Getting your Trinity Audio player ready...
|
Que nadie se engañe
LA CLASE MEDIA FRANQUISTA MANDA EN LAS ELECCIONES
Según demuestran los resultados de las urnas desde 1979 a 2023
Elecciones Generales
Año |
Votos |
Diferencia |
|
UCD |
PSOE |
||
1979 |
6,268,593 |
5,469,813 |
798.780 |
1982 |
1 425 094 |
10 127 392 |
8.702.298 |
AP: 5 548 108 |
|||
Coalición Popular |
|||
1986 |
5,247,677 |
8,901,718 |
3.654.041 |
PP |
|||
1989 |
5,285,972 |
8,115,568 |
2.829.596 |
1993 |
8 201 463 |
9 150 083 |
948.620 |
1996 |
9 716 006 |
9 425 678 |
290.328 |
2000 |
10,321,178 |
7,918,752 |
2.402.426 |
2004 |
9,763,144 |
11,026,163 |
1.263.019 |
2008 |
10 278 010 |
11 289 335 |
1.011.325 |
2011 |
10 866 566 |
7 003 511 |
3.863.055 |
2015 |
7 236 965 |
5 545 315 |
1.691.650 |
2016 |
7 941 236 |
5 443 846 |
2.497.390 |
2019 (28 abril) |
4 373 653 |
7 513 142 |
3.139.489 |
2019 (10 noviembre) |
5 047 040 |
6 792 199 |
1.745.159 |
2023 |
8 160 837 |
7 821 718 |
339.119 |
Mayorías absolutas
Años |
Votos Diputados UCD/PP |
Escaños |
Diferencia escaños | ||||
AP | PP | PSOE | AP | PP | PSOE | ||
1982 | 5 548 108 | 1 425 094 | 10 127 392 | 107 | 11 | 202 | 95 |
1989 |
5,285,972 |
8,115,568 | 107 | 175 | 68 | ||
2000 |
10,321,178 |
7,918,752 | 183 | 125 | 58 | ||
2011 |
10 866 566 |
7 003 511 | 186 | 110 | 76 |
Porque está claro que si se repasan los resultados tanto el PSOE como el PP tienen sus fijos (a eso le llaman suelo o techo) o sea, que son aquellos votantes que pase lo que pase en sus Partidos les votan aunque sea tapándose la nariz (con corrupciones como el ERE en el PSOE o el “Caso Mariano Rubio” o “Ibercorp” en el PP).
Es un hecho. El PSOE tiene un fijo de 6 millones aproximados y el PP otro tanto más o menos. Lo que quiere decir que si los votantes en el año 1982 fueron 21.469.274 y en el año 2023 han sido 24.952.947 la diferencia es la que baila, dejando al margen los votos en blanco y nulos y la abstención, queda a la expectativa hasta el último minuto. Por tanto, los 3 millones 500.000 que no obtienen voto seguro y bailan según van los vientos, como puede verse en las 4 Mayorías Absolutas que se han dado en la Transición. Dos se las llevó el PSOE y dos se las llevó el PP (muy empatados).
¿Y quién es esa clase que decide a la hora de la verdad las elecciones? Hay quién les llama centristas, moderación, ni Izquierdas ni Derechas, ni Comunismo ni Capitalismo, los que no se dan cuenta o no quieren darse cuenta, es que esos 3 millones y pico provienen de la “clase media” que se crearon en los años de Franco (lo que mi profesor Aguinaga llamaba el “Franquismo Sociológico”).
Ese Franquismo que en 1982, una vez que supo que Felipe, o sea, el PSOE, abandonaba el comunismo se volcó y le dio la máxima Mayoría Absoluta que se ha tenido en votos con 10.127.392 y una diferencia histórica: 202 escaños.
Asimismo o algo parecido sucedió en el año 2000, cuando el PP ya con Aznar al frente, se llevó el gato al agua con 10.321.178 (una diferencia en votos de 3.101.762 y 58 escaños).
Todo eso, pasado por la “túrmix”, y repasando y recordando (que nunca se lo perdonarán, aunque la calle lo calle el affaire del Valle de los Caídos) nos dice que si ahora hubiese elecciones ganaría el PP y más claro, absolutamente seguro, si doña Isabel Díaz Ayuso fuese en el cartel de la Moncloa.
Julio Merino.
Autor
-
Periodista y Miembro de la REAL academia de Córdoba.
Nació en la localidad cordobesa de Nueva Carteya en 1940.
Fue redactor del diario Arriba, redactor-jefe del Diario SP, subdirector del diario Pueblo y director de la agencia de noticias Pyresa.
En 1978 adquirió una parte de las acciones del diario El Imparcial y pasó a ejercer como su director.
En julio de 1979 abandonó la redacción de El Imparcial junto a Fernando Latorre de Félez.
Unos meses después, en diciembre, fue nombrado director del Diario de Barcelona.
Fue fundador del semanario El Heraldo Español, cuyo primer número salió a la calle el 1 de abril de 1980 y del cual fue director.
Últimas entradas
- Actualidad20/11/2024«El otro Franco»: Serie sobre Francisco Franco en el 49 aniversario de su muerte (I). Por Julio Merino
- Actualidad20/11/202420 de Noviembre. Fecha aniversario de la muerte de Franco y José Antonio Primo de Rivera
- Actualidad20/11/2024Felipe González y Alfonso Guerra declaran la guerra al oscuro Sánchez. Por Julio Merino
- Actualidad19/11/2024«Aquí hace falta ya un sargento de hierro», Pedro J. Ramírez dixit. Por Julio Merino
El Franquismo murió poco después de Franco, concretamente en 1977, cuando entre puñetazos y amenazas en el Valle de los Caídos, el remanente de FET de las JONS, la Falange Tradicionalista de Franco (no de los carlistas ni de José Antonio ni de ningún otro), se autodisolvió lamentabilísimamente sobre el sepulcro del Caudillo victorioso católico y patriota, rompiendo la unidad que reclamaron desde 40 años antes (abril de 1937) para España (España, una, grande y libre).
El Franquismo apostató de todo lo que supuestamente había defendido: de Dios y se su Santa Iglesia Católica Apostólica, de España y su incomparablemente gloriosa historia y unidad en la fe y de todo respeto por los mayores y su glorioso pasado para venderse por un plato de lentejas a la naciente democracia de la que esperaban insensatamente la «paz», la «reconciliación», la «libertad», la «fraternidad», la «prosperidad» y la «integración» en la idolatrada «Europa» apadrinada por USA. El paso de los años ha ido demoliendo todas y cada una de esas mentiras inyectadas por satanás en el glorioso pueblo español y en sus generaciones sucesoras, mermando en número a los que un día apoyaron a Franco, ya en su mayoría llamados por Dios a su inapelable Juicio, que han dejado unos hijos que poco les falta para defecar sobre sus tumbas por haber ayudado a lograr que España y la Iglesia Católica no desaparecieran.
El Franquismo nada tiene que ver ni con la UCD del traidor a los Principios del Movimiento, «aperturista» de la puerta al infierno del partido de Stalin: PCE, A. Suárez (el Kerenski español), ni con el traidor ministro de la libertad de insulto a Dios y a España, M. Fraga (justamente defenestrado por Franco, al que siempre tributó odio, como su partido AP y PP, que lo condenó sin juzgarlo en 2001. Que Dios no les perdone a ellos y sus votantes tampoco), devenido a nacionalista aberchaliño gallego a son de gaitas y mamandurrias en el Obradoiro. Tampoco tiene que ver absolutamente nada el Franquismo con el anticristo socialista FG, y sus sucesores ZP y PS, que destruyó en buena medida la secular fidelidad de la nación española a Cristo Rey y a su glorioso pasado católico, con sus connatural prosperidad, inundando España de corrupción en todo orden, crimen, aborto, divorcio, drogas por torrentes, destrucción de familias, pornografía reductora de mujeres (y luego niños) a mero ganado socializable (muy socialista y muy de izquierdas), de mentiras, de engaños, de hipocresía, de jueces socialistas con menores e info vaginal, de medios de manipulación de masas, de pucherazos y robos electorales como el de feb. 1936, de pobreza rampante, de desindustriaización, de paro, paro, más paro, y paro hasta el holodomor, delincuencia impune con amnistía total, de castigo y persecución a los buenos y justos, de ruina física y moral, de voto comprado por millones de putas vendidas, infeficiencia, deuda pública desbordada, déficit tras déficit, atraso con respecto a demás países ricos (divergencia), odio, degeneración moral generalizada, feminismo infanticida, enchufismo, pelotazos, gal, gol, gel, alianza con ETA y antiespañoles, etc, etc, etc.
El Franquismo tiene tanto que ver con todos los partidos políticos actuales y pasados, desde 1977, como el Cristianismo con los apóstatas, herejes, traidores a Cristo, blasfemos, falsos doctores y anticristos. Que en cuestión de días pasasen no pocos arribistas como Judas Iscariote del Señor, de cantar el Cara al Sol, a ser demócratas de toda la vida, incluso cantando la internacional tras deshacerse de la camisa azul con el yugo y las flechas, no implica que el «Franquismo» se volviese mercader derechista o rojo satánico, no. Implica que herido el pastor, dispersas quedan las ovejas. Y el Franquismo no iba a ser una excepción. Así que a mentir y engañar de otra manera a sus lectores, señor Merino. O a rectificar con humildad por haber ofendido a Franco y su régimen, a los que de corazón entendieron la importancia del mismo y le tributaron y siguen tributando un hondo respeto y admiración. Usted verá.