27/04/2024 09:42
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Me dirijo al último socialista  porque sé que uno, al menos uno, queda, porque lo conozco y es mi amigo. Los demás han ido rompiendo el CARNET durante los últimos dos años, desde que el Secretario General,  tu Secretario General,  el Secretario General del PSOE, el partido que fundó Pablo Iglesias, pactó con los separatistas catalanes, los comunistas, los nacionalistas vascos y los bildu- terroristas, en la Moción de Censura que le dió el poder y le llevaron a la Moncloa.
   Lo que han ido viendo en este tiempo ha motivado esa incesante ruptura de  socialistas que, por españoles,  han ido rompiendo sus carnets… pero los  que quedaban seguro que lo han roto el pasado día 13 de septiembre del 2021 (un día que quedará para la Historia)  al ver, incluso con lágrimas en los ojos, cómo el Secretario General, su Secretario General, el Secretario General del PSOE, humillaba a España al romperse el espinazo ante la bandera catalana mientras le quitaban la de España, como si fuese un trapo sucio y viejo que no  puede salir en la foto.
     Ojo, pero lo novedoso es que todos esos que han ido rompiendo su  carnet  del PSOE (o lo han guardado como una reliquia del pasado) al mismo tiempo que  se deshacían del símbolo del histórico PSOE, iban sacándose el carnet del nuevo partido, el que ha fundado don Pedro Sánchez y Pérez Castejón  (el biznieto del general Castejón), el último  Secretario General del PSOE.
El nuevo partido se llama «PDPSC», que son las siglas del nombre completo, que es el Partido De Sánchez y Pérez Castejón (aunque algunos, los mal pensados, le llamen el partido de Sánchez por cojones),  pues, dicen,  publican, al que hay que apuntarse si quieres seguir con el sueldo a dedo o el chiringuito con subvención que disfrutas para poder vivir sin trabajar…¡¡eso del trabajo !!!
     Pero, mi amigo, como digo, el último socialista de verdad, de verdad,  que queda con carnet, lo ve de otra manera, incluso contra mi criterio (buenas y largas disputas estamos teniendo por este tema)  ya que defiende a los que se han ido con un argumento de peso (de tanto peso que al final me está convenciendo): que se van o se han ido por lo que dejó escrito Pablo Iglesias, el fundador del PSOE.
    Según mi amigo, socialista, el último socialista, la tarde del 2  de mayo de 1879, cuando 25 amigos decidieron formalizar el partido que el compañero Pablo Iglesias tenía ya en la cabeza desde 1870, hubo dos debates nada más proponer «el Abuelo» (ya le llamaban así, por su barba  y su pelo totalmente blancos) el nombre del partido.
   — Se llamará Partido Socialista Obrero Español.
   — No estoy de acuerdo –dijo de inmediato  el doctor  Vera, uno de los 3 médicos que hubo en aquel acto fundacional– yo no le llamaría Obrero, yo creo que queda  mejor PSE, lo de Obrero… ¿qué quiere decir eso ,que el que no sea obrero no puede ser del partido?
   — Pues, no olvides amigo Vera, que nosotros  seremos lo que tú quieras que seamos, pero por encima de todo, este partido, nuestro partido, tiene que ser el partido de los obreros. Yo soy un obrero.
  (Bueno, tras un largo tira y afloja de los asistentes se aprobó que la O de obrero figurase en el nombre.( Aunque se acordó que a los escritores, periodistas o  profesores que quisieran pertenecer se les llamara «Obreros de la Inteligencia»).
  — Alguien tiene algo más que alegar respecto al nombre –recalcó Don Pablo..
 Entonces levantó la mano otro de los médicos asistentes, el doctor Zubiarre, vasco, y dijo.
  — ¿Y por qué, español? ¿ No estaremos dejando fuera a otros obreros, que no se sientan españoles?   yo, por ejemplo, antes que español me siento vasco…
  — Un momento –dijo «El Abuelo» cortando  en seco al vasco y levantando la voz-, un momento, porque esto quiero que quede bien claro desde el principio y sin discusión alguna. Este partido que hoy fundamos, el PSOE, será y se llamará siempre Partido Socialista Obrero Español, porque o es español o no lo es, y si lo es no hay más que hablar y si no lo es aquí sobramos todos.
  — Pues, eso, eso dice mi amigo, el último socialista con carnet… si el PSOE, de la mano del Señor Sánchez, ha dejado o está dejando de ser por encima de todo español…. y después de ver lo que vimos todos, la vergüenza, la humillación, cómo retiraban la bandera de España, ante sus narices, sin que pusiera firme al catalán (que  además es un enano de estatura) y la impusiera por cojones.
             Señores socialistas, lo acepten o no lo acepten, lo que está haciendo Don Pedro Sánchez con comunistas, independentistas, nacionalistas, bilduetarras terroristas, lo puede hacer como Secretario General de su nuevo Partido, el «PDPSC», pero no, nunca, como Secretario General del PSOE,, porque, como dijo el fundador, si al PSOE le sobra la «E»,  sobramos todos.
          Claro que ante la disyuntiva de O SÁNCHEZ CON SUELDO Y CHIRINGUITOS O CALLE Y PARO… la elección es bien sencilla. AMÉN A TODO Y VIVA LAS CAENAS… que en la calle hace mucho frío..

Autor

Julio Merino
Julio Merino
Periodista y Miembro de la REAL academia de Córdoba.

Nació en la localidad cordobesa de Nueva Carteya en 1940.

Fue redactor del diario Arriba, redactor-jefe del Diario SP, subdirector del diario Pueblo y director de la agencia de noticias Pyresa.

En 1978 adquirió una parte de las acciones del diario El Imparcial y pasó a ejercer como su director.

En julio de 1979 abandonó la redacción de El Imparcial junto a Fernando Latorre de Félez.

Unos meses después, en diciembre, fue nombrado director del Diario de Barcelona.

Fue fundador del semanario El Heraldo Español, cuyo primer número salió a la calle el 1 de abril de 1980 y del cual fue director.
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