Los taurinos acampan a las puertas del Ministerio de Trabajo para reclamar ayudas

“A nosotros nos ha discriminado totalmente y no nos las da simplemente por el hecho de ser toreros sin más justificación”, dice Corralejo. Cabe recordar que el sector taurino está dentro del sector artístico.

“Formamos parte de Cultura, estamos integrados en el Ministerio de Cultura, el ministro Uribe nos reconoce como artistas, pero Yolanda Díez nos dice todo lo contrario, que no somos artistas y no tenemos derecho a la prestación extraordinaria por el coronavirus”, explica Corralejo.

Motivos ideológicos

Los profesionales de la tauromaquia se manifestaron ya este martes y pidieron la dimisión de la ministra de Trabajo. Fue la primera de las concentraciones convocadas ante las puertas de su Ministerio para protestar por la «discriminación» en el reparto de ayudas por la crisis del Covid-19, discriminación que atribuyen a “motivos ideológicos”.

Las concentraciones, que continuarán miércoles y jueves, han sido organizadas por la Unión de Picadores y Banderilleros de España (UNPBE) y por la Agrupación Sindical de Mozos de Espadas, con el objetivo de llamar la atención ante la grave situación por la que atraviesa el sector, al que no se han concedido ningún tipo de compensaciones por el parón del estado de alarma.

Además de cientos de picadores, banderilleros y mozos de espadas, a esta primera concentración también acudieron, entre otros, figuras del toreo como Espartaco, Cayetano, José María Manzanares, Diego Urdiales, Cristina Sánchez, Emilio de Justo, Paco Ureña o Miguel Ángel Perera, además del Director del Centro de Asuntos Taurinos de la Comunidad de Madrid, Miguel Abellán.

«Somos cultura»

La concentración estuvo precedida por varias pancartas en las que se afirmaba «Los toreros somos cultura, no a la discriminación», «La discriminación es delito, la tauromaquia es cultura» o «La cultura no se censura, señora ministra no discrimine a los toreros».

El banderillero Javier Gómez Pascual leyó un manifiesto en el que aseguró que «hasta ahora, los toreros hemos sido discretos, quizás en exceso, y hemos resistido con admirable fortaleza insultos y agravios, pero este acoso y derribo debe de terminar».

«Hemos demostrado entereza desde la quietud, pero nos toca demostrar nuestro valor y también que la tauromaquia es un arte vigente y necesario en la sociedad del siglo XXI. Y todo esto desde la libertad y la falta de complejos», dijo.