21/11/2024 13:14
Getting your Trinity Audio player ready...

Sin duda, el Caballero, más importante de la Edad Media, incluso, a pesar de no ser alabado, como esos Caballeros armados anglosajones, como es el caso de Arturo, sus Caballeros y la “Tabla Redonda”, tan mil veces tratados, llevados a pantalla grande y pequeñas, decenas de veces, para su difusión. Mientras que nuestro Caballero Castellano, no ha sido elogiado ni por asomo. El “Quijotismo español”, una vez más, que todo lo de fuera lo alaba y en sus entrañas, tiene lo mejor de lo mejor

Sin embargo, hay una realidad y es que los ladrones, profanadores e hijos de la gran fulana, como son los Gabachos, sacaron su cuerpo, cuando invadieron España, por la desgracias de dos H.P. Borbones, que le franquearon la entrada.  Al final sus huesos, tan deseados por todos, por ser un héroe consumado y legitimado, terminaron hasta en el País de los Gringos. Algunos pudieron rescatarse, otros no.

El apodo del Cid, fue impuesto por los árabes o moros, que quería decir; “Señor”

EL CID, LA LEYENDA 1ª PARTE

Rodrigo Díaz: Nacido en Vivar del CidBurgos, – ¿1048?Valencia, 1099), también conocido como el Cid Campeador, fue un líder militar castellano que llegó a dominar al frente de su propia mesnada el Levante de la península ibérica a finales del siglo xi como señorío de forma autónoma respecto de la autoridad de rey alguno. Consiguió conquistar Valencia y estableció en esta ciudad un señorío independiente desde el 17 de junio de 1094​ hasta su muerte; su esposa, Jimena Díaz, lo heredó y mantuvo hasta 1102, cuando pasó de nuevo a dominio musulmán.

Nació a mediados del siglo xi. Las distintas propuestas dignas de estudio han oscilado entre 1041 (Menéndez Pidal) y 1057 (Ubieto Arteta), aunque actualmente cuenta con más partidarios una fecha situada entre 1045 y 1050; según Martínez Díez lo más probable es que naciera en 1048.

Su lugar de nacimiento está firmemente señalado por la tradición en Vivar del Cid, a 10 km de Burgos, aunque se carece de fuentes contemporáneas a Rodrigo que lo corroboren, puesto que la asociación de Vivar con el Cid se documenta por vez primera c. 1200 en el Cantar de mio Cid  y la primera mención expresa de que el Cid nació en Vivar data del siglo xiv y se encuentra en el cantar de las Mocedades de Rodrigo.​

 EL CID, LA LEYENDA 2ª PARTE

Su origen familiar es discutido en varias teorías. Fue abuelo del rey García Ramírez de Pamplona, primogénito de su hija Cristina.

Pese a su leyenda posterior como héroe de Castilla o cruzado en favor de la Reconquista, a lo largo de su vida se puso a las órdenes de diferentes caudillos, tanto cristianos como musulmanes, luchando realmente como su propio amo y por su propio beneficio, por lo que el retrato que de él hacen algunos autores es similar al de un mercenario, un soldado profesional, que presta sus servicios a cambio de una paga.

LEER MÁS:  El Congreso de los mercaderes. Por Rafael García Alonso

Se trata de una figura histórica y legendaria de la Reconquista, cuya vida inspiró el más importante cantar de gesta de la literatura española, el Cantar de mio Cid. Ha pasado a la posteridad como «el Campeador» (‘experto en batallas campales’) o «el Cid» (del árabe dialectal, señor).

 EL CID, LA LEYENDA 3ª PARTE

Por el cognomento de «Campeador» fue conocido en vida, pues se atestigua en 1098, en un documento firmado por el propio Rodrigo Díaz, mediante la expresión latinizada «ego Rudericus Campidoctor». Por su parte las fuentes árabes del siglo xi y principios del xii lo llaman quizá (teniendo en cuenta la forma romance) Rudriq o Ludriq al-Kanbiyatur o al-Qanbiyatur (‘Rodrigo el Campeador’).

El sobrenombre de «Cid» (que se aplicó también a otros caudillos cristianos), aunque se conjetura que ya pudieron usarlo como tratamiento honorífico y de respeto sus coetáneos zaragozanos (por sus victorias al servicio del rey de la taifa de Zaragoza entre 1081 y 1086) o —más probablemente— valencianos, tras la conquista de esta capital en 1094, aparece por vez primera (como «Meo Çidi») en el Poema de Almería, compuesto entre 1147 y 1149.

En cuanto a la combinación «Cid Campeador», se documenta hacia 1200 en el navarro-aragonés Linaje de Rodrigo Díaz que forma parte del Liber regum (bajo la fórmula «mio Cit el Campiador»), y en el Cantar de mio Cid («mio Cid el Campeador», entre otras variantes).

ESPAÑA (La Reconquista del Cid Campeador) – Documentales

Cantar de Mio Cid

Una de sus memorables actuaciones y quizás la más conocida, fue  su actuación valiente, leal y honesta en la Jura de Santa Gadea.

¡ZAMORA, no se ganó en una hora y “El Cid”, en la Jura de Santa Gadea!

Para conseguir algo importante y arduo, hace falta tiempo y esfuerzo. Comentario al marcador de uso: De este refrán se suele decir la primera parte:

No se ganó Zamora en una hora (Ni Roma se fundó luego toda).

Su significado es por todos sabido: se trata de una frase hecha para aconsejar paciencia, constancia y perseverancia para afrontar un trabajo que traerá consigo esfuerzo. Si bien en la ciudad del nombre del refrán se utiliza con frecuencia, también sale de la boca de otros españoles sin saber realmente la historia que hay detrás.

Para conocer el origen del refrán hay que remontarse al asedio que en el siglo XI sufrió Zamora durante siete meses por parte de Sancho II de Castilla.

Antes de su muerte, Fernando I decidió repartir sus territorios entre sus hijos: Sancho II de Castilla, Alfonso VI de León, García de Galicia, Urraca de Zamora y Elvira de Toro. Sin embargo, en 1065 falleció el rey y fue entonces cuando comenzó una encarnizada lucha por los reinados. Zamora resistía en manos de Urraca, fiel partidaria de Alfonso VI. La ciudad era en esta época un importante enclave fronterizo y militar en la línea del Duero. Sancho la sitió, pero ni la ganó en una hora ni en los siete meses que duró el asedio, pues fue traicionado y asesinado antes de verlo acabado.

LEER MÁS:  Fernández Muñoz analiza su obra Eso no estaba en mi libro de historia de los templarios. Por Javier Navascués

El responsable de este regicidio fue Bellido Dolfos,  fiel a doña Urraca, que escapó de Zamora y logró ganarse la confianza de Sancho II para asesinarle en un momento en el que se encontraba con él a solas.

Zamora no se tomó ni en una hora ni en siete meses

La jura de Santa Gadea – El Cid

«¡Qué buen vasallo sería, si tuviese buen señor

El Cid y Alfonso VI; Jura de Santa Gadea. Romance recitado por Manuel Dicenta

 

 

Autor

Miguel Sánchez

Empresario. Licenciado en Marketing y en Dirección de Ventas. Escritor de varios libros, sin publicar, aún.  Aficionado a la escritura y a la historia de España.


Caballero Legionario que fue del  IV Tercio Sahariano Alejandro Farnesio, en dónde estuvo en Mando Bandera. Escogido para portar al Santo Cristo de la Buena Muerte, representando a la Xª Bandera.


Congregante del Santísimo Cristo de la Fe, Cristo de los Alabarderos y María Inmaculada Reina de los Ángeles, en la Catedral de las Fuerzas Armadas


Luchador nato por el  Valle de los Caídos y sus monjes Benedictinos, por nuestro Cristo Redentor, la Familia, contra el Aborto y la Patria Grande, Unida y Gloriosa, desde la muerte del General Invicto.


Amigo, seguidor y admirador de la figura más transcendental y entrañable del siglo XX español, D. Blas Piñar, mi Caudillo, siempre junto a él, tuve el honor de aplaudirle, ovacionarle, dialogar y abrazarle, porque era mi ídolo y lo seguirá siendo por toda la eternidad. Y tengo el orgullo, que de  sus magníficos libros escritos, poseo unos diez, dedicados, con cariño y con su pluma de oro, como escritor en la excelencia.


Suscríbete
Avisáme de
guest
1 comentario
Anterior
Reciente Más votado
Feedback entre líneas
Leer todos los comentarios
Miguel Sánchez Asenjo

No se entera de nada, poque lo primero que tiene que empezar es, a saber leer y luego empaparse bien. Gran académica y censora de todos los escritos, porque lo de Vd., es solo criticar, no aporta nada más.

¡Qué poco y lamentable bagaje le dispensa esa mente delirante que posee!

1
0
Deja tu comentariox