22/11/2024 07:55
Getting your Trinity Audio player ready...
Voy a volver sobre este tema porque me parece crucial para el futuro de España. Resulta que desde que tenemos este nefasto régimen de las autonomías vamos para atrás como los cangrejos. En tiempos de Franco resulta que teníamos nuestros Avias, Barreiros, Pegasos, Ebros, Derbys , Puchs, Seats y un sin fin de industrias nacionales y privadas. Y el régimen del 78 solo nos ha ofrecido las bodeguiyas de Felipe González y el boom inmobiliario de Aznar. Los demás ni eso siquiera.  Eso sí, según la propaganda del sistema somos los más guays con nuestros divorcios, abortos y eutanasia varias. Hay que analizar de una vez todo esto muy seriamente de una vez y decírselo a la gente. A ver si despiertan.
 
La novena potencia industrial del mundo ha pasado en estos 45 años a convertirse en el chiringuito de Europa.  Trágico el destino de nuestra nación. Ha bastado una pandemia para que todas nuestras vergüenzas se queden al aire. Es el momento pues de que el ciudadano español recapacite y vea que las taifas autonómicas solo sirven para generar gastos con sus lujos asiáticos y que no ofrecen nada positivo a la sociedad. Toda esta ingente cantidad de dinero podría destinarse a cosas mucho más fructíferas como los planes de inversiones estatales y poner a trabajar a quienes están sin ocupación. Es hora de decirlo alto y claro, y de que se entere la gente.
 
El verdadero progresismo es el desarrollo industrial de la nación. Esto nos proporcionaría hogares felices, donde no habría lugar a los maltratos ya que cuando el dinero sale por la puerta, el amor salta por la ventana y aparecen los múltiples problemas familiares. Quiero decir con esto que ojo, feministas, se lucha por la mujer procurando un país desarrollado económicamente hablando, y no regando de dinero vuestras inútiles asociaciones. Es decir, si volviésemos a procurarnos nuestras propias y poderosas industrias, esto haría más por los derechos de la mujer que toda vuestra vacía palabrería. Creo que me estoy explicando bien.
 
Por que vamos a ver. ¿ De qué nos sirve obtener derechos y más derechos si al final no podemos ser verdaderamente libres al carecer de lo más elemental, un puesto de trabajo? Esto es así, y no puede discutirmelo nadie. Las malditas autonomías solo sirven para expoliarnos, sacarnos nuestro sudor, y este cáncer va consumiendo España hasta el punto de hacer desaparecer las clases medias. Vean si no los carteles de los negocios de las calles de nuestros pueblos y ciudades, todos son de SE VENDE y SE ALQUILA, porque nuestros comerciantes están todos en la ruina.¿ Pueden los hogares españoles funcionar y ser felices con este panorama?
 
Es la hora de dejarnos de demagogias y de exigir derechos y más derechos que no tienen aplicación práctica. Solo acabando con esta lacra de las autonomías y volviendo a PRODUCIR podrá volver el verdadero bienestar y la felicidad a nuestros hogares. Obras son amores y lo demás buenas razones. Se tiene que acabar con tanta palabrería vacua y pasar a la acción. Nos va la supervivencia en ello.
 
¿Es que esto que expongo es tan difícil de entender? Yo creo que es bien simple y claro. Hemos llegado a un punto, con seis millones de parados reales en que o acabamos con las autonómicas o estas acaban con nosotros.  Así de simple, así de claro. Por ello hay que dirigirse a los obreros y a las clases medias. Para que espabilen y despierten. Sin un puesto de trabajo fijo todos esos derechos que nos ofrecen nuestros políticos se quedan en Agua de borrajas. La única forma de devolverle el pulso vital a nuestro país es el de destinar el dinero de las autonomías y demás cánceres que sufrimos, como los políticos, las organizaciones subvencionadas, las paguitas a inmigrantes y votantes progres, etc, etc, a la obra pública.  También habría que bajar los impuestos para que los emprendedores tengan en sus bolsillos el dinero necesario para sacar adelante sus proyectos.
 
O se hace esto, o nos vamos al carajo con la música de lo políticamente correcto sonando
 
 de fondo. Esto es lo que hay, este es nuestro destino. Yo me desgañito desde mi sección de el Correo de España para hacérselo comprender a la gente. Pero es como predicar en el desierto. Va a tener que venir una hambruna para que el personal empiece a comprender algo, y por qué estamos en esta situación. 
 
Obra pública…en un mes de Abril seco como este nos acordamos de los pantanos que levantó nuestro caudillo.  Hacen falta más todavía, y transportes y repoblaciones y ayudar a las fuerzas armadas. Una gran tarea nos está esperando.  Dejémonos de cabezonería y de propaganda políticamente correcta. La realidad es la que es y no la que nos gustaría que fuese. Hay que hacer comprender esto. Yo no me cansaré de repetirlo.  Por que llevamos camino de pasar hambre en Gallego, en catalán y en vascuence.
 
Es este un momento decisivo en la historia de España. O quitamos las autonomías o nos vamos a la ruina. No hay más. Solo la reindustrializacion del país nos puede ofrecer una vida digna y libertad. No la verborrea de estos cantamañanas.  Lo repetiré una y mil veces hasta que el personal lo capte. Sin industrias no hay trabajo, y sin trabajo no hay posibilidad de desarrollo personal. Todo lo demás son cantos de sirenas y fuegos artificiales. Así que a la hora de votar miren bien quien está dispuesto a suprimir este tinglado y quien no.
 
Lo que nos hace falta, un Abril seco. Como si no tuviésemos bastantes problemas ya. Solo hace falta una mala cosecha para que la’ruina sea total. Por ello es necesario también un plan hidrológico como nos viene repitiendo San Román. Parte de la obra pública a desarrollar. ¿ Y dónde está ese dinero que hace falta? En los bolsillos de nuestros políticos de las 17 taifas. Es todo un sinsentido abominable. Si tuviésemos un país industrializado como Alemania, a lo mejor nos podríamos permitir estas frivolidades.  Pero no lo tenemos. Vuelvo a repetir que esta es la cruda realidad. 
 
La casta y la nueva casta consumen nuestros dineros en vinos de 1000 euros y jacuzzis. Por no hablar de otras cosas y placeres. Es hora de poner pie en pared, por favor. Medio millón de políticos se dan la gran vida mientras el país se desliza por la decadencia y la hambruna.  Hora es de parar esto. No podemos volver al siglo XIII, cuando los nobles exprimían al pueblo para mantener su alto nivel de vida adquirido en los tiempos de bonanza.
 
Yo ahora voy a deslomarme un poco, no para mi ni para mis herederos, si no para que nuestros políticos sigan viviendo la gran vida. Es una pena pero es la realidad. Esperemos que venga alguien con el suficiente poder de persuasión para convencer al personal de que así no vamos a ningún lado. Y vuelvo a repetir para despedirme por hoy, o las autonomías o nosotros. Es lo que hay y hay que hacerlo ver al personal. Hay que ganar el futuro y esta es la única manera de conseguirlo. Me duele no tener más poder de persuasión ni de convocatoria, pero he dicho las verdades del barquero en este largo artículo.  Pasen un buen día y reflexionen, porfi.

Autor

REDACCIÓN