19/09/2024 09:17
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En esta breve entrevista de bienvenida Javier Barraycoa nos habla sobre su nueva sección y su importancia.

¿Qué supone para usted coordinar la sección de Hispanidad de El Correo de España?

El despertar de la conciencia hispanista que estamos viviendo, es sin lugar a dudas un signo de nuestros tiempos en esta época de crisis de identidad nacional. Todo esfuerzo por alentar y encauzar esta conciencia es todo un reto y un deber. Por ello, me siento ilusionado con todo lo que tenga que ver con descubrir la grandeza de España a través de su obra la Hispanidad.

Aunque está la sección de Historia, la Hispanidad tiene una impronta muy determinada que merece espacio aparte….

La Hispanidad es mucho más que historia, es historia viva y que vivifica. El mundo anglosajón no cejó hasta hacer que se desplomase el grandioso edificio político que representó la Hispanidad. Hoy en día el mundo anglosajón sigue siendo un gran enemigo de la Hispanidad, aunque no el único. El mundo protestante e ilustrado no podía permitirse la Christianitas minor que representó la Hispanidad. Las permanentes crisis políticas y económicas que sufre Hispanoamérica no son casuales. Comunismo y capitalismo radical se han cebado en nuestras Españas de ultramar.

¿Qué entendemos por Hispanidad, cuál es su actualidad y el potencial que tiene?

Hispanidad es la esperanza de aunar lo que la revolución desgarró. La Monarquía hispánica que dominó medio mundo su fundamentó en unos principios y los principios -aunque las estructuras políticas pasen- no mutan. Hispanidad implica un reencuentro con la identidad que nos han obligado a olvidar e incluso despreciar. El globalismo teme una comunidad política de 500 millones de personas que comulguen con esos principios y compartan lengua y cultura. Una Hispanidad organizada sería una de las tres o cuatro grandes potencias mundiales.

¿Por qué es un valor que está cada vez más en alza?

Por lo dicho anteriormente. Desde hace dos siglos España viene sufriendo una crisis de identidad hurgada por los ilustrados y masones españoles. Su referente era Francia o Inglaterra. Esta sugestión orquestada de auto odio, se intensificó desde la transición hasta ahora. Sin embargo, la conciencia colectiva española es más resistente de lo que esperaban. Estamos viviendo un renacimiento de esta conciencia. Los españoles necesitamos referentes que nos orgullezcan y los estamos encontrando en la historia de nuestros tercios, en nuestras gestas, en la Hispanidad. Este momento histórico no lo podemos desperdiciar.

Hay una buena hornada de escritores e historiadores que tratan temas en torno a la Hispanidad y en contra de la leyenda negra. ¿Cómo valora los libros, artículos…y todo lo que se está publicando actualmente?

Evidentemente de forma muy positiva. La historiografía académica española se ha rendido a la corrección política: auto odio, multiculturalismo, indigenismo, y un largo etcétera de «ismos». La desgracia es que el mundo académico aún tiene casi todo el monopolio del relato histórico. Sin embargo, se está demostrando que hay investigadores serios, no necesariamente asentados en las cátedras, que son capaces de ofrecer una revisión historiográfica muy seria. Eso significa que hay un pueblo que despierta.

Además, darán cabida a Unidad Hispanista, que agrupa a un buen número de asociaciones.

Unidad Hispanista es parte de muchos proyectos que de forma independiente y sin conocerse se están organizando en todo el mundo, desde nuestra península hasta Norteamérica, pasando por Filipinas y evidentemente los países hispanoamericanos. Nos hemos encontrado que en una década han aparecido cientos de grupos en todo el mundo reivindicando la Hispanidad y todos ellos, por su cuenta, han tomado la Cruz de San Andrés, la bandera de la monarquía hispánica, como su símbolo. Es muy providencial.

¿Por qué ha querido añadir a la sección artículos de geopolítica?

La Hispanidad no es un sueño, ni una comunidad emocional. Por sí misma, aunque no quiera, es una potencial comunidad política. La propia dimensión del mundo hispano lo convierte en un sujeto geopolítico. No se trata de hacer meramente historia nostálgica o regodearnos en ella para hacer terapia para combatir un complejo de inferioridad. Queramos o no, sin una visión geopolítica y global, no acabaremos de convencernos de nuestro potencial. Por eso, el empeño de muchas potencias por desintegrar España para que no pueda ser referente de otros países hermanos.

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No en vano, usted además de hispanista es sociólogo y es un campo que siempre le ha interesado mucho.

La sociología es una disciplina aplicable para intentar conocer muchas realidades sociales complejas. Necesita de la historia, de las ciencias políticas y otras muchas disciplinas. Es todo un reto poder interpretar la realidad política para incidir en su desarrollo que implique recuperar la dignidad de la humanidad que estamos perdiendo a pasos agigantados por culpa de la globalización.

Autor

Javier Navascués
Javier Navascués
Subdirector de Ñ TV España. Presentador de radio y TV, speaker y guionista.

Ha sido redactor deportivo de El Periódico de Aragón y Canal 44. Ha colaborado en medios como EWTN, Radio María, NSE, y Canal Sant Josep y Agnus Dei Prod. Actor en el documental del Cura de Ars y en otro trabajo contra el marxismo cultural, John Navasco. Tiene vídeos virales como El Master Plan o El Valle no se toca.

Tiene un blog en InfoCatólica y participa en medios como Somatemps, Tradición Viva, Ahora Información, Gloria TV, Español Digital y Radio Reconquista en Dallas, Texas. Colaboró con Javier Cárdenas en su podcast de OKDIARIO.
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