25/11/2024 03:12
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La actitud del gobierno del frente popular tanto con el compadreo absoluto con los terroristas, como con el desprecio a las víctimas del terrorismo, es una canallada que espero que algún día paguen, y no hablo sólo de pagarlo en las urnas. Pero hay dos derivadas de este tema aún más preocupantes que el hecho de que ETA tenga “labores de dirección de Estado”, como están llamando ahora a repartirse España entre sus enemigos. Esas dos derivadas son, primero, la extrañeza que aún demuestran muchos españoles ante la complicidad entre terroristas con carné, capucha y pistola humeante y sus colegas que hoy ocupan el gobierno de España, y, segundo, la pasividad de los que están en contra o al menos dicen estar en contra.

Es muy preocupante que aún haya españoles que se mesen los cabellos o se rasguen las vestiduras ante las innumerables negociaciones, pactos, cambalaches y cogobernanza entre los terroristas y este régimen. No es que el sistema durante estos últimos 45 años haya negociado con ETA, es que ambos están en el mismo negocio, porque ETA o sus distintas marcas electorales y políticas son sólo una parte más de este régimen, ya no desde 1978 o incluso desde 1975, sino desde 1973 cuando ETA asesina a Carrero Blanco para, precisamente, traer a España este sistema.

Veo mucha ingenuidad entre los españoles que se hacen los indignaditos cuando Bildu-ETA dice que “viene a Madrid a tumbar el régimen”. Bildu-ETA viene a Madrid, y ya está en Madrid y en el resto de todas las instituciones democráticas, no para tumbar el régimen del 78 que ha convertido a ETA en pieza fundamental del sistema, sino que vienen a Madrid y están en todas las instituciones para seguir utilizando ese régimen del 78 para tumbar a su enemigo que en realidad es España. Como dice Juan Manuel de Prada, no vienen a tumbar el régimen, sino a consumarlo.

Y si los etarras siempre se han encontrado cómodos y fuertes en las negociaciones con cualquier gobierno desde Suárez a Sánchez, pasando por González, Aznar, Zapatero y Rajoy. Ahora, ya es que se sienten como en su casa y han entrado hasta la cocina con el gobierno del frente popular actual que se siente orgulloso y heredero de aquel otro frente popular, el de los años 30 del siglo pasado, ya que ese frente popular fue ladrón, corrupto y traidor a España y asesino hasta el genocidio, y esta versión de frente popular del siglo XXI, casi 100 años después, salvando las distancias de que esta época, de momento, es menos subversiva, va por el mismo camino.

Es decir, ver diferencias entre lo que defiende el gobierno del frente popular actual y lo que es ETA, supone no conocer ni lo que fue la historia de España del siglo pasado, ni lo que es ETA, que recordémoslo, es una banda terrorista tan socialista y comunista como separatista, y también lleva consigo olvidar lo cerca que han estado siempre socialistas, comunistas, separatistas y terroristas en sus intenciones contra España. Y los pocos asesinatos de ETA contra socialistas y comunistas, como también las respuestas que dio el PSOE a ETA con el GAL, fueron sólo en realidad guerra entre bandas mafiosas que se disputaban el pastel y que ahora están otra vez sentados en la misma mesa para repartirse España.

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Y la otra derivada de este tema del compadreo del actual frente popular con ETA que, repito, es aún más preocupante que la traición en sí, es la pasividad de los que dicen estar indignados con esta situación. Porque esta pasividad de los españoles, con todo lo que está ocurriendo en general y con esta nueva infamia en particular, ya es complicidad con el crimen. Complicidad que lleva consumándose casi 50 años con muy pocas excepciones, la de los patriotas de verdad, no los de ocasión, que somos los únicos que llevamos décadas enfrentándonos a ETA y a todos sus cómplices en todos los ámbitos, entre ellos también en las calles. Y siempre que ha ocurrido esto, el sistema ha corrido para acudir…¿en defensa de quién, de los que defendíamos a España? No, para acudir en defensa de separatistas y terroristas.

Todos los Ministerios del Interior, desde los ocupados por el infausto Martín Villa a los ocupados por el actual Marlaska, al que una compañera de gabinete le llamaba “nenaza”, a los patriotas nos han multado, prohibido actos, detenido o encarcelado cuando hemos plantado cara al terrorismo etarra y sus cómplices. Y los patriotas nos hemos visto abandonados por buena parte de ese pueblo español que dice estar indignado con la postura ante ETA del Gobierno de turno, el de antes y el de ahora, y que ha seguido tragando, callando y votando a los que negociaban con ETA. Porque ETA hoy es prácticamente parte del Gobierno de la nación que asesina, porque todo el sistema, derecha, izquierda, jueces, medios de comunicación, obispos, fuerzas armadas y fuerzas de orden público (con muy pocas excepciones) han permitido que ETA haya marcado la política española durante décadas.

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Pero nos apoye quien nos apoye, los falangistas y otros muchos patriotas seguimos en las calles, este próximo viernes 20 de noviembre a las 9 de la noche tendremos nuestro tradicional acto de homenaje a José Antonio Primo de Rivera, precisamente asesinado por el Frente Popular del siglo XX, en la calle Génova y nuestra marcha nocturna hasta el Valle de los Caídos. Pero éste no es sólo un acto-homenaje, es una muestra de lucha, porque hay que luchar los 365 días por España, España no merece ni un día de descanso.

Autor

REDACCIÓN