Getting your Trinity Audio player ready...
|
Gerardo Muñoz Lorente (Melilla, 1955) vive en Alicante desde 1981. Escritor e investigador histórico, tiene publicados veintinueve libros desde 1987 -dieciséis ensayos y trece novelas-, siendo uno de los últimos El desastre de Annual. Los españoles que lucharon en África, que fue editado por Almuzara en 2021. Es autor de más de ochocientos reportajes y artículos periodísticos, muchos de los cuales han sido recopilados en media docena de libros. Colabora habitualmente con el diario alicantino Información y la emisora Radio Alicante (SER). En julio de 2018 fue elegido por las Cortes Valencianas miembro del Consell Valencià de Cultura. www.gerardomunoz.com
¿Por qué un libro sobre la dictadura de Primo de Rivera?
Porque se cumplen 100 años del golpe de Estado de Miguel Primo de Rivera con el que comenzó en España una dictadura presidida por este militar hasta enero de 1930.
¿Por qué se sabe tan poco de este período?
Como nadie salió contento de la experiencia de la dictadura primorriverista, ni siquiera los sectores que la apoyaron cuando empezó: Iglesia, Trono, Ejército, políticos conservadores…, y mucho menos quienes se opusieron a ella, se corrió tácitamente un velo para que quedase en el olvido.
¿Es injusto que lo consideren un período insulso o de transición?
Es injusto que se considere un paréntesis vacío en la historia de la Restauración y, por ende, de la historia de España, tal como han tratado este periodo hasta ahora la mayoría de los historiadores, porque, en realidad, sí que ocurrieron cosas importantes durante aquellos seis años y cuatro meses.
¿Se le puede calificar a D. Miguel como un político astuto y con pocos escrúpulos?
Aunque había sido senador y le hubiera gustado hacer carrera política, lo cierto es que no supo actuar como un político, sino como un militar metido en política, que es distinto. Creía que podría gobernar el país como se gobierna un cuartel, y aunque al principio le fueron bien las cosas, fue cometiendo errores que le costaron la pérdida del poder a él y a la Corona.
¿Cuáles fueron los rasgos principales de esta dictadura paternalista?
Se suspendió la Constitución y se abolieron los derechos individuales y colectivos. Se llevó a cabo una política intervencionista y nacionalista desde el Gobierno que benefició a ciertos sectores de la población y perjudicó a otros. Se consiguió imponer una cierta paz social a costa de falta de libertades y de una represión dura, pero no sangrienta, puesto que se persiguió, se multó, se encarceló y se desterró a los opositores, pero no se ordenó la muerte de ninguno. Se manipuló y se tergiversó la realidad mediante la censura de prensa. Aunque se benefició a la clase obrera urbana, no se hizo lo mismo con el campesinado. No se logró, aunque se intentó, imponer un impuesto único justo ni una reforma agraria imprescindible, por oposición de los grandes propietarios y de los terratenientes.
¿Por qué afirma que fue el creador del populismo de derechas?
Como todos los populistas, supo exponer un diagnóstico acertado de los grandes problemas que sufría el país en aquel momento, pero sin exponer soluciones factibles, manejando una ambigüedad calculada con la que procuró ganarse el apoyo de todos o casi todos los sectores sociales, incluso de los políticos regionalistas catalanes que anhelaban una autonomía para la Mancomunidad de Cataluña. Además era conservador. Mussolini, aunque también era conservador, aún no se había convertido en dictador en 1923.
¿Estuvo implicado Alfonso XIII en el golpe de Estado?
El rey llevaba meses pronunciando discursos en los que atacaba al parlamento y al gobierno liberal, insinuando públicamente lo que decía más claramente en privado, que le gustaría que se abriese un paréntesis constitucional corto en el que un gobierno tutelado por militares resolviera los graves problemas que acuciaban al país. Aunque pensó en ello, no se atrevió a dar un autogolpe, así que esperó a que algún espadón tomara la iniciativa. Los altos mandos militares más prestigiosos del momento no quisieron o no pudieron dar el paso, como el general Aguilera, así que el monarca se conformó con que fuera el capitán general de Cataluña (un «pavo real insoportable», en palabras del rey), quien diese el golpe de Estado, de cuya preparación estaba puntualmente informado por el general Cavalcanti, aunque no quiso participar directamente en dicha preparación, como tampoco la impidió, tal como había hecho anteriormente en otras intentonas. Luego, cuando Primo anunció el golpe, en vez de apoyar al Gobierno legítimo, decidió darle el poder a los sublevados, después de dos días de tomar el pulso al resto de Capitanías Generales y Gobiernos Militares.
¿Cómo fue la relación de Alfonso XIII con Primo de Rivera?
No se tenían simpatía. Alfonso XIII apoyó al principio las medidas tomadas por el Directorio Militar y no tuvo más remedio que hacer lo mismo cuando se nombró el mal llamado Directorio Civil. Aunque se mostró receloso con varias medidas políticas, no se atrevió a enfrentarse a Primo por temor a abrir una grave crisis. La popularidad del dictador era importante durante los primeros años de la dictadura y más aún tras el desembarco de Alhucemas en 1925. Se resistió a firmar el decreto por el que se creaba la Asamblea Nacional porque sabía que eso le iba a costar perder el apoyo de los monárquicos conservadores, como así pasó cuando al final Primo le forzó a hacerlo. Luego, cuando el régimen empezó a descomponerse, a perder apoyos, incluido el de los militares, el rey aprovechó para «borbonizar» a Primo, tal como había hecho anteriormente con todos los presidentes de Gobierno. Consiguió que dimitiese, ya enfermo (murió dos meses después en el exilio), pero era demasiado tarde y la identificación de la Corona con la dictadura terminó acarreando la abolición de la monarquía española y la consecuente proclamación de la república.
¿Cuál sería el balance general de la Dictadura?
Primo consiguió una relativa modernización del país, cierto avance social y económico. Durante la dictadura se fundaron monopolios como Telefónica, Campsa e Iberia, así como la primera Confederación Hidrográfica y el Patronato Nacional de Turismo, se apoyó la exportación y se crearon los comités mixtos en las empresas, Pero todo ello se consiguió a costa de un precio político y social intolerable (privación de libertades) y también económico, ya que al final fracasó la economía de Estado por su desinterés en cumplir con los presupuestos y de intervenir despreocupadamente en la política monetaria. Terminó sin apoyos porque se enfrentó con los universitarios, los intelectuales y hasta con parte importante de los militares.
¿En qué medida marcó alguna de las pautas que fueron referencia para el Régimen de Franco?
Franco tomó nota de lo que él debió entender como virtudes y defectos de la dictadura primorriverista. Copió la idea de un partido único (Primo fundó la Unión Patriótica, Franco utilizó a la Falange), se sirvió de un parlamento títere (consejo de Mussolini a Primo), adoctrinó al tiempo que imponía una censura férrea, trató de organizar a la juventud (SNEFCP -Servicio Nacional de Educación Física, Ciudadana y Premilitar- de Primo, que fracasó; OJE franquista), realizó una política económica intervencionista y nacionalista, construyó viviendas sociales; pero, al contrario que Primo, Franco fracasó en su intento de golpe de Estado, provocando una guerra civil que duró tres años. Después, impuso una dictadura con represión sangrienta, y no solo evitó enfrentarse, sino que favoreció a la Iglesia, a los grandes propietarios y terratenientes (nada de impuestos directos ni de reforma agraria) y a los militares.
Autor
-
Subdirector de Ñ TV España. Presentador de radio y TV, speaker y guionista.
Ha sido redactor deportivo de El Periódico de Aragón y Canal 44. Ha colaborado en medios como EWTN, Radio María, NSE, y Canal Sant Josep y Agnus Dei Prod. Actor en el documental del Cura de Ars y en otro trabajo contra el marxismo cultural, John Navasco. Tiene vídeos virales como El Master Plan o El Valle no se toca.
Tiene un blog en InfoCatólica y participa en medios como Somatemps, Tradición Viva, Ahora Información, Gloria TV, Español Digital y Radio Reconquista en Dallas, Texas. Colaboró con Javier Cárdenas en su podcast de OKDIARIO.
Últimas entradas
- Actualidad21/11/2024Espectacular encuentro de un joven con la luz de Dios desde las tinieblas del nihilismo más absoluto. Por Javier Navascués
- Actualidad20/11/2024El general Blas Piñar analiza como la transición aceleró la decadencia del Ejército Español. Por Javier Navascués
- Actualidad19/11/2024Teniente coronel Bendala: “Esta democracia lleva al libertinaje, a la corrupción y degeneración aberrante”
- Actualidad18/11/2024Lupe Batallán (influencer provida): “La pornografía goza de impunidad y la gente cree que no es dañina”. Por Javier Navascués
Toma, el «golpe de estado» dice. Empieza mal lo que peor sigue.
Despues de leer esta introduccion :
«Se llevó a cabo una política intervencionista y nacionalista desde el Gobierno que benefició a ciertos sectores de la población y perjudicó a otros. Se consiguió imponer una cierta paz social a costa de falta de libertades y de una represión dura»
No compro este libro ni de broma