28/04/2024 12:06

El GEO Francisco Javier Torronteras, fallecido en principio como consecuencia del impacto directo de escombros del piso explotado. Un nutrido florilegio de maderos en el escenario de la farsa y NINGUNO manifestó haber visto al GEO Torronteras o, al menos, señalar que se interesaran por su estado de salud ya que fue el más directamente afectado. En ese sentido, el testigo policial, TEDAX, nº 64388, en el juicio-pamema presidido por el podrido, podridísimo Bermúdez, afirmó que auxilió a los GEO en el piso de Leganés una vez consumada la “inmolación”. Incluso asevera que ayudó a alguno de ellos a llevarlo en una camilla…pero del Geo Torronteras, el más grave de todos, nada…ni vivo, ni muerto…ni le vio en pintura, ni en photoshop, ni el metaverso/mierdaverso, ni en sueños. Na de na.

Más falsas pistas islamistas

Es obvio que Torronteras tuvo que estar allí, vamos digo yo, por lo que deviene ininteligible que ese TEDAX (y otros) dijeran no haberle visto y se despacharán con un gélido y nervioso “no le vi…”. Ni tampoco que le viera nadie en la ambulancia, ni se oyeran testimonios de auxilio al fallecido, ni declaraciones de personal sanitario donde dijesen haber efectuado maniobras de reanimación al Geo. Nada de nada.

Resulta sorprendente, por otra parte, la extrema celeridad ( del tenor de la destrucción de los trenes) con que se produjo la liturgia fúnebre de Torronteras (sin esperar a las reglamentarias 24 horas que establece la Ley, puesto que se hizo a las 18 horas). Ains, demasiada prisa. ¿Iba entonces el subinspector de los GEO en la caja mortuoria que se introdujo en el nicho sin nombre el día del sepelio

El nuclear de la profanación posterior de la tumba de Torronteras, supuestamente, por un grupo islámico próximo – incluyendo amigos y familiares – a los suicidados de Leganés, de purita descojonación. Para comenzar, el Islam prohíbe tajantemente la profanación de los cadáveres de sus enemigos. ¿ Cómo pudieron los dizque autores de tamaño sacrilegio eludir la vigilancia del cementerio? Más disparate y rocambole. ¿Cómo pudieron encontrar el nicho donde estaba enterrado el GEO, de noche, en un cementerio tan enorme como es el de Carabanchel Sur? Y no olviden que la lápida de Torronteras, al parecer, no poseía inscripción identificativa alguna, lo cual agigantaría al máximo las dudas de si el GEO fue enterrado realmente en el nicho profanado.

Los autores de la profanación de la tumba del subinspector Torronteras no pretendían otra cosa, obvio, que «acentuar» (más pistitas a la Pulgarcito) la falsaria autoría islamista (versus yigladistas) de la matanza del 11-M, dejando como cortina de humo una peculiar «firma», supuestamente indubitable. Obviamente, purria ignara, se quiso enfatizar el carácter yihadista del atentado pero con una total ignorancia acerca de lo que es el islam por parte de quien ideó el parodia del cementerio. Cochambrosos, a fuer de criminales.

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Más preguntas

Porque veamos. Si los ultrarradicales (sic) de Leganés se suicidaron y ya estaban en el reino de Alá con 72 huríes, como ellos anhelaban…¿ qué sentido entonces tenía la venganza contra una persona que en nada era culpable de un “suicidio” voluntariamente permitido por ellos mismos? Absolutamente ridículo, pura demencia.

Para más inri, los restos del cadáver profanado fueron incinerados. ¿ Por qué se procedió entonces a ello cuando se produjo la profanación y no antes?¿Para destruir pruebas de cara a un futuro en sede judicial? ¿Era parte de una pajarraca previamente bosquejada? ¿Por qué la viuda del Geo no puso el grito en el cielo, en los mass mierda, ante todas estos atropellos reclamando justicia ante la muerte de su marido y la profanación de su tumba?

¿Por qué la tardanza en condecorar a título póstumo a todo un «héroe nacional» transcurridos tres años y, qué casualidad, a poco de iniciarse el juicio-pantomima del 11-M, febrero de 2007? Y aunque lo que sigue resulte anecdótico y poco relevante (pero lo es y mucho): ¿Por qué en la biografía del GEO Torronteras no consta la fecha completa de nacimiento y figura solamente el año 1962?…

Ains, que se os ve el cartón, gentucilla de servicios secretos. Toda la macabra escenificación de la profanación del cadáver del GEO, algo perfectamente premeditado y planificado. ¿Tal vez la continuación, el bis, de algún abisal, más bien hadal punto oscuro que ocurrió en el piso de Leganés y no lo sabemos ni lo sabremos nunca?

En fin.

Autor

Luys Coleto
Luys Coleto
Nacido en Bilbao, vive en Madrid, tierra de todos los transterrados de España. Escaqueado de la existencia, el periodismo, amor de juventud, representa para él lo contrario a las hodiernas hordas de amanuenses poseídos por el miedo y la ideología. Amante, también, de disquisiciones teológicas y filosóficas diversas, pluma y la espada le sirven para mitigar, entre otros menesteres, dentro de lo que cabe, la gramsciana y apabullante hegemonía cultural de los socialismos liberticidas, de derechas y de izquierdas.
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