20/09/2024 12:59
Getting your Trinity Audio player ready...

Los liberales suelen decir que “todo en la política se hace por el interés” o por el dinero, pero si dejamos la libertad al mercado, que cada uno compre lo que quiera y pueda, todos los problemas sociales se irán resolviendo. Y si hay problemas, es porque no hay libertad, especialmente económica.

El que Musk no pueda comprar las acciones dominantes del Twitter, aunque ofrezca un 38% por encima de su valor en el mercado (hasta amenaza con vender su 9,2% si no le dejan), es la prueba que para los amos de este mundo hay algo más importante que el dinero. Queriéndolo o no, Elon Musk ha revelado el secreto.

También queda claro que es importantísimo para nosotros. De ello depende en buena medida el “futuro de la civilización”, en palabras de Musk que tienen mucho de acierto: «Así que Elon, hace unas horas, hiciste una oferta para comprar Twitter, ¿por qué?» «Esto no es una forma de hacer dinero. Es sólo que creo, mi fuerte sentido intuitivo de que tener una plataforma pública que sea de máxima confianza y ampliamente inclusiva es extremadamente importante para el futuro de la civilización.»

¿Te imaginas poder hablar REALMENTE de la memoria histórica? ¿De la Revolución Francesa, de Guerra de la Vendée, la primera y segunda guerra mundial? Feminismo, ideología LGBT, democracia y otros sistemas políticos, sistemas financieros, multiculturalismo, fenómenos migratorios… ¿Te imaginas hablar con libertad de todo ello? No te puedes ni imaginar, porque no existe.

[“Elon Musk, para el genocidio blanco”. Puff… lo veo difícil que se dé cabida en las redes para acciones y palabras de este tipo]

LEER MÁS:  “Progresistas" en la depravación (2). Por Fígaro

Hablar con libertad constructiva, eso el poder actual no quiere permitir. Porque lo pondría en peligro. Porque, parafraseando a A. Torba, director de Gab, si tocas temas controvertidos, provocarás atención. Si provocas atención, es porque tienes influencia. Y si eres influyente, tienes el poder. El que tiene el poder, lo sabe. Ergo, ahí está el límite. Porque, aunque el poder tiene en sus manos la legislación con las que golpear a los traviesos, tanta libertad y tantas expresiones incómodas no se podrían acotar sin colaboración de los medios, ni siquiera disponiendo de muchos recursos legales. No sería muy viable en la vida diaria, y lo saben.

Hay dos cosas que se deben conseguir y practicar, para poder hablar.

Una es que te lo permitan las leyes. Para eso, debes tenerla. Y para eso, debes, o al menos los más cercanos a ti, llegar al poder. Trabaja en ello.

La otra es, de aquí a que ocurra lo primero, que empieces ya. ¿Pero cómo voy a hablar y escribir libremente, si está prohibido? En efecto, por hoy no puedes. Como ellos, no. Pero lo que sí puedes, y debes, es pensar. Luego actuar en consecuencia y de forma coherente. No puedes permitir a nadie que piense por ti. Esos pensamientos debes comunicar a otros, que quieran escuchar y los que trabajan en el mismo proyecto.

Construye tu nido de libertad. De los nidos bien hechos, salen muchos frutos.

Autor

Avatar
REDACCIÓN