27/11/2024 01:23
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Pero también lo estaba Bolivia, Cuba o Venezuela, y ahora, ahorita; ‘Señor alcalde, ¡¡ exprópiese !!
 
 
España arde, siente aversión, nota miedo, percibe aprensión, sufre hambre y padece congoja. ¿Existen peores abjetivos?. Un país dividido y cada jornada más incrédulo e impotente. Hay que romper, por qué Pablo Iglesias dice que; ‘en España no hay Democracia, qué no es un país democrático, que Otegi es un hombre de paz y que azotaria a Mariló Montero’. ¿Por qué?, pues por qué dice que es comunista, y además vice preside un gobierno feminista. Pero, riza el rizo cuando manifiesta que ‘envidia a Venezuela’. Sin embargo, jode a España. Son caprichos que se otorga a modo de auto-homenaje. Y si no hay revueltas, o ve a España en llamas, pues esto es un remanso de paz, y hay que invocar disturbios a modo de bailes macabros. Eso de ‘España debe entenderse con España’ no cuela. El movimiento 15-M de 2011 dió mucho de sí. 
 
Sin duda, a alguien le interesa una sociedad asustada y sin movilidad. La desaparición de la clase media, la desesperación del inversor y el olvido de la pobreza. Un pueblo con gobernantes ricos y una sociedad pobre. Un país conflictivo, con violencia callejera y siempre enfrentados. Aquí nadie invierte, el dinero es cobarde y se marcha. Y esto es llover sobre mojado. El Covid-19 está cundiendo. Con rap mordaz y rapero abstracto cargado de ansias y tirria a todo lo que se menea, con políticos presos o golpe de Estado de anti-sistemas delincuentes, con benevolencia a criminales de ETA o Gobierno que no gobierna, pero sí se reúne con quiénes destrozan a la luz del día, cobran peaje y hacen enmudecer cómo zorros a los responsables de tanta ruina. España se desintegra, pero no es Sánchez su protagonista, sino destruyen otros. El Presidente solo les proporcionó el poder. El poder hacerlo. Aquí no hay quién pegue ojo, el insomnio nos persigue. No sé si Moncloa sirve cómo somnífero, de lo contrario los párpados deben estar cuál ropero empotrado abiertos de par en par. 
 
No hay aparentemente motivos para batallas bélicas en un Estado de Derecho y una de las Democracias más consolidadas del mundo con dirección a la dictadura bolivariana más cruel y descarada de la Historia. Sí es necesario protestas cívicas que enderece el rumbo de esta tragedia. La prensa se deja comprar (salvo honrosas excepciones), la banca negocia, la industria decide y el ciudadano soporta y mantiene silencio. Sin embargo, se crea o provoca distorsión, se alientan algaradas contra las instituciones desde las propias instituciones. Puede parecer insólito – y lo es-, pero no ilógico, sino con sentido de malvados estrategas ‘polítitologos’, cómo respuesta a intereses directos y con ‘propósitos subterráneos’.
 
Es absurdo que el vicepresidente de un gobierno aúlle contra su propia gestión o en sociedad. Ni se entiende que el máximo responsable, el Presidente Sánchez, lo permita o desaparezca de la escena pública mientras el ciudadano aprecia cómo se derrumba toda ilusión de un pueblo ejemplar y capacitado. Pero, capacitado y ejemplar fue Cuba, Bolivia o Venezuela. Ahora, ahorita; ‘ Señor alcalde, ¡¡ Exprópiese !!’. 
 
El cerebro humano es la ‘máquina’ más perfecta, sensible y capaz de todo. Ambos hemisferios cerebrales superan los más sofisticados artilugios creados por el hombre a través de los siglos. De ninguna manera, usted lector, va necesitar algún tipo de clase biológica para recordar que es exactamente así. La sutileza cerebral se pone a pruebas solo frente a la televisión, o cualquier otro medio de comunicación, para sentir que también tiene sus límites. El telediario, ese boletín informativo constante, ya es insoportable desde su sintonia músical, presagia lo peor. Y la catástrofe llega. Es cierto que el Informativo solo es la realidad de la situación española, aunque se tergiversan titulares y se omiten otros. Se trata de enredar e intoxicar, crear opiniones divergentes y aportar criterios inexactos. Así imposible desenredar las pésimas gestiones frente a la pandemia, comprender por qué las maniobras de Sánchez y su acólito Iván Redondo, o ¿Donde están las motivaciones para considerar al rapero Pablo Rivadulla Duró (Hasél) cómo estandarte de la libertad ?. Sin embargo arde Troya. Unos disturbios a degüello, ataques a la sociedad y desprestigio de todo un país ante la opinión exterior. Flaco favor a los enemigos de España. Mientras los jóvenes vándalos se jactan de la proeza. ¿Quiénes movilizan a estos inconscientes?, ¿Qué ingeniería les mentalizan?, y ¿Cuántos ciclos de pedagogía reciben?. 
 
La libertad de expresión termina cuando empieza la violencia, la enajenación o el odio. Se puede decir rapeando, o más fuerte, pero no más claro. La libre expresión es sagrada, la manifestación criminal es reprobable. La sociedad es el conjunto de gente que preserva el respeto, exige sus derechos como persona y cumple con sus deberes cómo ciudadano. Algo tan sencillo cómo decidir vivir en paz dentro de una comunidad. Lo demás puede ser motivo de ayuda psicosomática. 
 
Todo tiene solución, hasta este Gobierno de coaliciones antisociales. Y lo será mientras no se identifique, tenga capacidad de solidarizarse y esté a la altura de las circunstancias públicas, de una España que luchará por volver a ser lo que fuimos y no seremos lo que, con calzador, nos imponen y obligan. La Historia (de los historiadores) lo deja claro. España deja huella hasta a los más vehementes y tercos guerreros con ambiciones mentales anormales, hasta el punto de pretender conquistar y controlar toda Europa. Pero en su intento en España dijo; ‘ Los españoles todos se comportaron como un solo hombre de honor. Enfoqué mal el asunto ese, la inmoralidad debió resultar demasiado patente; la injusticia demasiado cínica y todo esto harto malo, puesto que he sucumbido ‘. Napoleón I Bonaparte (General republicano).
Anián Berto
Periodista – escritor

Autor

REDACCIÓN