Venceremos. Por Eduardo Olivares

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En la gran crisis americana del 29 quebró Wall Street, la mayoría de los bancos se hundieron, naciendo los buitres especuladores, aprovechándose de la miseria, la angustia y el dolor.

Esta música llegó rápido a los sicilianos, que rápidamente hicieron las maletas y se fueron a hacer las Américas. Especularon, sobornaron, asesinaron etc., etc., y se engancharon con gran habilidad al poder e hicieron grandes fortunas, jugando también a la democracia, sin demócratas, pero con el éxito que la corrupta política les dio.

Cuando consigamos pactar con el coronavirus, “nuestra gran crisis“, se intentara imponer la mafia bolivariana, que hábilmente se ha sabido aprovechar de la ambición de un individuo representante de la mentira. Sin valores ni principios, desconociendo los principios de la Patria, pisoteando nuestra historia y desconociendo el espíritu de la Patria, traicionándose él mismo y, una vez que con sus mentiras y falacias consigue el poder, viendo que no puede con el enemigo, se abraza a él y funda el movimiento socio-comunista. ¡¡¡Horror!!!

Camaradas, en nuestro catecismo no existe otro pensamiento que el de VENCER, “amamos la paz porque sentimos a España y somos avaros de la sangre de nuestras juventudes (algunos seguimos siendo jóvenes), pero sobre todo está nuestra dignidad e independencia. Queremos ser soldados de primera línea. No podemos olvidar ni despreciar los enormes sacrificios y desvelos que hicieron nuestros antepasados, defendiendo la honra de nuestra Patria” (Francisco Franco).

En nuestro fundamento, la lección primera siempre es la Patria: ESPAÑA.

Nuestro símbolo: la Bandera roja y gualda.

Y nosotros tenemos que ser soldados a la sombra y al amor de nuestra bandera.

Unión, hermandad en lo físico y en lo espiritual, en las alegrías y en las penas, en la grandeza heroica y en los sacrificios, por todo esto permitir a este nostálgico, que desgraciadamente vive del recuerdo, pero con la añoranza de que vuelva la primavera, aquel juramento que en aquellos tiempos con verdadera sinceridad y sentimiento se hacía:

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“Juro, a Dios y prometo a España, besando con unción mi bandera, respetar y obedecer siempre a mis jefes, no abandonarles nunca, y derramar, si es preciso, en defensa del honor e independencia de la Patria, y del orden dentro de ella, hasta la última gota de mi sangre”.

Y este juramento lo renovamos:

Cuando leo en la puerta del cuartel “TODO POR LA PATRIA“.

Cuando me inclino ante mi bandera.

Cuando saludo a mis jefes.

Cuando desfilo en mi compañía.

Porque pienso en mi grande y honrosa misión de soldado. Este mismo lugar que yo ocupo en mi fila perteneció a alguien que supo luchar y quizá morir por mi Patria.

¡Y su espíritu me alienta!

¡Y su espíritu hace INMORTAL A ESPAÑA!

Algunos pensaréis que estoy grillado, pero os aseguro que no. Ahora mismo, en este secuestro ya de cuatro meses que llevo, lo único que me alienta son los recuerdos, la añoranza y la necesidad de defender junto a mis camaradas la posición que tenía nuestra Patria. Aunque yo también, como los demás, pienso en los cómic pero, por lo menos, aunque sea un disparate, me gusta pensarlo, en vez de oír a todos estos sinvergüenzas y traidores(incansables) todo el día.

Todo nada más es un pensamiento.

Eduardo Olivares. Asociación Despierta España.