazado a Jesucristo y prefieren sus cábalas y sus demonios, cuando estos están sentenciados. Obviamente esto no es cábala, es Sabiduría de Dios, oculta a los Sabios de Sion, y mil veces por encima del universo matemático, del espacio y del tiempo. Aunque no es ninguna broma, porque lo profetizado por Dios se cumple después de esas 42 generaciones desde de la promesa a Abraham, ¨todo está cumplido¨
¿Y qué se cumple desde Abraham hasta Jesucristo? Tres Alianzas que son tres ¨generaciones¨:
¨El Ángel de Yahvé llamó a Abrahán por segunda vez desde el cielo y le dijo: «Por mí mismo juro, oráculo de Yahvé, que por haber hecho esto, por no haberme negado tu hijo, tu único, yo te colmaré de bendiciones y acrecentaré muchísimo tu descendencia como las estrellas del cielo y como las arenas de la playa, y se adueñará tu descendencia de la puerta de sus enemigos. Por tu descendencia se bendecirán todas las naciones de la tierra, en pago de haber obedecido tú mi voz.» (Gen 22,15-18)
He aquí lo histórico de la Alianza futura y a la vez presente de la descendencia (Jesucristo) y todos sus hijos, en Él. Vamos con la segunda Alianza:
¨Moisés subió al monte de Dios y Yahvé lo llamó desde el monte, y le dijo: «Habla así a la casa de Jacob y anuncia esto a los hijos de Israel: «Vosotros habéis visto lo que he hecho con los egipcios, y cómo os he llevado sobre alas de águila y os he traído a mí. Ahora, pues, si de veras me obedecéis y guardáis mi alianza, seréis mi propiedad personal entre todos los pueblos, porque mía es toda la tierra; seréis para mí un reino de sacerdotes y una nación santa.» Éstas son las palabras que has de decir a los israelitas.» Moisés fue y convocó a los ancianos del pueblo y les expuso todas estas palabras que Yahvé le había mandado. Todo el pueblo a una respondió: «Haremos todo cuanto ha dicho Yahvé.» Moisés transmitió a Yahvé las palabras del pueblo. Yahvé dijo a Moisés: «Yo me acercaré a ti en una densa nube para que el pueblo me oiga hablar contigo, y así te crea para siempre.» Y Moisés refirió a Yahvé las palabras del pueblo.¨ (Éxodo 19,3-9)
He aquí también lo cumplido en esta 2º Alianza en Jesucristo cuando le hablo Dios desde el Cielo como prometió a Moisés:
¨Y se transfiguró delante de ellos: su rostro se puso brillante como el sol y sus vestidos se volvieron blancos como la luz. En esto, se les aparecieron Moisés y Elías que conversaban con él. Tomando Pedro la palabra, dijo a Jesús: «Señor, bueno es estarnos aquí. Si quieres, haré aquí tres tiendas, una para ti, otra para Moisés y otra para Elías.» Todavía estaba hablando, cuando una nube luminosa los cubrió con su sombra y de la nube salió una voz que decía: «Este es mi Hijo amado, en quien me complazco; escuchadle.«(Mateo 17,2-5)
¿Qué hacía Moisés en la nube? Dios se lo prometió ¨Yo me acercaré a ti en una densa nube¨, para que hablando a su Hijo amado vieran como cumple Dios sus promesas y crean en El, en Jesucristo, al cual también le hablo en el Jordán, a la otra orilla, en la orilla de la tierra prometida (aquí no voy a entrar ahora) y también:
¨Una vez bautizado Jesús, salió luego del agua; y en esto se abrieron los cielos y vio al Espíritu de Dios que bajaba como una paloma y venía sobre él. Y una voz que salía de los cielos decía: «Este es mi Hijo amado, en quien me complazco¨ (Mateo 3,16-17)
Vamos con la tercera y última Alianza del Reino eterno, que no tendrá fin:
¨Ahora, pues, di esto a mi siervo David: Así habla Yahvé Sebaot: Yo te he tomado del pastizal, de detrás del rebaño, para que seas caudillo de mi pueblo Israel. He estado contigo dondequiera has ido, he eliminado de delante de ti a todos tus enemigos y voy a hacerte un nombre grande como el nombre de los grandes de la tierra. Fijaré un lugar a mi pueblo Israel y lo plantaré allí para que more en él; no será ya perturbado y los malhechores no seguirán oprimiéndolo como antes, en el tiempo en que instituí jueces en mi pueblo Israel; y te daré paz con todos sus enemigos. Yahvé te anuncia que Yahvé te edificará una casa. Y cuando tus días se hayan cumplido y te acuestes con tus padres, afirmaré después de ti la descendencia que saldrá de tus entrañas, y consolidaré el trono de su realeza. Él constituirá una casa para mi Nombre y yo consolidaré el trono de su realeza para siempre. Yo seré para él padre y él será para mí hijo. Si hace mal, le castigaré con vara de hombres y con golpes de hombres, pero no apartaré de él mi amor, como lo aparté de Saúl, a quien quité de delante de mí. Tu casa y tu reino permanecerán para siempre ante ti; tu trono estará firme, eternamente.» Natán habló a David según todas estas palabras y esta visión. El rey David entró, se sentó ante Yahvé y dijo: «¿Quién soy yo, señor Yahvé, y qué mi casa, que me has traído hasta aquí? Y aun esto es poco a tus ojos, señor Yahvé, que hablas también a la casa de tu siervo para el futuro lejano.¨ (2 Samuel 7,8-19)
Jesús es tomado del pastizal en el establo, Nada este párrafo tiene desperdicio, pero seré breve, alianza para futuro lejano, diez siglos, pues David es del 1040 aprox. antes de Cristo. Un reino eterno, Dios será un Padre y para él un Hijo, una vez más en Jesucristo se cumple esta alianza, por eso decía Jesús:
¨Y entonces verán venir al Hijo del hombre en una nube con gran poder y gloria. Cuando empiecen a suceder estas cosas, cobrad ánimo y levantad la cabeza, porque se acerca vuestra liberación.» Les añadió una parábola: «Mirad la higuera y todos los demás árboles. Cuando veis que echan brotes, sabéis que el verano está ya cerca. Así también vosotros, cuando veáis que suceden estas cosas, sabed que el Reino de Dios está cerca. Yo os aseguro que no pasará esta generación hasta que todo esto suceda. El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán. «Cuidad que no se emboten vuestros corazones por el libertinaje, por la embriaguez y por las preocupaciones de la vida y venga aquel Día de improviso sobre vosotros…¨(Lucas 21,27-34)
No pasara esta generación significa que se acabó el tiempo, es la última Alianza en Cristo, el anunciado y profetizado en toda la Sagrada escritura. La Alianza final en su cuerpo y su Sangre, y no podían saltarse las anteriores alianzas, pues eran necesarias, pero nos desviarían ahora del tema. Dios le da un Nombre sin igual:
¨…se humilló a sí mismo, hecho obediente hasta la muerte, y una muerte de cruz. Por eso Dios lo exaltó sobre todo y le concedió el Nombre-sobre-todo-nombre; de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra, en el abismo, y toda lengua proclame: Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre¨. (Filipenses 2,8-11)
Como hemos visto, las primeras 14 generaciones de Abraham a David son tres Alianzas, eran para un tiempo lejano. También son tres Templos de David a Jesucristo. El hijo de David, Salomón, construye el 1º templo que será destruido por los babilónicos. Desde la deportación a babilonia a Jesucristo se construye el 2º templo durante el reinado de Ciro en el 522 antes de Cristo. Entonces ¿dónde está el tercer templo? El tercer templo nunca se construyó y el segundo fue destruido en el año 70 después de Cristo por las tropas de Tito. Pero en cristo se cumplió lo dicho por Yahvé en la tercera alianza en lo referente al reinado perpetuo y el templo:
¨Yahvé te edificará una casa… Él constituirá una casa para mi Nombre y yo consolidaré el trono de su realeza para siempre. Yo seré para él padre y él será para mí hijo…tu trono estará firme, eternamente…Y aun esto es poco a tus ojos, señor Yahvé, que hablas también a la casa de tu siervo para el futuro lejano.¨ (2 Samuel 7,8-19)
Jesucristo mismo es el templo el tercero y eterno, no construido por manos humanas, sino por Dios:
¨ Jesús contestó: «Destruid este templo, y en tres días lo levantaré». Los judíos replicaron: «Cuarenta y seis años ha costado construir este templo, ¿y tú lo vas a levantar en tres días?». Pero él hablaba del templo de su cuerpo. Y cuando resucitó de entre los muertos, los discípulos se acordaron de que lo había dicho, y creyeron a la Escritura y a la Palabra que había dicho Jesús.¨ (Juan 2,20-22)
El Rey David no pudo construirlo pues tenia las manos manchadas de sangre por las batallas y el templo debía de ser un templo de paz, donde descansara la paz de las naciones, hogares y personas, su yugo es llevadero y su carga ligera, pues sus mandamientos se pueden cumplir y su Espíritu Santo nos lleva como en alas de Águila.
Hay más de 300 profecías en el Antiguo Testamento que anuncian a Jesucristo y se cumplen en Él. Esto ha sido una breve introducción desde un punto de vista Bíblico, pero la riqueza de la Iglesia con su Magisterio, Tradición y la Patrología, es muy amplia y apasionante.
Quedaría relacionar lo cumplido por Jesús, el jueves, viernes y sábado. Que traeré si Dios quiere, esos días.
Autor
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Madrid 1968. Hasta 2013 se dedicó al mundo de la automoción. En Mayo de 2013 comienza su andadura en el mundo editorial con la publicación de diarios digitales. Sierra Norte Digital (de 2013 a 2018)y El Correo de Madrid desde Mayo del 2018 y el Correo de España hasta la actualidad.
En paralelo funda la editorial SND Editores (2014) y el Canal "Con Ñ de España" en Youtube donde emite todos los días.
Es columnista y tertuliano habitual en varios medios de comunicación, entre ellos Mediterráneo Digital, Radio Inter y Radio Ya, Decisión Radio e Informa Radio.
