El buzón de denuncias del Ministerio de Defensa ¿harakiri u onanismo? Por Galo Dabouza

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El Ministerio de Defensa, obligado por la Ley 2/2023 a establecer un buzón de denuncias, oficialmente denominado “Canal interno de información”, ya lo ha puesto a disposición de todos los que quieran denunciar corrupción, infracciones graves o delitos cometidos en el seno de las FFAA.

https://www.defensa.gob.es/ministerio/canal-interno/

Es fama que las antiguas Reales Ordenanzas de las FFAA, en su artículo 14 establecían que “La justicia debe imperar en los Ejércitos de tal modo que nadie tenga nada que esperar del favor ni temer de la arbitrariedad.

Dime de qué presumes y te diré de qué careces.

Desde el general de división al recluta obligatorio, todos los que hemos pasado por las FFAA debemos algún favor y todos hemos sufrido innumerables arbitrariedades. Con más frecuencia lo segundo que lo primero.

Y cuantos hemos cometido la estupidez de denunciarlo, hemos sufrido las consecuencias que ratifican lo antedicho. Mejor no meneallo.

El patio de Monipodio y el puerto de Arrebatacapas son lugares más seguros que cualquier establecimiento militar. En aquellos, el particular tiene la posibilidad de defenderse con sus propios medios con alguna probabilidad de fortuna.

En la institución militar, los desproporcionados medios de la defensa nacional (bélicos y jurídicos) se ponen a disposición del mando para atropellar las legítimas pretensiones del subordinado. Sólo nos queda la divina providencia.

Y ahora la Ministra de Defensa, imputada de cometer delitos tan graves como sobornos a nivel internacional, blanqueo de capitales, asesinatos, tráfico de drogas y un inquietante etcétera, dice que abre el buzón para que cualquier guripa denuncie las tropelías que conozca.

Una de dos, o Marga ha enloquecido y se va a hacer el harakiri, o es un brindis al sol, para que los quejumbrosos subordinados avasallados se alivien por escrito, en la insensata esperanza de que el que ostenta el poder se sancione a sí mismo.

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Yo ya he estrenado el “Rincón de Onán” del Ministerio de Defensa.

Ya puedo dormir tranquilo. Un sargento chusquero leerá mi denuncia, se lo contará a un teniente jubilado, y me responderán diciendo que no son competentes para resolver.

Aquí paz y después gloria.

Autor

Galo Dabouza: Guerrillero insurgente. El sistema lo describe como negacionista, conspiranoico, anticientífico, egoísta e insolidario. Él se cisca en el sistema y no ceja esfuerzos para derribarlo. No usa trabuco, pero a su ordenador lo llama “La MG-42”.