La naturaleza de esta Guerra en el corazón de Europa es metafísica y religiosa. Por Daniel Ponce Alegre

Escasas semanas después de dar inicio a la llamada »Operación Militar Especial para la desmilitarización y desnazificación» del territorio de Ucrania por parte de Rusia (una justa acción motivada tras 8 años de bombardeos por las FAS ucranianas y de terrorismo por las bandas neonazis contra la población rusófila y rusohablante del Dombass; tras constantes violaciones de los Acuerdos de Misnk y otros, y por la potencial amenaza nuclear y bioterrorista por parte del Gobierno Zelenski junto a sus aliados OTAN e Israel) el Patriarca de Moscú y de Todas las Rusias, Kirill II, dijo:

»La naturaleza de esta Guerra es santa y santa nuestra motivación. Justa es la defensa del Pueblo de Rusia contra los ataques de la Ideología de Género, del homosexualismo y del llamado Nuevo Orden Mundial opuesto a Dios».

Poco después, con una perspectiva algo diferente y un enfoque menos confesional, pero metafísico y tradicional, el filósofo naturalista y antropólogo, experto en pueblos euroasiáticos, dijo:

»Lo que está en juego en esta Guerra es la propia naturaleza humana, nuestra naturaleza  como seres trascendentes y metafísicos, y como entes espirituales encarnados en una familia formada por varón y mujer, en un pueblo con organización y tradiciones propias, y en un ecosistema especial. 

Esto es lo que pretende alterar ontológicamete, con fines mercantilistas y de poder, la élite cabalista y talmúdica del Nuevo Orden Mundial».

Pasado un tiempo, hace escasos días, el Presidente de la República Rusa de Chechenia, Ranzam Kadirov, junto a la Asamblea de Ancianos y sus Fuerzas Especiales, dijo a los medios de comunicación, pero en especial a »sus hermanos musulmanes» fueran de tradición suní, chií o sufí, como es el caso de la mayoría de los chechenos:

»En esta Guerra Santa, en esta Guerra Justa contra el satán de la OTAN (madre de todos los terroristas junto a Israel) todos han de saber que Rusia es Nuestra Madre y que los cristianos ortodoxos y orientales son todos nuestros hermanos, en el Mahdi Isa y en Mariam, Su Madre… A Alá pongo de Testigo y a todos vosotros mis hermanos».

Si esto fuera poco, y si aún hubieran dudas de cómo desde Rusia y desde la Ortodoxia se ve esta Guerra, escuchemos las palabras de consejo y dirección espiritual, a los militares rusos y al Pueblo de Rusia en general, del Hieromonje y Archimandrita Elijah, aquel al que el Patriarca Kirill y muchos otros con responsabilidades de Gobierno acuden a por discernimiento: 

»Recordad que, el que vive impíamente no viene a la luz sino que se mueve en la perfidia y el engaño. 

A él acuden los que aman este mundo alejado de Dios y sus obras, los que en todo guardan y hacen su voluntad, los egoístas y usureros.

Esta es la razón principal de la incredulidad y de porqué este mundo vive en la Muerte y la Mentira. Teniendo en cuenta la extrema prevalencia de estos vicios, mis hermanos, tenemos que admitir que el mayor milagro que nos puede suceder es la adquisición de la Verdadera Fe. 

No es un milagro de curación de las enfermedades del cuerpo sino la Resurrección del cuerpo y del alma, de todo nuestro ser desde los muertos. Ya, entonces, estamos Vivos Verdaderamente. 

Es el Don, de Dios mismo, al hombre. 

Los que guardan la Fe Verdadera en la Resurrección, reviven con sus cuerpos y ganan la incorrupción, la luz y la inmortalidad. 

La inmortalidad está en la Fe y los que apostatan o reniegan de Dios, como nuestros enemigos por acción u omisión, están tratando de reemplazar este Principio Vital:

La Fe y las Obras de Fe en Dios son la Vida Eterna y no nuevos mundos sino el Reino de Dios Venidero.

¡ Señor Jesús, conserva en nosotros la Fe y la devoción a Ti como sumo Bien. Qué construyamos nuestra vida en la Fe y en el Amor a Ti y a los hombres a los que tanto Amas !

Esperamos desde El Correo de España, y yo mismo, haber dado luz sobre la naturaleza de esta Guerra.