08/07/2024 22:09
Getting your Trinity Audio player ready...

Copiando el modelo catalán limpian con lejía el lugar adonde estuvo VOX.

Una manifestación de odio con cientos de comunistas, posiblemente vallecanos, se llevó a cabo en el mismo lugar que se había celebrado, un acto electoral de VOX el día anterior, 7 de abril. Los participantes en dicha manifestación, abiertamente de odio y rencor, contemplaron la limpieza de la plaza roja, según llaman ellos, de este barrio, adonde no dejaron celebrar con normalidad el acto de VOX indicado. 

La horda roja intentó reventar el acto ese día, y en buena parte lo consiguió, con un saldo de cerca de cuarenta heridos, la mitad policías. Tras reventar el acto y la intervención policial -muy tarde- los atacantes persiguieron, por las calles, a los asistes de VOX que trataban de irse, y hasta desaparecer del barrio. También fue impedido el acto antes de empezar, lo que produjo la no asistencia de muchas personas que atemorizadas se dieron la vuelta, impedidos de ejercer su Libertad. 

Los limpiadores encontraron los restos, piedras, hierros, tornillos, ladrillos, y toda suerte de objetos lanzados a los participantes del acto de VOX. También las manchas de sangre que derramaron sus cabezas hasta que fueron socorridos. Pero de todo esto no dijeron nada ni lo sacaron en sus vídeos, al no ser propaganda favorable para ellos. Prefirieron seguir diciendo que su tropa fue atacada por VOX. Una vez más cambian a las víctimas por sus verdugos cómo están tan acostumbrados a hacer.

Parece irreal el nivel de odio infundado de esta gente. Y cómo puede haber en España, tanto tibio y confundido ante el mal para no hacerle frente y dejarlo campar a sus anchas. Qué hermoso y ejemplar país tendríamos si no estuvieran todos estos perversos individuos haciendo daño desde que se levantan para desahogar las pesadillas de su conciencia que nos les dejó descansar.  Desde que ejecutaron y escondieron el mayor atentado, el 11M, para tomar el poder de por vida, no descansaron en su arrebatada carrera de destrucción y envenamiento de una sociedad que, tras hacerla pasar por las fases de degradación y corrupción, hoy se encuentra en la fase de descomposición, como meridianamente podemos ver. Tampoco dejó de seguir persiguiéndonos, como hizo tras el acto de VOX, a los que no pensamos igual. Tampoco dejó de fomentar la división y el odio que cada vez más les inunda hasta los ojos. En Vallecas tenemos la última manifestación de odio. Tratando de limpiar de la plaza el odio que ellos sembraron el día anterior.

Este país -para nosotros siempre España- está sembrado de cobardes y mala gente, y permite que los malos, que conforman media España, digan a los demás lo que que tienen que hacer, con el deseo oculto de asesinarles, llegado el momento, eso sí, ni siquiera con limpieza, sino con nocturnidad, alevosía y ensañamiento; torturando, humillando y escupiendo encima, como es su estilo. Véase todo lo que hicieron en la guerra civil que ellos provocaron y que ahora están en trance de reeditar. Véase también el cartel anunciador de esta manifestación de odio, en los comentarios. Todo les sale gratis, y encima les subvencionan. Tras ejercitar todas sus maldades, al final tampoco quedan a gusto. Ni tienen el valor -porque de esto andan muy mal- de colgarse de un árbol cual hizo el avaro de Judas, tras vender a Jesús por treinta monedas. Estos miembros y «miembras» son peores que Judas que tuvo más decencia quitándose de en medio.

LEER MÁS:  Dad al César… Por Isidro García Getino

Confundirse o mezclarse con esta tropa inmunda, es participar en el mal y en su estupidez, una enfermedad social que ciega al mundo y de la que ellos están borrachos. Son lo que entendemos por, mala gente. Y ojo con los entreverados! Los del inexistente término medio. Hay que verlos, a todos , escucharlos y observar su comportamiento, para saber cómo son. Imposible razonar y evitar que no te excluyan de su clan. No se puede perder más tiempo con ellos, excepto para combatirlos y borrarlos del mapa, lo que nos llevará todo el tiempo del mundo, y lo haremos. ¡Se lo merecen!