Éxito de la presentación del libro: "Falange. Historia, cine y cultura"

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Martes 28 de febrero de 2023 , el Espacio Ardemans – centro y librería, lugar de encuentro cultural- ha acogido la presentación del libro de Fernando Alonso Barahona: Falange, historia , cine cultura, editado por SND editores ( febrero 2023 ).

Norberto Pico realizó la presentación del acto recordando la idea de reconciliación y el compromiso cultural que distinguió siempre a José Antonio Primo de Rivera . Palabras que dieron paso a la intervención de Eduardo García Serrano , periodista, escritor, hombre de larga y brillante trayectoria en medios de comunicación e hijo del gran novelista español Rafael García Serrano, uno de los mejores de todo el siglo XX español.

García Serrano recordó anécdotas de La fiel infantería ( 1959 ) película de Pedro Lazaga inspirada en la novela de Rafael García Serrano, que obtuvo el premio nacional de Literatura . El gran cineasta Sam Peckinpah fue un gran admirador de esta inolvidable película.

Fernando Alonso Barahona desgranó los temas esenciales del libro .

El trazo de la trayectoria vital de José Antonio Primo de Rivera es sin duda fascinante, pero no lo es menos la historia dolorida, tremenda de la organización político que el fundó y que fue destrozada por los avatares de la guerra : asesinados Jose Antonio, Onésimo Redondo, Ramiro Ledesma Ramos, Julio Ruiz de Alda , Fernando Primo de Rivera, es decir toda su cúpula directiva y fundadora a excepción de Raimundo Fernández Cuesta , Rafael Sánchez Mazas y Manuel Valdes Larrañaga ( que pasaron también muchos meses en las cárceles republicanas ).

Podemos rescatar a vuelapluma las trayectorias que la Falange y su Fundador vivieron en apenas tres años de existencia. Solo conociendo la esencia de su movimiento, de su íntima historia, de sus alternativas dibujadas , estaremos en condiciones de comprender su propuesta cultural en literatura, cine, teatro o pensamiento . Y desde luego las terribles dificultades que en todos los escenarios tuvieron que lidiar para llevar a cabo las ideas y los proyectos.

Cual fue la esencia vital y cultural del Movimiento creado por Jose Antonio ¿, fue siempre parejo con la peripecia política o acaso tenía personalidad propia y potencialidad de supervivencia mas allá de aquella ¿. La reflexión no es baladí por cuanto su fundador nunca consideró que Falange fuese tan solo un partido político más , de ahí la acertada definición de Marco Penella : “ antipartido”. Pese a sus eventuales contradicciones fruto de una doctrina inacabada, pese a su tremenda historia que seguramente concluye – en cuanto partido – en abril de 1937, lo cierto es que si influencia, simbología y estilo de pensamiento ha cruzado otras muchas décadas y fascinado a no pocos intelectuales y artistas , prueba de que los límites de la política , siempre temporales y discutibles , se le quedaban pequeños .

Cultura falangista ¿ o tal vez mejor y en rigor cultura producida por artistas que fueron – siempre o en algún momento de sus biografías – falangistas o simplemente admiradores de José Antonio Primo de Rivera ¿.

Sin embargo a lo largo de las páginas de este libro que ahora concluye creo que ha quedado patente la existencia – y la influencia – de una cierta manera de creación cultural, de estética y temática falangista o al menos joseantoniana en el sentido más puro del término. En tan solo tres años de vida del “antipartido “ fundacional resulta evidente que su creador no pudo completar ni un cuerpo integro de doctrina ni una referencia cultural terminada . Las influencias del fascismo existieron pero fueron limitadas, las del clasicismo español lo mismo. Más sólidas aunque complejas por su heterogeneidad aparecen las de Ortega, Unamuno, DOrs … todas ellas entremezcladas con las aportaciones de la llamada corte literaria de José Antonio igualmente variadas y diferentes .

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El sentido revolucionario aun enraizado en fuentes tradicionales , lleva sin duda a un intervencionismo cultural, o al menos a la construcción de un cierto modelo que va más allá del simple entretenimiento comercial . Los falangistas ( más que la Falange que en puridad dejó de existir en abril de 1937 ) lo intentaron en teatro con algunos logros institucionales y en cine con menor fortuna ya que el elevado coste de las producciones conducía necesariamente a un modelo más cercano al del cine norteamericano ( que no olvidemos vivía su edad de oro artística, popular e industrial : Ford, De Mille, Hitchcock, Hawks, Vidor, Lang, Walsh, Chaplin, Wyler, McCarey, Mann, Wilder , Minnelli , Capra ,,,y el “ star system “ ). Pero la confluencia de familias ( católicos , monárquicos, carlistas, derechistas clásicos, apolíticos …y falangistas en varias sensibilidades ) , la coyuntura internacional occidental y la pura evolución de los tiempos impidieron la consolidación, incluso la existencia misma de propuestas culturales que pudieran denominarse falangistas . Queda – como es obvio – la obra dispersa de francotiradores de la novela, la poesía, el teatro o el cine , títulos aislados y una imaginería con vagos destellos de ese modelo clasicista y a la vez vanguardista, barroco y social que Falange dibujaba . O con mayor exactitud que hombres y mujeres adscritos – de forma temporal o permanente – al ámbito ideológico falangista elaboraban .

En el universo cinematográfico – pero también en el cultural en sentido amplio – podemos apuntar :

Compromiso con los problemas sociales que no se ocultan sino que se muestran a veces en su mayor crudeza ( Surcos, El mundo sigue, El inquilino , Segundo López )
Estética literaria personal huyendo a menudo de los estereotipos heredados (García Serrano, Sanchez Mazas, Ros, Foxa )
Idea de reconciliación, de unidad en torno a una esperanza sin importar el pasado ( Rojo y negro , Los ojos perdidos, Frente de Madrid, La paz empieza nunca )
Descreimiento cuando no oposición a la censura. Como reconocieron Margarita Alexandre o Carlos Saura, el uso de autores , periodistas o novelas de origen falangista podía suavizar la censura .
El indudable catolicismo ( que en Jose Antonio se dio de forma sincera y total ) no impide esquivar el confesionalismo extremo, la apertura a todo tipo de autores modernos , el diálogo con la cultura de su tiempo (El Escorial, Ridruejo, Lain, Tovar , J.A Nieves Conde, García Serrano, Alfonso Paso )
El patriotismo se puede teñir de un cierto pensamiento crítico y dolorido, herencia de la generación del 98 .
Apuesta por la intervención pública para promover la cultura , ayudar a su financiación y en algunos momentos dirigirla con propuestas estéticas concretas ( sean nostalgias de Imperio, autos sacramentales vanguardias europeas , matices antiburgueses ..) . Jerarquía, Vértice, Escorial Primer Plano , TEU , Teatro Español , Sindicato nacional del espectáculo …
La representación pictórica fue hasta cierto punto abundante en grandes artistas de la pintura como henos visto en su capítulo, casi siempre combinando el desgarro, la belleza, la ensoñación de grandeza o el contraste casi surrealista entre realidad y representación artística . Además de una colección notable de retratos .

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La cultura no admite en sentido estricto apellidos, o es cultura ( T.S.Eliot, Ezra Pound, Simmel – el camino del alma hacia sí misma – Heidegger y Ortega lo definieron con exactos términos ) o es mera representación sin ánimo de perdurar .

Cuando Harold C. Raley – amigo personal de Julián Marías, hispanista y a quien he tenido el privilegio de conocer en el marco de los Congresos que sobre Marías ha organizado desde 2008 la Universidad Católica de Valencia . escribió su obra Ortega y Gasset, filósofo de la unidad europea, incluyó en las últimas páginas un vocabulario en el que intentaba recoger en definiciones sintéticas algunos de los términos más importantes para filósofo. Entre ellos se encuentra «cultura» :

En su sentido más amplio y simple, cultura es la acumulación de técnicas y artefactos que permiten al hombre enfrentarse con los problemas de la vida durante un período histórico determinado. En otras palabras, cultura es el repertorio activo de soluciones a los problemas; pero como éstos son siempre específicos y, las más veces, también temporales, el hombre puede encontrarse cargado con una cultura que responde a viejos problemas, pero que no puede adaptarse a los dilemas actuales. Esta es la razón de los cataclismos periódicos e incluso de la desaparición de ciertas culturas»

Miguel Hedilla Rojas , hijo de Manuel Hedilla Larrey, Rafael Gil – hijo del gran cineasta Rafael Gil – departieron con el autor del libro en medio de una firma de ejemplares generosa , no solo de Falange , historia , cine y cultura, sino también de El cine español en la era de Franco (publicado en 2022 por SND Editores ). Carmen Meléndez (En Forma . Informa Radio ) ha programado una entrevista sobre los temas del libro en su programa.