21/11/2024 22:06
Getting your Trinity Audio player ready...

Dado lo mucho que ha hecho el actual gobierno por extender el Covid 19, colocando a España en uno de los puestos más elevados del mundo en mortandad derivada, y de paso en ruina económica, merecería el título de “Gobierno del Covid”, o “del virus”.

 Él mismo es un auténtico virus para España: tiene encantados a todos los enemigos  del país, sean ETA, separatistas, golpistas u ocupantes de Gibraltar. La osadía con que actúa, dando un golpe tras otro a las libertades y a la unidad nacional, revela que cree a España prácticamente en las últimas. Cree en su propia eficacia como virus. Quien haya leído mis dos libros recientes sobre la república y el frente popular, verá que esa creencia no es nueva. Por entonces también la alianza de separatistas y sovietizantes estaba convencida de que España había dejado de existir, salvo por algunos residuos fáciles ya de eliminar. Como sabemos, se equivocó por completo, pero hoy tenemos un nuevo frente popular y la misma amenaza. Es preciso demostrar que vuelven a equivocarse. Esta es la gran tarea del momento.

Autor

Pio Moa
Pio Moa
Nació en 1948, en Vigo. Participó en la oposición antifranquista dentro del PCE y el PCE(r)-Grapo. En 1977 fue expulsado de este último partido e inició un proceso de reflexión y crítica del marxismo. Ha escrito De un tiempo y de un país, sobre su experiencia como "revolucionario profesional" comunista.

En 1999 publicó Los orígenes de la guerra civil, que junto con Los personajes de la República vistos por ellos mismos El derrumbe de la República y la guerra civil conforman una trilogía que ha cambiado radicalmente las perspectivas sobre el primer tercio del siglo XX español. Continuó su labor con Los mitos de la guerra civil, Una historia chocante (sobre los nacionalismos periféricos), Años de hierro (sobre la época de 1939 a 1945), Viaje por la Vía de la Plata, Franco para antifranquistasLa quiebra de la historia progresista y otros títulos. En la actualidad colabora en ÑTV, Libertad DigitalEl Economista y Época.