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Cada año más lugares se unen a la interminable lista de crímenes cometidos por los partisanos comunistas de Tito en Eslovenia. En mayo de este año comenzó una nueva excavación en Jama pod Macesnova Gorica. El Dr. Jože Dežman, presidente de la comisión gubernamental para la investigación de fosas comunes, presentó en un programa de Radio Ognjišče la evolución de los trabajos en la mayor morgue de la posguerra de guardias nacionales eslovenos asesinados.
El Dr. Jože Dežman
“Hasta el momento se han retirado unos dos mil metros cúbicos de roca que fueron minados sobre las víctimas asesinadas. Los alrededores fueron minados varias veces, la última explosion se produjo en la década de 1950, lo que atestigua la mala conciencia de los antiguos gobernantes, que querían ocultar sus infames acciones a toda costa”. Dežman también cuestionó la sinceridad del gesto del entierro simbólico, realizado por los comunistas en 1990, de los guardias nacionales asesinados que tuvo lugar cerca del abismo. “Desde hace tiempo se sabe que allí fueron asesinados principalmente ciudadanos serbios y montenegrinos. A pesar de que los testigos de la masacre seguían vivos en aquella época, nadie reveló la ubicación de Macesnova Gorica, y tuvieron que pasar más de tres décadas antes de la excavación” señaló.
Al parecer, unas 50 personas sobrevivieron a la masacre y el programa describió la huida de los supervivientes de este lugar de horror y muerte. También se encontraron una treintena de cadáveres en los nichos de las cuevas, lo que significa que murieron más tarde. Algunos de ellos también escaparon del abismo. Así, conocemos los testimonios de Milan Zajc, France Dejak, Franc Kozina y Janez Janša padre. En su relato, Franc Kozina señaló los nombres de algunos de los liquidadores que sin duda estuvieron implicados en la matanza. Todos ellos han fallecido hoy, pero hace treinta años seguian vivos. A pesar de ello, nunca fueron perseguidos por la policía o la justicia.
Dežman afirmó que hasta ahora se han encontrado los restos de unas dos mil personas, lo que supone la mitad de todas las víctimas. “Todo totalitarismo se basa en una mentira, tal y como señaló el Dr. Aleš Maver. Por lo tanto, la reconciliación con la verdad es absolutamente necesaria”.
“Hay muchos interrogantes sobre el destino de los restos, ya que nos hemos acostumbrado a que esperen un lugar de enterramiento adecuado en cajas de plástico y bolsas negras durante muchos años, en el caso de Huda Jama, hasta siete años. La historia del entierro de las víctimas de Huda Jama es una mala escuela para nosotros, que, entre otras cosas, arrastró al ex presidente Danilo Türk por lo inapropiado de sus declaraciones” advirtió Dežman. (Türk calificó el hallazgo de la masacre de Huda Jama en 2009 como un “asunto de segunda categoría” y se negó a visitarlo durante meses. En 2012 perdió las elecciones). Al mismo tiempo, Dežman expresó su satisfacción por el hecho de que “ahora tengamos la oportunidad de excavar, investigar y hablar sobre lo que ocurrió allí, y aceptar la verdad al respecto”.
“Otra cuestión importante es el lugar de enterramiento. En el caso de las víctimas de los asesinatos en masa bajo Macesnova Gorica, la cuestión es muy sencilla: ¿estaremos de acuerdo con una construcción propagandística en la que los muertos se dividen en buenos y malos, en la que algunos pueden tener una tumba y otros no? Si no estamos de acuerdo con esa lógica irrespetuosa, es nuestro deber encontrar el lugar de enterramiento adecuado”.
Según la opinión de Dežman, la capital eslovena debe mostrarse como la portadora del poder simbólico de la nación: “Para bien o para mal, la historia debe aceptarse tal y como es. Por desgracia, Liubliana, con el alcalde Janković a la cabeza, aparece aquí como una ciudad con una actitud claramente irrespetuosa hacia la muerte. Hasta ahora, la comisión gubernamental ha presentado repetidamente una solicitud para determinar un lugar de enterramiento en el cementerio de Žale, pero hasta ahora, todas las solicitudes han sido rechazadas, y el alcalde ha prometido públicamente que no habrá tumbas de ‘traidores’ en Liubliana. Pero ¿qué pasa con los asesinados en el abismo de Brezar (donde 800 prisioneros de guerra fueron arrojados al abismo)? ¿Y qué pasa con las tumbas de guardias nacionales en Orlov vrh? ¿Y con los asesinados detrás del muro del cementerio de Šentvid? ¿Cómo podemos tener un monumento a las víctimas del accidente aéreo de Ajaccio en Žale, o un monumento a las víctimas de los juicios de Dachau, pero para las víctimas del abismo bajo Macesnova Gorica, la ciudad no puede aceptarlas en Žale?”
La comisión volvió a tratar la cuestión del entierro de las víctimas en su última reunión del 22 de agosto de 2022. “Si el gobierno de Golob apoya al alcalde Janković en su posición de que no hay lugar para las tumbas de los traidores en Liubliana, surge la pregunta de si este es todavía un gobierno liberal y democrático o es estalinista o titoísta. Por supuesto, la comisión no puede decidir sobre el lugar de enterramiento, pero puede llamar la atención sobre ello. Y no podremos evitar esta cuestión. Al fin y al cabo, incluso el actual gobierno municipal tiene una fecha de caducidad que va más allá de la cuestión de la ética de enterrar a las víctimas de la Segunda Guerra Mundial” señaló Dežman, “Macesnova Gorica es peor que la cueva de Santa Bárbara, es peor que Huda Jama, por eso es hora de empezar a tratar a las víctimas con respeto. Y esto sólo sucederá si hay democracia”.
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