Bala de plata y caso Juana Rivas. Por José R. Barrios

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En el argot de las feminazis españolas se conoce como “bala de plata” a un procedimiento expeditivo y delictivo para obtener en un plis plas la guarda y custodia de los hijos, la vivienda familiar, una pensión compensatoria para la denuncianta en cuestión y pensiones de alimentos, una por cada hijo. Basta con acusar al inocente marido de turno de abuso sexual hacia su hijo/a.

Las imágenes de un supuesto abuso sexual al hijo pequeño de Juana Rivas y que el juez Piñar califica de “espeluznantes”, entran de lleno bien en una negligencia de la madre del menor por abandono del pequeño bien en la esfera de una bala de plata más, por ser esta práctica feminazi tan generalizada en la Industria de Género española. Causa perplejidad que fuese una profesora quien desde su profesionalidad llevase al pequeño al médico y no su madre, ante la insistencia de dolores en el ano que una y otra vez reclamaba el párvulo a su maestra, como es un interrogante que Juana Rivas pidiese que no fueran investigados ese agresivo abuso a un hijo tan desvalido e indefenso (www.elmundo, 12/12/2021) ¿No investigar un abuso de tal naturaleza y dimensiones por sentirse ella responsable o porque una vez consumada esa bala de plata que tanto le aconsejaron dio marcha atrás por desconfianza total hacia sus asesoras, altas cargas bien pagás por más señas?

Para la periodista y escritora de éxito Cristina Seguí (@CristinaSegui-), cuyo último libro se titula “La mafia feminista”, en su hilo de Twitter del pasado 11/12/2021, el asunto está claro:

1-Los abusos sexuales al pequeño hijo de Rivas tenían un objetivo: simular un abuso sexual del padre, la bala de plata, y provocar un procedimiento/diligencias que retuviera a los niños en España, puesto que a la madre le avisaron sus asesoras en diciembre que la fiscalía iba a

2-devolvérselos al padre. Para ello, dos asociaciones totalmente vinculadas al PSOE y regadas de subvenciones retrasaron un informe sobre el nuño de tres años durante 6 meses.

Miles de padres sufren la misma estrategia aconsejada por asociaciones feministas

3-con el objetivo de simular abusos y apartarlos del padre y la mitad de su familia para siempre.

Esto jamás podría ocurrir sin la complicidad de la Organización Criminal Feminista, de la cual son una red logística muchos medios de comunicación y periodistas súper feministas.

La certeza de Cristina Seguí enlaza perfectamente con la esencia de este desgraciado caso y con una práctica generalizada en toda España a manos de las organizaciones feminazis vinculadas a los partidos políticos que componen la inestable coalición de gobierno, únicamente sostenida con pagos dinerarios periódicos a vascos y catalanes, siempre ávidos de pasta y regalías estratégicas.

En el caso que aquí nos ocupa y preocupa, estamos frente a una madre desnortada que cae en la red de toda una mafia feminista a pleno rendimiento electoral, un títere manejado por una jauría de lobas que viven en la holganza más descarada e infame, como en el bienestar material más absoluto, todo ello a costa de incitar al delito a mujeres vulnerables inmersas en procesos de separación o divorcio, carne fresca para estas arpías apoltronadas en miles de asociaciones vinculadas a los politiquillos y niñatas que nos desgobiernan, pero que paga religiosamente a dichas incendia hogares.

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Es probable que la tal Juana, sintiéndose estafada y maltratada por sus asesoras, quisiese dar marcha atrás, pero ella llegó tarde, la bala de plata hacia el menor de sus hijos, un parvulito de tres años, ya estaba disparada ¿Por qué, Juana, por qué vienes causando tanto dolor a tus hijos y al padre de tus hijos?

Si yo fuese tu abogado, pobre e inocente Juana, mi línea de defensa sería mostrarte y demostrar que has sido una víctima más de un modelo corrupto de un negocio a nivel del Estado como es el feminismo Made in Spain y sus cadenas televisivas. Así, créeme, con total seguridad tendría ganado tu caso, recuperarías en parte tu dignidad y ganarías algo de honor frente a tus dos destrozados hijos y agotado marido.

Pero para ello, Juana, debes enfrentarte a toda esta basura de feminazis que te han utilizado como un clínex y comenzar a decir nombres, señalar fechas y encuentros, llamadas de teléfono de las de arriba, hasta explicar en detalle el plan que te trazaron, cómo te engañaron y las promesas que te hicieron, una farsa que les ha salido mal y en la que ahora te ves sola, maltratada, abusada, y con la que sólo has conseguido destrozarte a ti, a tu ex marido y a tus dos hijos, quemar tu vida en la hoguera de esas brujas amargadas y sin cura que viven del cuento chino ese del género, del machismo español y del patriarcado que nadie ha visto aún por ningún sitio.

Pero antes de dar ese paso, Juana, cambia de abogado, ese no te vale, y guarda tus pruebas en dos o tres lugares diferentes, acude a un notario para hacer un acta de manifestaciones, protégete antes de dar ese paso sin vuelta atrás, porque esa mafia feminista no se anda por las ramas e irá por derecho a por ti, ¿no ves que se juegan miles de millones de euros y tú eres una más de las decenas de miles de supuestas maltratadas y asesinadas que mueven la rueda de su negocio, el negocio del maltrato en España?

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Habla, Juana, por Dios, habla, y líbranos en parte de este brujerío de peseteras indecentes; habla, Juana, por Dios bendito, para salvarte a ti y a tus hijos, para salvarnos a todos de esta gentuza sin escrúpulos y aún sin nombre, pónselos tú, en tu mano está, uno a uno a cada bruja, cada elementa con su nombre y apellidos.