22/11/2024 07:08
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Después de cuatro décadas de gobierno socialista y los casi cuatro años de gobierno mixto PP y los restos de Cs, resulta muy difícil entender como es posible que las encuestas den como resultado de las urnas el 29,3% (29 escoños) al socialista Espadas, miembro en los gobiernos del saqueo de los EREs, y el 34,6% (47 escoños a JM Moreno (PP) miembro mas importante del «bífido» último Gobierno de Andalucía.

Según las encuestas el 63,9% de los andaluces piensan que la suma PP, PSOE, podría ser la formula sencilla que terminaría con el cúmulo de dificultades y desdichas que se sufre en aquella bendita tierra -más o menos cómo el resto de España-.

Pero no es verdad; los andaluces saben perfectamente que el PSOE, con su historia en el uso bien aprendido del dinero publico: burdeles, mariscadas y  toda clase de francachelas y cachondeos, no puede, por incompetencia, participar en algo positivo y además ocurre, lo que todos debemos agradecer, algo que indica la tendencia degenerativa que esta padeciendo el socialismo en Europa, donde se asegura que al socialismo le queda poca leche en la ubre por mucho chupetón que le pegue al pezón. El futuro que se le vaticina al socialismo terminará en pocas fechas en el fondo de un retrete, al albur de que una benefactora mano tire de la cadena.

Los andaluces tienen claro que del PSOE -de la Izquierda en general-, no se puede esperar nada bueno, inteligente y productivo -¿a quien se le podría ocurrir esperar algo así?-.  Y mucho menos, tan alejados de lo Divino, milagros, que es lo que parece claro que necesita Andalucía para salir de la actual horrible situación en la que se encuentra. Situación poco menos que irreversible, que tampoco han sido capaces de revertir el dúo Moreno y Marín.

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Pasó el tiempo de pedir al sol o a la luna para recuperar la salud; demostrado la inutilidad de cánticos y bailes para sacar el mal del enfermo cuerpo; nada de sanguijuela y cataplasmas; ahora se utiliza en un quirófano un bisturí en una mano dirigida por un prodigio de cerebro para extirpar el tumor que amenaza una vida, cuando la ciencia farmacéutica no aporta solución con sus drogas. Cirugía en profundidad es lo que parece necesitar Andalucía y para ese menester con el 23,6% (23 escaños) si los andaluces lo piensan antes de emitir su voto, tendrían la inmejorable ayuda de VOX.

Autor

Eloy R. Mirayo
Mi currículum es corto e intranscendente. El académico empezó a mis 7 años y terminó a mis 11 años y 4 meses.
El político empezó en Fuerza Nueva: subjefe de los distritos de C. Lineal-San Blas; siguió en Falange Española y terminó en  las extintas Juntas Españolas, donde llegué a ser presidente de Madrid.