21/11/2024 19:03
Getting your Trinity Audio player ready...

Antes de comenzar, aclaración prelimininar. Niego y negaré lo que me salga de los cojones. Punto final. La falsidemia coronavírica, el timosida, el cambio climático o el liberticidio de género. ¿Entendiste, legislador? Me vas a comer el género. Acierte o yerre, me vas a decir tú a mí lo que he de pensar. Ya. Una polla en cebolla. ¿Qué negacionismo de género ni qué hostias? ¿Ahora va a ser delito llevar la contraria a esta banda mafiosa? No me vais a imponer vuestras repugnantes ideas a la fuerza, por muchas leyes que concibáis al respecto. Esta dictadura no soportará eternamente, imagino.

Contra la libertad de pensamiento y expresión

Una piara de dementes en la Carrera de San Jerónimo proponiendo feroces leyes (eso sí, soplacirios, ¿para cuándo una Proposición no de Ley para combatir el negacionismo de la prostitución sistémica y sistemática de menores tuteladas). Tan solo Macarena Olona manteniendo la sensatez en el manicomio del congreso. ¿Una PNL para someternos a todos al pensamiento falso y único? Los gallifantes, salvo Vox de momento, nos dicen lo que podemos pensar y lo que no. Proposición no de Ley relativa al establecimiento del orwelliano crimen de pensamiento o crimental con su neolengua a cuestas. Estamos siendo gobernados por simios con pistolas. Cada uno de los diputados que han votado a favor son archienemigos de mi sacrosanta e innegociable libertad. Y batallaré con todas mis fuerzas.

El hecho de que negar algo sea ilícito o delito, por muy «salvaje» que sea, es propio de dictaduras. De cerdos napoleones, otra vez el eterno Orwell. Excremento ideológico para reprimir y multar, aún más. Algún día todo esto se asemejará a la persecución del heliocentrismo. Enhoramala, una nueva etapa de imposición ideológica ha comenzado, ya de forma oficial. Proposición no de Ley para combatir la libertad de pensamiento, opinión y expresión, llamemos a las cosas por su nombre. Haceos a la idea, no somos Venezuela, y muchos no consentiremos. Non serviam. Punto pelota.

¿Negar un hecho probada y manifiestamente falso va ser delito?

Esta futura ley persiguiendo a los «negacionistas de género» demuestra que no es capaz de defenderse por sí misma. Las mentiras repetidas millones de veces jamás se transforman en verdad. Lo siento, Goebbels. Lo siento, Bernays. Lo siento, Pinocho Sánchez. Hay que perseguir la auténtica verdad con una ley a hecha a su medida. De eso se trata. Ni más ni menos.

¿No aceptaste la zanahoria? Pues, palo. Sospecho que no habrá tantos gulags para todos aquellos que osen llevaros la contraria. Si seguimos por esta luciferina vereda no habrá suficientes celdas para tantos españoles. ¿Negar un hecho probada y manifiestamente falso va ser delito? Repito lo que Coleta Morada expuso en uno de sus momentos más inspirados. Me la trae floja, me la suda, me la pela. Diré lo que me salga de la punta del glande. Os molan las mordazas, ya ves, tenéis a (casi) todo el país con un puto bozal en la boca. De todas formas queréis guerra. Y quien quiere guerra la acaba encontrando.

LEER MÁS:  Adoctrinamiento en las escuelas: género, clima, emprendimiento, maderos, bilingüismo, separatismo, digitalización...Por Luys Coleto

Nueva subnormalidad

Parece ser que en la nueva subnormalidad orwelliana – con su señero Ministerio de la Verdad dirigido, propongo, por Don Bulón Ferreras en cuanto halle las tres capas de calzoncillos – no se tolera llevar la contraria ni tener ideas propias. Crimental, lo dicho. Otra caza de brujas. Las brujas- dicen las muy fatuas – de antaño, perseguidoras de hogaño. Marcando a la variada morralla disidente. Con hexagrama amarillo. O con triángulo. Rojo, verde, azul, púrpura o rosa. Mejor, el negro, el que se zurcía en el traje de la gentuza. ¿Recuerdan? Gemeinschaftsfremde («extraño a la comunidad»). Enemigo del pueblo. O tal vez con pedradas, Sestao, cariñoso recuerdo a Rocío de Meer.

La policía del pensamiento. El Gran Hermano ya está aquí. Una patria común, España, que ya era una mierda político-judicial-mediática resulta rezuma más mugre de lo que uno pensaba. La inmundicia de género, agrega más corrosión. Dictadura, sin fingimientos ni disimulos. Una ley para que no podamos pensar que la violencia no tiene género. Evidencia desnuda: mata un asesino, viola un violador, maltrata un maltratador. Tampoco la estupidez tiene género. Ni la maldad.

Una ley que anhela obligar a pensar como a las supremacistas feministas les salga del chumi. Sustituyendo veraz ciencia por siniestras y falaces ideologías. Españoles, la ciencia criminológica honesta ha muerto. Las políticas de género, en ese sentido, son estratégicamente decisivas para el masónico narcorrégimen pedófilo del 78. Globalista arsenal, muy corrosivo y letal, para demoler identidad y soberanía nacional, igual que los movimientos elegetebeí, tan concomitantes ambos.

Es la demografía, covidiota

¿Quién maneja a los títeres (de cachiporra)? Los de siempre: los filántropos de los huevos. Piano piano si arriva lontano, totalitarismo liberticida con el beneplácito de parte de la oposición. El pepé arrodillado, no podía ser de otra forma, ante la nueva religión del Estado. El PP (Partido P`ayudar) y Cs no son oposición. Piensan cohabitar con la «revolución», tal como ocurrió en Venezuela durante veinte años. Ingeniería social, of course. Veamos.

Por ejemplo, en 1980, la Fundación Ford decide que el “enfoque de género” debe estar presente en todos los programas que se aprovechen de su generosísima financiación. Follow the chiringuito, follow the power. Dicha fundación cambia su enfoque sobre el control de la población, pasando del subrayado en los anticonceptivos, a mejorar la educación de la mujer y reducir su dependencia respecto del varón como formas de lograr reducciones de la fertilidad a largo plazo.

LEER MÁS:  Sánchez, el petimetre embaucador del siglo XXI. Por Antonio Cebollero del Mazo

Por otro lado, entre las muchas “obras de caridad” de los Rockefeller, siempre estuvieron muy presentes las pródigas subvenciones de estudios sobre genética, raza y control poblacional. Quizás por ello fueron uno de los mayores promotores del movimiento feminista. Recordemos, a la sazón, a Nicholas Rockefeller en una entrevista con el cineasta Aaron Russo. «Apoyamos y financiamos el movimiento feminista con dos objetivos: aumentar el número de cotizantes a la Seguridad Social y hacer que a los niños los criara el Estado».

Satánica chusma hipermillonaria, desde siempre, costeando a los anticapitalistas ultraizquierdosos de este mundo. Ains, criaturitas.

Genocidio y falsas banderas

Mutaciones (y bombas) demográficas. Sustituciones étnicas. Control de poblaciones. Eugenesia. ¿Les va sonando? Traduzcan: genocidio. En el pasado, el eugenista que buscaba fiscalizar la natalidad, tenía que escrutar una abultada pila de razones para proceder a la esterilización. Ahora las personas se auto castran, argumentando además que lo hacen porque son libres, verbigratia transexualidad. Modas genocidas, tan variadas. Tanto tonto útil.

Curioso, cómo se asemejan las falsas banderas de las élites psicópatas. Sean falsidemias, cambios climáticos o rollos de géneros: objetivos calcados. Nuestros parlamentarios y gobiernos, deplorables fantoches en sus manos. Payasos de frenopático. En fin.

Autor

Luys Coleto
Luys Coleto
Nacido en Bilbao, vive en Madrid, tierra de todos los transterrados de España. Escaqueado de la existencia, el periodismo, amor de juventud, representa para él lo contrario a las hodiernas hordas de amanuenses poseídos por el miedo y la ideología. Amante, también, de disquisiciones teológicas y filosóficas diversas, pluma y la espada le sirven para mitigar, entre otros menesteres, dentro de lo que cabe, la gramsciana y apabullante hegemonía cultural de los socialismos liberticidas, de derechas y de izquierdas.