La carta de la novia de Jose Antonio a Francisco Franco

El 12 de marzo de 2015, con grandes alardes tipográficos, el diario El País, reproducía, además de otros comentarios sobre la relación de Franco y José Antonio que no vienen ahora al caso, una carta que el 24 de noviembre de 1936 le escribía a Franco quien decía ser la novia de José Antonio Primo de Rivera y que la comenzaba diciendo: «Mi general. Soy la novia de José Antonio Primo de Rivera…». La firmaba «María Santos Kant«. El periodista de El País, que firmaba el artículo, Jesús Ruiz Mantilla, decía que «ni en Google, ni en los índices onomásticos. El rastro de María Santos Kant no aparece en ninguna de las biografías consultadas. Es un misterio para los expertos…». [Artículo de El País: El desprecio de Franco a José Antonio]

Muy pronto, esa información de El País inundó las redes sociales y muchos de los lectores quedaron atónitos de lo que pensaron era un gran descubrimiento que se producía después de cerca de 80 años. Pero la verdad no es esa, porque hay vida más allá de Google y hay millones de seres y de cosas que existen y no están ahí. Esa carta permaneció años en el archivo, es de suponer, de Franco; pero un día cayó en mis manos un catálogo de una librería de viejo y me sorprendió que, además de varios títulos de libros que tenía a la venta, venían una serie de documentos que habían pertenecido al general Franco: Discurso mecanografiado, con anotaciones y correcciones manuscritas de Franco; Manuscrito de Franco, con copia mecanografiada de una carta enviada a Manuel Vázquez Moro; Manuscrito de Francisco Franco con su primer decreto como jefe de Estado; Manuscritos originales de Franco con asuntos varios, y así hasta casi un centenar de documentos, entre ellos la famosa carta de «María Santos Kant» que fue la que más me llamó la atención y mi interés en conocer su contenido donde el librero en su catálogo había escrito, y copio literalmente:

«Carta manuscrita de la novia de José Antonio Primo de Rivera a Franco pidiéndole noticias sobre la situación real de Primo de Rivera, sobre el que corren dudas. Firma en Segovia M. S. Kant, C/ Juan Bravo, 6; el 24 de noviembre de 1936»

Poco, pues, consultó el periodista antes citado, porque de haber hecho un buen seguimiento del tema, se hubiera encontrado con lo que ya publiqué en el año 1996 en mi libro José Antonio y la República, donde escribo sobre esa misiva e incluso repito unas pocas palabras de la misma. O sea, el periodista no se enteró de la información que un servidor había facilitado a sus lectores hacía entonces 19 años.

Dado mi interés en conocer y saber el contenido de aquella carta manuscrita, aproveché un viaje que tuve que hacer a Madrid y me acerqué a la librería de Mariano Romo, sita en la calle Carnero 19. Le pedí ver la carta porque me podía interesar, escrita en papel de buena calidad. Muy amable, me la enseñó al mismo tiempo que me dejó leerla y me decía lo que pedía por ella: 150.000 ptas. (hoy 901,52€). Ni que decir tiene que yo no estaba dispuesto a desembolsar tal cantidad de dinero. Así que no llegamos a ningún acuerdo y solo me dio tiempo a memorizar algunas palabras que reproduje en mi citado libro. Ahora el lector puede enterarse del contenido entero de la carta que ha reproducido el diario madrileño El País y que nosotros ofrecemos al lector.

Pocos años después, en el digital El Español, el periodista Peio H. Riaño hace una crítica al libro que sobre José Antonio escribió el historiador Joan María Thomás, que para algunos fue la biografía más importante que se ha escrito sobre el fundador de Falange, ya que se trata de uno de los personajes más relevante de la política española y que para Joan María «en función de tal deseo convirtió la acción política en el motor de su existencia». El crítico también se confunde y dice que el autor de la biografía sobre José Antonio fue quien, según parece, descubrió la famosa carta porque dice: «De hecho, Thomas ha hallado una carta de la que se supone debió ser su última novia, María Santos Kant. Escribe a Franco para que le si la muerte de José Antonio que el bando republicano ha difundido es verdad confirme».

Pero no termina aquí esta historia de la repetida carta porque el pasado año, en el digital El Confidencial, Julio Martín Alarcón escribe: «Pocos días después de que José Antonio Primo de Rivera, líder de Falange Española, fuera fusilado en la cárcel de Alicante el 20 de noviembre de 1936, hace justo 84 años, su novia, M. S. Kant, escribió al Cuartel General del Generalísimo: «Mi general: soy la novia de José Antonio…». [Artículo de El Confidencial: Cuando vuelva José Antonio]

Martín Alarcón ha sido, hasta donde he podido leer, el único que cita mi libro del año 1996 y en donde como ya he dejado escrito, hablo de la famosa carta. Por otro lado, Martín Alarcón comete un error al ilustrar su artículo con una foto de quien dice es «María Santos Kant«, cuando en realidad se trata de la princesa Elizabeth Bibesco que fue, efectivamente, una mujer enamorada del fundador de José Antonio. Por último, hay quien duda de que haya existido «María Santos Kant» ya que no hay ningún rastro sobre ella. Piensan algunos que fue una idea de Marichu de la Mora, esposa de Tomás Chavarri. Ambos mantenían una buena relación con José Antonio Primo de Rivera y de esa forma y manera Marichu quería saber si era cierto que lo habían asesinado.