Superhéroes bisexuales, bisontes «no binarios», personajes históricos y de ficción blancos transformados en negros, un instituto de Mallorca obligando a leer comics porno...Por Luys Coleto

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Pura y dura censura, patético revisionismo histórico, el repulsivo «wokismo» y el lobby gay, vampirizando ya todo. Todo tipo de industrias ( cinematográfica y televisiva: Netflix y Disney, top) y religiones ( el Vaticoño y más allá, mucho más allá). Los coles y universidades, ya ni te cuento. Y críos de 10 años hablando de tríos en clase, mientra ven un cómic porno ( el que ven continuamente en sus móviles regalados por sus «responsables» padres). Un putiferio de mil pares de pelotas.Pero nada sorprendente.

Yaya y nieto, bisontes

Y la memorable conversación entre la yaya y el nieto bisonte, crucial gozne, octavo episodio de la quinta temporada de Ridley Jones, la guardiana del museo. Una serie recomendada por Netflix desde los cero años: «Mi corazón dice que como me siento más a gusto es usando el nombre de Fred porque soy no binario y Fred es el nombre que más me va. También uso ‘elle’ y ‘elles’ porque cuando me llaman ‘ella’ o ‘él’ no siento que sea lo correcto«, sostiene el nieto.

«Eso no lo sabía, no me extraña que te cueste centrarte. ¿Cómo vas a liderar la manada sin ser tu verdadero tú? Siento mucho no haber utilizado el nombre y los pronombres correctos. Gracias por mostrarme tu corazón«, contesta la abuela.

Todos bisexuales, los blancos son negros, satanismo y brujería

Y dos dinosaurios homosexuales que quieren ser papás en Dino Ranch. Los superhéroes, afeminándose, todo cristo, como mínimo, bisexual (como un Drácula reciente). Sense8, creada por los hermanos/hermanas Wachowski ( los de la tetralogía Matrix), promoviendo indisimuladamente la homosexualidad. Y Super Drags, haciendo abierta apología de la transexualidad.

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La Sirenita, ahora ( igual que la Campanilla de Peter Pan), de nórdica a negra ( “whitewashing” o “blanqueamiento”, valga la aparente contradicción). Y tantos ejemplos. Cleopatra, habráse visto, si Mankiewicz levantase la cabeza. Y Los Jóvenes Titanes, convertida de serie de dibujos animados en serie con personas de carne y hueso, con continuas referencias al satanismo y a la brujería…

…Y mis queridos Minions, ¿ también habitantes de Sodoma? ¿ Y la publi de Galletas Nocilla, coño ( o piernas) suculentamente abierto? Joder, la verdad, cómo está el patio. En fin.

Autor

Luys Coleto: Nacido en Bilbao, vive en Madrid, tierra de todos los transterrados de España. Escaqueado de la existencia, el periodismo, amor de juventud, representa para él lo contrario a las hodiernas hordas de amanuenses poseídos por el miedo y la ideología. Amante, también, de disquisiciones teológicas y filosóficas diversas, pluma y la espada le sirven para mitigar, entre otros menesteres, dentro de lo que cabe, la gramsciana y apabullante hegemonía cultural de los socialismos liberticidas, de derechas y de izquierdas.