20/09/2024 07:47
Getting your Trinity Audio player ready...

Entrevista a Attila Demko, experto en política de seguridad húngara, escritor, y exdiplomático, actualmente dirige el Centro de Geopolítica del Matthias Corvinus Collegium.

Según los medios occidentales Ucrania está ganando la guerra, según los medios rusos es todo lo contrario. ¿Qué cree que está pasando realmente en esta guerra?

Creo que esta guerra no está yendo bien ni para Rusia ni para Ucrania. Rusia falló en su operación militar y lo que sucedió en Kiev no fue un desastre, pero sí una derrota militar. Ahora, la ofensiva en el Donbás avanza muy lentamente y Rusia consigue algunos de sus objetivos. Por otro lado, en esta batalla Ucrania está teniendo más bajas debido a la concentración de la artillería rusa. A largo plazo es muy difícil contemplar una victoria ucraniana y ese discurso es demasiado optimista porque Rusia puede emplear armas más letales en la guerra, y no me refiero a armas nucleares o químicas, sino a la destrucción de las infraestructuras de gas y petroleó, los puertos, etc. Es decir, Rusia tiene más herramientas a su disposición, unas herramientas que Ucrania no tiene a pesar de contar con el apoyo de Occidente. Rusia tiene más población, tanques, artillería y aviones que utilizar, y Ucrania está realizando un esfuerzo máximo. Por eso, en términos de una guerra larga, Rusia tiene más opciones y capacidades.

¿Por qué Rusia no está utilizando todas esas capacidades?

En parte para tener menos bajas y también porque esa destrucción de la infraestructura ucraniana puede ser una buena herramienta de negociación. También está el hecho de que no creen que estén perdiendo la guerra y no lo consideran necesario. Estas pueden ser las razones, aunque realmente es difícil saberlo.

No obstante, en Rusia la idea de la movilización no parece muy popular y, por otro lado, la línea dura acusa a Putin de estar fracasando en la guerra. ¿Cree que un nuevo revés militar ruso podría complicar el control del Kremlin?

Creo que existe un descontento por cómo se está desarrollando la guerra. No sólo por parte de los liberales, sino también por los sectores más nacionalistas, pero parece que la mayoría de la población apoya la guerra. En parte por la propaganda, pero también por un sentimiento herido de orgullo nacional. No veo imposible que se lleve a cabo una movilización aunque, por supuesto, sería difícil y por eso Rusia está intentando evitarla o hacerla de un modo oculto.

Por ahora el poder de Putin parece sólido, aunque no sabemos nada seguro sobre sus enfermedades y es difícil saber lo que ocurre en el Kremlin, y tampoco hay nadie que pueda sustituirlo. Además de su popularidad, su círculo de poder son sus “viejos amigos” que se lo deben todo y que difícilmente le dejarían caer salvo que se produzca una gran derrota.

¿Es posible una derrota así?

Es muy difícil. Los ucranianos son muy buenos defendiéndose, pero el ataque es algo muy diferente. La ventaja rusa en números, artillería, tanques y aviones es muy grande. Estas ventajas pierden su importancia en las batallas en ciudades o fortificaciones, pero hacen muy improbable una gran derrota rusa.

Por tanto, tomar una gran ciudad como Járkov sería muy difícil y costoso para los rusos.

LEER MÁS:  Giovanbattista Fazzolari: “ECR defiende la libertad y soberanía de Ucrania contra el imperialismo neo-soviético de Putin”. Por Álvaro Peñas

Incluso las ciudades más pequeñas del Donbás están siendo un problema para los rusos. Severodonetsk tiene 150.000 habitantes, Lysychansk tiene 100.000. Y hay grandes ciudades como Zaporiyia, Dniepro o Mykolaiv, que van a ser muy difíciles de tomar.

En las últimas semanas algunos líderes y medios occidentales han empezado a hablar de cesiones territoriales de Ucrania a Rusia. Esto no ha sentado bien en Ucrania, que señala que países como Alemania o Francia quieren volver a sus negocios con Rusia.

Hace un mes los estadounidenses y los británicos dijeron que Ucrania podía ganar la guerra, los alemanes nunca han dicho eso. Me parece que su postura es más realista y que obedece a su propia agenda. No obstante, los estadounidenses y británicos tampoco son ahora tan entusiastas. En la prensa británica hay un cambio de tono y ya no es tan favorable a entregar todo lo que están pidiendo los ucranianos. No sé cuál es la razón, pero tenemos que darnos cuenta de que Rusia no puede ser derrotada realmente, aunque sí hacerla pagar un alto precio. Ucrania sólo puede ganar si Putin muere y se produce una crisis interna en Rusia.

Aleksey Arestovich, uno de los principales asesores de Zelensky, afirmó hace unas semanas que, según un estudio previo a la guerra, Rusia entraría en crisis sí sufría 80.000 bajas. ¿Puede Ucrania forzar a Rusia a negociar?

Depende de como evolucione la batalla del Donbás. Si los rusos toman el Donbás con facilidad eso les dará una gran ventaja, pero si se establece un frente estable eso sería en cierto modo una victoria ucraniana. Con todo, hablamos de una pérdida de un 20% del territorio y de que en unos años la guerra podría volver a repetirse.

Este es un plano, el otro es el económico. ¿Cómo puede sobrevivir Ucrania económicamente? Ucrania necesita mucho dinero, 5.000 millones de euros al mes, y ese dinero no puede ser prestado, sólo puede ser concedido. ¿Están los alemanes, húngaros o españoles dispuestos a pagar 60.000 millones de euros al año, durante varios años? Ahí está el problema, conseguir que Ucrania sea un Estado viable después de la guerra. Una solución podría ser la confiscación del dinero ruso, de los oligarcas rusos, de lo contrario es muy difícil pensar en cómo financiar a Ucrania.

Creo que la mejor opción para solucionar la guerra sería ese frente estable. No en términos de moralidad, por supuesto. Moralmente lo justo sería que los rusos abandonasen el territorio ucraniano, pero la realidad no tiene nada que ver con la moralidad, y lo cierto es que soy muy pesimista. Antes de la guerra Ucrania se encontraba en una situación muy mala demográfica y económicamente, y está guerra hace muy difícil su futuro.

Hungría ha sido muy atacada por los medios a pesar de haber apoyado las sanciones comunitarias contra Rusia. A diferencia de otros líderes, Viktor Orbán apoyó las sanciones en la última reunión de la UE pero salvaguardando los intereses de su país.

El ataque de los medios ha presentado a los húngaros como el pueblo más desagradable de Europa por defender la realidad y el sentido común. Nuestra postura respecto a las sanciones es muy lógica, apoyamos las sanciones que hagan más daño a Rusia que a nosotros. Si perdemos más que Rusia, ¿qué sentido tienen las sanciones? Hemos aceptado los paquetes de sanciones y acogido a más de 700.000 refugiados ucranianos, de los que cerca de 200.000 han decidido permanecer en Hungría. Eso representa un 2% de nuestra población, imagínese lo que sería para España coger en unas semanas a un millón de personas. Hungría está haciendo mucho por Ucrania, no damos armas letales, pero damos ayuda humanitaria y curamos a sus soldados heridos. Lo que no hacemos es aceptar todo lo que pide el gobierno ucraniano, como las sanciones al gas y al petroleó que, además, también serían perjudiciales para la propia Ucrania que obtiene beneficios de ellos. Por eso, cuando se nos acusa de dar dinero ensangrentado a Rusia por el gas y el petróleo, bueno, una parte va para Ucrania.

LEER MÁS:  La izquierda no es demócrata ni acepta la derrota. Por Fígaro

Nuestro mensaje a los líderes occidentales es que nosotros vivimos en la realidad. El petróleo ruso es muy importante para Hungría, la República Checa, Eslovaquia o Austria. Es una realidad que no podemos cambiar. La UE necesita aplicar una política realista con Rusia.

En uno de sus artículos mencionaba que esta guerra podía servir para despertar a los europeos a la realidad. ¿Cree que se está produciendo ese despertar?

Está pasando, al menos en Europa Oriental. En Hungría cada vez hay un mayor apoyo al ejército y ya empezamos una política de rearme en 2016 y estamos mejor preparados. Lo mismo está sucediendo en Eslovaquia, los países bálticos e incluso los nórdicos. Creo que este despertar llegará a toda Europa porque es necesario. Rusia ha perdido más tanques en esta guerra que la suma de los de Alemania y Francia. Europa necesita ejércitos para defenderse y proteger sus fronteras, y recuperar los viejos valores: defender tu patria y que el ejército no es necesariamente malo sino el medio para defender tu vida, tu familia y tu nación. Esos valores deben regresar y acabar con la mentira del pensamiento ilusorio de muchos occidentales. En Hungría puedo ver que cada vez hay más personas dispuestas a servir en el ejército, hace seis años no era así.

Esta guerra, ¿es el final o el principio de muchos conflictos?

Es el principio. El mundo ya estaba muy mal antes de la invasión rusa de Ucrania, pero esta guerra ha sido una enorme irresponsabilidad de Rusia, no sólo por la terrible destrucción que ha llevado a Ucrania, sino porque será el comienzo de muchas guerras. La hambruna que va a provocar esta guerra tendrá un efecto dominó. Esta crisis va a ser mucho peor que la de 2008 y afectará a países con mucha más población. Ante lo que está por venir, Europa debe ser inteligente y sobre todo ser fuerte, en ese mundo no servirá de nada ser amable o ser… “woke”.   

Autor

Avatar
REDACCIÓN