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La oleada primera tuvo su origen en el terrible año 78 y toda su política de indignidad y vergüenza. La demolición del antiguo régimen convirtió a España en un país de autonomías y de partidos políticos de todo pelaje y toda esa maquinaria siniestra refrendada por una constitución que liquidaba todo lo conseguido durante los cuarenta años de paz y prosperidad del gobierno de Franco, diseñó todo lo que vino después y en donde estamos atados ahora.
En esta primera oleada se abrió la puerta a todo lo que nunca debió consentirse, creando un bipartidismo vergonzoso de alternancia en el poder. Los fuertes eran la UCD, la traición de Adolfo Suárez y su reforma política auspiciada por el Borbón. Luego ya entró en juego el criminal PSOE, que después de provocar una guerra civil y perderla, se erigía como vencedor inmoral de ese panorama que en su inicio y tras la desaparición de UCD y aquella tontería del CDS, dio naturaleza y sentido también a un partido cuyas siglas en su origen fueron las de AP y que, por aquello de que muchos traidores del franquismo estaban allí metidos, decidieron lavar la cara, con un sentido de renovación, de su imagen para convertirse en el PP que conocemos. A partir de ese momento y hasta la segunda oleada todo fue un bipartidismo de libro, tú te pones unos añitos y luego me pongo yo otros más. De Felipe González a José María Aznar y viceversa. PSOE y PP, y, al contrario.
La segunda oleada llego con el penoso espectáculo del 15M y la plaga de piojosos porreros que abandonaron la podrida universidad y decidieron tomar la Puerta del Sol de Madrid y montar una asamblea indefinida y a ver qué pasaba. Como el gobierno del Ayuntamiento y de la Comunidad, del PP, consintieron el espectáculo en vez de echarles a golpe de lanzallamas, metafórico, estos indeseables decidieron crear un partido, Podemos, y con él cambiar el panorama político y la gente les compró el timo y les votó y asolaron las instituciones con su roña de discurso hueco de comunismo trasnochado y casposo que se ahogó entre moquetas y coches oficiales y gracias a mucho tonto se enriquecieron escandalosamente y consiguieron que el canalla de Iglesias llegara a vicepresidente del gobierno y que a su barragana, analfabeta y burra, le regalaran un ministerio. De Vallecas al chalé de Galapagar. También empezaron a surgir en plena cresta de esta segunda ola partiditos que se unían a la fiesta y que tenían un futuro tan negro como el partido de Iglesias, pero resistirían hasta que durara su inconsistencia política. Se pensaba en los medios expertos, por decir algo, que estos pequeños partidos iban a sanear la vida política y sobre todo a terminar enterrando el antiguo y caduco bipartidismo imperante durante tanto tiempo. Nada de eso. Solo unos ejemplos. UPyD que fue una escisión del PSOE encabezado por una desorientada socialista como Rosa Díaz, terminó en la basura. Ciudadanos, ese partido que surgió de Cataluña y que se desangró en Madrid, acabó con Albertito Rivera fuera del chiringuito y con una pobre muchacha al mando, la Arrimadas, que dio la puntilla a una «cosa» que reamente no era nada.
Ahora le toca a VOX, ese partido salido del todopoderoso PP y que cada consulta electoral se desangra un poco más, en votos y en personas. Ante el inminente hundimiento de este partido salen corriendo capitostes del mismo, gentes de proyección y peso específico, Olona, Víctor Sánchez del Real y ahora su portavoz, Iván Espinosa. VOX, se quiera o no, va a implosionar más pronto que tarde porque es un azucarillo en un vaso de agua y su desaparición tiene fecha, como la tuvieron todos estos partidos aquí mencionados que quisieron ser gigantes, pero en realidad solo eran enanos que tenían pies de barro y se derrumbaron sin demasiado estrépito. Los zarrapastrosos de Podemos ya empiezan, después de su fracaso electoral, a echar gente y a cerrar sedes.
Después del sarampión se vuelve a los orígenes, PSOE y PP, PP y PSOE. El bipartidismo de siempre. La indecencia del reparto de lo poco que queda de este páramo que ya muy pocos denunciamos. Pobre España.
Nota del editor: aunque no se convenga en el argumentario de los colaboradores, se respeta la libertad de expresión y la crítica, hasta la más severa si es voluntad de los autores, desde la ponderación y el respeto por las ideas.
Autor
- Nace en Madrid en 1958. Estudia en Los Escolapios de San Antón. Falangista. Ha publicado 4 libros de relatos. Apasionado del cine y la lectura. Colaborar en este medio lo considera un honor.
Bien. Todo un anecdotario variopinto de decadencia. Sin embargo, sigue ausente la detección de las causas misma de la profunda decadencia española. El problemón grave es la decadencia intelectual de España, comenzando por la filosofía misma, por cierto. Un programa de regeneración de España sería un programa de superación de esquemas caducos y de falsas alternativas históricas pero, sobre todo, poner otra vez a la cabeza del país a gente instruida, culta y con un cociente intelectual muy superior al de la media de este maltrecho e idiotizado país.
La regeneración de España sólo podría comenzar con una escuela de filosofía y de dialéctica al modo griego clásico. De tal escuela puede surgir un ideal jurídico y moral común como no puede surgir de una «democracia» o chusmocracia de masas amorfas votontas y perrodistas de cleptocracias foráneas, de plutocracias más o menos nativas o de enjambres de tarugos exaltados metidos en política para lo que todos sabemos.
Sólo a partir de un ideal moral jurídico y moral común de base se puede elaborar una filosofía política y una teoría jurídica apta, incluyendo una teoría de la justicia clásica basada en el derecho natural y no en las aberraciones anglosangronas y su ingeniería social. Una vez que España o su masa crítica contase con una filosofía política y con un ideal jurídico común, se puede elaborar una verdadera legislación, comenzando con una verdadera constitución y no un folleto como el del 78, a todo color para venderlos la moto del chistema mundialista. Una vez que se cuente con una estructura política y jurídica transfigurada y resurrecta, se podrá recurrir a una teoría y práctica económica buenas.
Como dice Jesús en el Santo Evangelio, buscad el Reino de Dios y su justicia y todo lo demás os será dado por añadidura. Es decir, primero la filosofía, después el derecho, por último la economía.
Mi querido Alejandro Descalzo:
Como sabrás despues de 3 años y 746 artículos publicados, dejé este, mi periódico, nada mas tomar posesión la nueva directiva. Ya que, en mis dos unicos escritos, fueron mutados, me coartó y censuró descaradamente. Me quitó mi libertad de pensamiento y ante esta atrocidad, no tuve más remedio qu dejar el periódico, pero salí con la dignidad íntegra, sin aceptar dictadura e imposiciones de nadie
Sigo como lector y estoy al 100% de acuerdo con tu artículo, en el que dices grandes verdades, sobre los dos viles y despreciables TRAIDORES; El Borbón y «El Chuletón de Ávila», ambos PERJUROS.
Si yo hubiera puesto eso, la guadaña de la venganza contra mi, de este nuevo propietario, me hubiera segado los pies.
Es un honor para mí, ver un escritor que dice la verdad y se le es consentida, porque este diario ya no es tan LIBRE, al menos para mí, desde que mi íntimo amigo Don Álvaro Romero, lo dejó.
Un fuerte abrazo, con mis mejores deseos.
Miguel Sánchez
BLOG Miguel Sanchez «El Patriota Español»
No estoy de acuerdo en que la segunda oleada de inmundicia llego con el 15m
Llego con la matanza del 11 de marzo del año 2004.
En cualquier caso toda esta mugre que nos envuelve esuna consecuencia de haber tenido en el poder a tres desvergonzados sujetos,Juan Carlos I, Adolfo Suarez, el desagradable Gutierrez Mellado y el cardenal Tarancon.
Ellos son los que destruyeron España
«poner otra vez a la cabeza del país a gente instruida, culta y con un cociente intelectual muy superior al de la media de este maltrecho e idiotizado país.»
Cuando dice Vd que en España hubo cosa parecida?
Sin problemas
En otros diarios digitales como el Español Digital,» te echan y no te permiten ni mandar comentarios
Es lo que hay
Hace muchas lunas. De todos modos, ha sido un proceso gradual también. Hubo una época en la que España sí se hallaba a la vanguardia intelectual de Europa: el Siglo de Oro. Sin embargo, los fachas reactivos prefieren hablar de las grandes hazañas, que es lo único que entienden. Pienso que la represión de los alumbrados puede haber sido un punto de inflexión. Del mismo modo que nadie está más desatado que los judíos hoy en la censura y el castigo del disidente, así una iglesia semitizada, traidora al origen ario y solar de su culto, nos trajo esta maldición.
Mi querido Miguel.
Este es mi último artículo en este, nuestro periódico, Las razones, las mismas que las tuyas. Gracias por seguirme todo este tiempo y gracias por, con tus grandes artículos, hacer que yo te siguiera a ti.
Mi abrazo para ti, amigo.
Alejandro Descalzo
Señor Descalzo, dada la inexactitud de sus interpretaciones, trascribo el correo que usted recibió y que consideró censura cuando en todo momento se le dejó decidir publicar lo que desease. La censura, señor , es otra cosa:
Buenos días, Alejandro,
se lo dejo a su elección y le expongo el consejo legal de mis abogados
que me han recomendado el menor uso de calificativos gruesos respecto a
personas e instituciones «si no deseamos que hundan el barco antes de
sacarlo del puerto». Yo mismo he de moderar mi indignación pues, como
sabe bien, estamos como objetivo para algunos enemigos de la
libertad de expresión que están al tanto de este relevo de ÑTV ESPAÑA al
ser yo el editor, antes columnista.
Es por ello que le pregunto si se pueden omitir algunos de esos epítetos
y adjetivos que nos salen del alma indignada al escribir. Se lo dejo a
su entera elección, con total libertad, Usted decide.
Feliz Domingo, Día del Señor.
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En ningún momento se le niega esa libertad de expresión y se le deja absoluta libertad para decidir. Usted decidió marcharse aludiendo censura inexistente, caballero.
Excelente diagnóstico y con solución incorporada, lo que no es frecuente pues ahí estriba la verdadera dificultad. Aunque después nos encontremos con un escollo, a saber: de dónde sacamos a y, sobre todo, ¿cómo se conseguiría que las masas ignaras – complacidas con su analfabetismo funcional y convencidas de su elevadísima preparación y su valía estratosférica – se dejasen arrebatar su cómodo y soberbio analfabetismo? Pero la reflexión y su sentido práctico es buena, sí.
Estoy totalmente de acuerdo en esa puntualización respecto al Siglo de Oro aunque me queda la intriga de por qué es malo hablar de las grandes hazañas ( ¿o es malo si se habla «sólo» de ellas ) y su relación ( ¿condición necesaria y suficiente? ) con el fascismo, pero en realidad no tiene importancia.
Gran artículo, sin melindres y frases hechas.
¡AMEN! Nada que añadir
Nada malo con las grandes hazañas y no dije lo contrario. Sólo que hay que saber ver el conjunto de la problemática de una sociedad y la función primordial del saber en toda sociedad de éxito. El fascismo valora la tradición pero de ahí no se sigue los tradicionalistas sean fascistas, aunque sólo sea porque el fascismo es una reacción a la sociedad de masas urbana e industrial de una época muy concreta y muy agitada.
El pez se pudre por la cabeza (proverbio ruso). España se pudrió por la cabeza.