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El Acorazado “Danton” cabeza de clase de los presentes en La Coruña
Coincidiendo con el inicio de las fiestas del agosto coruñés de 1925, concretamente a las cuatro y media de la tarde del viernes 31 de julio, el semáforo de Monte Alto anunció la entrada a la bahía coruñesa de la División del Norte de la Escuadra francesa integrada por dos acorazados –“Voltaire” y “Condorcet”- y dos Destructores-Torpederos –“Algérien” y “Marocain”-, enarbolaba insignia el Contralmirante Docteur a bordo del “Voltaire”.
Según cuentan las crónicas, el recibimiento dispensado por los coruñeses a los marinos galos fue muy efusivo, siendo muchos los coruñeses que se asomaron a la bahía para contemplar la llegada de los barcos que fueron recibidos por gran cantidad de lanchas y pequeñas embarcaciones que se hicieron a la mar para acercarse a los buques galos.
Los días anteriores, el Alcalde había pedido a la población que adornase balcones y ventanas con banderas de España, Francia y La Coruña, así como colgaduras en homenaje a los visitantes, lo que se verificó como era costumbre.
Al día siguiente, 1º de agosto, fecha oficial del comienzo de las fiestas generales de la ciudad, comenzaron los agasajos oficiales a los marinos galos.
Tras cumplimentar, como era habitual, a las primeras Autoridades, a las doce de la mañana de ese día, el Almirante, acompañado del Embajador francés en España, desplazado a La Coruña, en unión de los Comandantes de los buques y una representación de su oficialidad fueron recibidos oficialmente en el Ayuntamiento que fue profusamente engalanado para la ocasión.
Ese mismo día, a la una y media el Ayuntamiento ofreció un almuerzo oficial en el kiosco Alfonso que contó con la presencia de Autoridades y notables coruñeses. Posteriormente, a las seis y media de la tarde, se celebró un festival en el teatro Rosalía Castro y, finalmente, a las diez de la noche el Sporting Club ofreció una fiesta con una animada verbena en el parque de “El Leirón”.
Las Fiestas de la ciudad se iniciaron, con una masiva afluencia de forasteros y con gran animación callejera a la que contribuyó la presencia de los buques franceses en la bahía. A las doce de la mañana del 1º de agosto, con la salida desde el Ayuntamiento de la comparsa de Gigantes y Cabezudos, formando una vistosa comitiva integrada por un grupo de gaitas del país, la Banda de Música de las Escuelas Populares Gratuitas, la del Hospicio y un carro sobre el iban montados dos niños vestidos de aldeanos.
Como era costumbre, la comparsa bailó delante del Ayuntamiento y en otros puntos del recorrido por las calles más céntricas de la ciudad, otro de los números que se repetían de forma habitual a lo largo de los días centrales de celebración de los festejos.
Probablemente sea en esta ocasión la primera en la que la pareja de Gigantes de la ciudad vistió el traje típico gallego.
La Escuadra francesa en la bahía coruñesa (El Ideal Gallego)
Por la noche, la Música del Regimiento de Infantería “Isabel la Católica”, amenizó la primera “Velada en el Relleno” en los jardines de Méndez Núñez, un número festivo muy popular en las fiestas coruñesas cuya celebración se prolongó durante muchos años.
El domingo, 2 de agosto, primer día de la Semana Grande, se celebró, en la iglesia de San Jorge, la tradicional Función del Voto para lo cual, la tarde anterior, la imagen de la Virgen del Rosario fue trasladada al precitado templo. Ofició la función religiosa el Obispo de Plasencia y pronunció el sermón el de Lugo. A este acto religioso asistió el Ayuntamiento en pleno con el Gobernador Civil a la cabeza y el resto de Autoridades y representaciones coruñesas.
Concluida la Función del Voto se celebró el tradicional “Paseo de moda” por la calle Real que resultó muy animado y concurrido contando con el concurso de la Música del “Isabel la Católica”.
Por la tarde, se celebró la primera corrida de las tres generales de la ciudad, contando con la participación del rejoneador Antonio Cañero y los diestros Sánchez Mejías y Gitanillo que lidiaron reses de la ganadería del Duque de Veragua. A su conclusión, los Cantones fueron escenario del “paseo de coches”, otra costumbre muy arraigada por estas fechas en la ciudad.
Por la noche, a las diez, la velada nocturna en los jardines de Méndez Núñez fue animada por la Charanga de la Escuadra francesa y la Música del Regimiento de Infantería “Isabel la Católica” nº 54, de guarnición en La Coruña.
También esta noche, diferentes edificios de la ciudad fueron artísticamente iluminados, contribuyendo a dar mayor vistosidad al nocturno el encendido de los reflectores de los Acorazados franceses que proyectaron su haz de luz sobre La Coruña.
El lunes, día 3, se celebró otro número tradicional en las fiestas coruñesas cuyo origen se remonta a 1912, la “Fiesta de la Flor”, una cuestación popular destinada a la lucha contra la tuberculosis, contando con la participación como postulantes de gran número de jóvenes y damas coruñesas que recaudaron 12.200 pts.
Por la tarde, la plaza de Toros acogió la segunda corrida de abono que contó con la presencia de los diestros Dominguín, Sánchez Mejías y Belmonte y que se vio deslucida por la lluvia que impidió la lidia de la última de las reses.
Por la tarde, se celebró un concierto de canto en Méndez Núñez y, a partir de las diez, la tradicional “Velada en el Relleno”. A su conclusión estaba prevista la quema de una sesión de fuegos artificiales a cargo de la pirotecnia Alonso de Palencia, sin embargo, un incendio que destruyó sus instalaciones impidió que la firma contratada concurriese a la ciudad, motivo por el cual la Comisión de Festejos procedió a la firma de un nuevo contrato con la empresa Reus que será la encargada de quemar las diferentes sesiones del programa, tanto aéreas como acuáticas.
A primeras horas de la mañana del martes, día 4, procedente de Lugo donde se encontraba de guarnición, llegó a la ciudad la Música del Regimiento de Infantería “Zamora” nº 8, contratada para participar en las fiestas hasta el día 13 de agosto.
La Música del Real Cuerpo de Alabarderos presente en la Semana Grande de 1925
A las doce de la mañana de ese mismo día, el balneario de Riazor fue el escenario elegido para la celebración de un concierto contando con el concurso de la Orquestina Coruñesa, encargada de animar la habitual concurrencia de bañistas al arenal de Riazor.
A las cuatro y media de la tarde tuvo lugar la tercera y última corrida de abono que contó con la participación de los matadores Sánchez Mejías, Cañero, Gitanillo y Chicuelo.
Antes del inicio de la corrida que estuvo animada por la Música del “Zamora” esta partió desde la plaza de María Pita en dirección al coso coruñés, recorriendo todas las calles de este itinerario, contribuyendo a dar más animación a la jornada.
A partir de las ocho de la tarde, tras la actuación del coro de “Cantigas da Terra” se inició la “Velada en el Relleno” con la actuación de las Músicas del “Zamora” y del “Isabel la Católica”, concluyendo a las doce de la noche.
Con relación a la presencia de la Escuadra francesa en la bahía, durante estos días se permitió la visita de los coruñeses a bordo, aproximándose a los buques en pequeñas embarcaciones en las que, tras la visita, regresaron a tierra.
Para el día 5 estaba prevista la celebración de la Retreta militar que, finalmente, fue aplazada por causa de la incesante lluvia caída sobre la ciudad, lo que también deslució el concurso de escaparates de los establecimientos comerciales coruñeses, siendo los ganadores la “Corsetería Imperial”, propiedad de la familia Do Campo, y el comercio “El Capricho”.
También en esta jornada se tuvo conocimiento del aplazamiento, por causa de la climatología adversa, de la Batalla de Flores para el viernes, día 7.
A primeras horas de la tarde se sirvió un almuerzo en el Palacio de Capitanía General en honor a los marinos franceses y, por la tarde, a bordo del Acorazado “Voltaire”, se celebró una fiesta muy animada a la que concurrió lo más granado de la sociedad coruñesa.
A las diez y media de la mañana del día 6, los buques franceses de la División del Norte levaron anclas, poniendo rumbo a Brest, dando así por finalizada la vista a la ciudad.
Ese mismo día, por la tarde, se disputó un encuentro de futbol entre el Real Club Deportivo y el Nacional de Montevideo que concluyó con empate a cero goles y ya por la noche, la “Velada en el Relleno” resultó muy animada contando con la participación de las Músicas de los Regimientos “Zamora” e “Isabel la Católica”.
El día 7, a las once de la mañana, se inauguró en el Instituto Da Guarda la Exposición de la Escuela de Artes e Industria y, a las doce, se celebró un animado “Paseo de moda” por la calle Real.
Detalle de los jardines de Riazor
Como estaba previsto, a las cinco y media de la tarde de ese día, se inició, por el circuito de los Cantones, la “Batalla de Flores”, uno de los números más esperados en las fiestas del verano coruñés, participando en ella diferentes carrozas de Sociedades y Empresas de la ciudad, así como varios vehículos engalanados. El primer premio de carrozas lo obtuvo la presentada por la Fábrica de Tabacos.
Miles de personas se asomaron al recorrido, animado por la Música del “Zamora”, situada en el Obelisco, y la del Hospicio en la plaza de Mina.
Por la tarde noche, a partir de las ocho y hasta las doce actuaron en Méndez Núñez las Músicas del “Zamora” y del “Isabel la Católica”.
El día 8 por la mañana, en el tren correo, llegó a la ciudad, procedente de Madrid, la Música del Real Cuerpo de Alabarderos con el fin de participar en el concierto que se celebró al día siguiente en la plaza de Toros.
También en la mañana de ese día, en la calle de San Andrés ofreció un concierto la Música del “Zamora” y la jornada playera la animó, en Riazor, la Orquestina Coruñesa.
A las cinco y media de la tarde, en el campo de Riazor se disputó el segundo encuentro de fútbol entre coruñeses y uruguayos que concluyó con la victoria de los visitantes por tres tantos a cero.
A las diez y media de la noche se celebró, en Méndez Núñez, la primera gran verbena. Con este fin todo el paseo, al igual que los Cantones, se iluminaron con farolillos a la veneciana y otros efectos lumínicos que provocaron la admiración de coruñeses y forasteros, colocando un gran arco iluminado a la entrada del Relleno.
En el recinto donde se celebró la verbena se permitió que los industriales y comerciantes coruñeses instalasen puestos de venta de sus artículos.
El domingo, día 9, último de la Semana Grande, amaneció con una nueva salida de los Gigantes y Cabezudos, acompañados por las Bandas del Hospicio y de las Escuelas Populares Gratuitas, que recorrieron diferentes calles de la ciudad, tras lo cual, a las doce, se celebró el “Paseo de moda” por la calle Real.
Hubo, igualmente conciertos matinales en la calle Real y en el Balneario de Riazor, así como el esperado de la Música del Real Cuerpo de Alabarderos que tuvo como escenario la plaza de Toros.
Por la noche, se celebró la segunda gran verbena que resultó tan animada como la celebrada la noche anterior.
Destructor “Algérien”
Así concluyó aquella Semana Grande de 1925 pero no las fiestas de la ciudad que se prolongaron durante las siguientes jornadas con la celebración de numerosos espectáculos y pruebas deportivas, incluso las tan esperadas sesiones de fuegos artificiales disparando la primera de ellas el lunes día 10.
Con relación a los buques franceses integrados en la División Naval del norte, los Acorazados “Condorcet” y “Voltaire”, pertenecían a la clase “Danton”, causaron alta en 1911. Con un desplazamiento a plena carga de 19.763 tn., su eslora era de 149,9 m., por 25,8 de manga y 9,2 de calado. Su protección oscilaba entre los 300 y los 48 mm. de espesor. Disponían de cuatro turbinas Parsons y 28 calderas que le proporcionaban una potencia de 22.500 cv. y una velocidad de 19,2 nudos. Su dotación era de 923 hombres.
Iban armados con cuatro cañones de 305 mm., 12 de 240, otras piezas menores y dos tubos lanzatorpedos de 450 mm. Fueron dados de baja entre 1931 y 1935.
Los Destructores “Algérien” y “Marocain” pertenecían a la clase “Arabe”. Fueorn dados de alta en 1917. Desplazaban 865 tn., con una eslora de 79,4 m., una manga de 7,33 y un calado de 2,39. Disponían de tres motores verticales de triple expansión que le proporcionaban una potencia de 10.000 cv., y una velocidad de 29 nudos. Su dotación era de 109 hombres.
Iban armados con un cañón de 120 mm., cuatro de 76 y dos tubos lanzatorpedos de 450 mm. Causaron baja entre 1935 y 1936.
Autor
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José Eugenio Fernández Barallobre, español, nacido en La Coruña. Se formó en las filas de la Organización Juvenil Española, en la que se mantuvo hasta su pase a la Guardia de Franco. En 1973 fue elegido Consejero Local del Movimiento de La Coruña, por el tercio de cabezas de familia, y tras la legalización de los partidos políticos, militó en Falange Española y de las J.O.N.S.
Abandonó la actividad política para ingresar, en 1978, en el entonces Cuerpo General de Policía, recibiendo el despacho de Inspector del Cuerpo Superior de Policía en 1979, prestando servicios en la Policía Española hasta su pase a la situación de retirado.
Es Alférez R.H. del Cuerpo de Infantería de Marina y Diplomado en Criminología por la Universidad de Santiago de Compostela.Está en posesión de varias condecoraciones policiales, militares y civiles y de la "F" roja al mérito en el servicio de la Organización Juvenil Española.
Fundador de la Comisión Promotora de las Hogueras de San Juan de La Coruña, del Museo Policial de la J.S. de Policía de Galicia y de la Orden de la Placa y el Mérito de Estudios Históricos de la Policía Española.
Premio de narrativa "Fernando Arenas Quintela" 2022
Publicaciones:
"El Cuerpo de Seguridad en el reinado de Alfonso XIII. 1908-1931" (Fundación Policía Española)
"La uniformidad del Cuerpo de Seguridad en el reinado de Alfonso XIII 1887-1931 (LC Ediciones 2019)
"Catálogo del Museo Policial de La Coruña". Tres ediciones (2008, 2014 y 2022)
"Historia de la Policía Nacional" (La Esfera de los Libros 2021).
"El Cuerpo de la Policía Armada y de Tráfico 1941-1959" (SND Editores. Madrid 2022).
"Policía y ciudad. La Policía Gubernativa en La Coruña (1908-1931)" (en preparación).
Otras publicaciones:
"Tiempos de amor y muerte. El Infierno de Igueriben". LC Ediciones (2018)
"Historias de Marineda. Aquella Coruña que yo conocí". Publicaciones Librería Arenas (2019).
"El sueño de nuestra noche de San Juan. Historia de la Comisión Promotora de las Hogueras de San Juan de La Coruña". Asociación de Meigas (2019).
"Las Meigas. Leyendas y tradiciones de la noche de San Juan". Comisión Promotora de las Hogueras de San Juan de La Coruña (2011).
"Nuevas historias de Marineda. Mi Coruña en el recuerdo". Publicaciones Arenas (2022). Ganadora del premio de ensayo y narrativa "Fernando Arenas Quintela 2022".
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