Sánchez carboniza a Marlaska, rompiendo el contrato con Israel, para salvar la coalición. Por Luis Losada Pescador

El trilero plan de Defensa presentado por Sánchez contó con ‘observaciones’ de Sumar. Es decir, ni siquiera contó con el consenso del propio gabinete. Pero pelillos a la mar. Sumar no rompe, Sánchez no hace sangre y aquí paz y después, gloria.

El problema es que Sumar no es homogéneo; en realidad no existe, es Yolandísima y nada más. Así que los egos afloran. E Izquierda Unida decidió hacer sangre con el contrato de 15 millones de balas para la Guardia Civil a Israel. Rompía el compromiso del gobierno de no contratar con Israel desde el 7 de octubre de 2023. Pero Interior aclara: no existen balas alternativas para las pistolas de la Guardia Civil. Además, ya está firmado. No es posible la marcha atrás.

Izquierda Unida amenaza con salir del gobierno y romper la coalición y Sánchez opta por no romper la cuerda y carbonizar al ‘Pequeño’ Marlaska a cambio de salvar la ‘estabilidad’ del gobierno. Izquierda Unida, satisfecha con la victoria. La fashionaria, tratando de colocarse la medalla. ¿Cuál medalla?, ¿pagar 6,5 millones de euros por unas balas que renunciamos a recibir en concepto de indemnización?, ¿es así como castigamos a nuestros supuestos enemigos? Me apunto.

Además del coste monetario está el reputacional. El ridículo internacional es máximo. Como dice Israel, sacrificamos la seguridad por razones políticas. O peor: partidarias.

Y para colmo, es pura hipocresía. Porque estos 6,5 millones de euros no son sino un detalle comparado con los 40 contratos celebrados con Israel desde octubre de 2023 por valor de 1041 millones de euros según el Centre Delàs. Y de estos 40, 20 fueron formalizados después de octubre de 2024 cuando se solemnizó el compromiso de suspender las compras a Israel. La principales adjudicatarias: Elbit Systems, Rafael Advanced Defense Systems, y sus filiales (IMI Systems, PAP Tecnos) y Netline Communications Technologies ¿Quemará Moncloa Izquierda Unida o lo de las balas de la Guardia Civil era sólo una ‘performance’?

Y más. La OTAN ya ha corregido las cifras de inversión en Defensa que maneja el gobierno. No estamos invirtiendo un 1,4% del PIB sino un 1,24%. Es la tarjeta anaranjada tras la tarjeta amarilla de Rutte cuando dijo que España se había comprometido a alcanzar el 2% antes del verano. La roja quizás llegue cuando concluyan que el plan de Defensa del ‘cambiacolchones’ es un puro ejercicio de trilerismo contable: 4.500 millones de créditos que no computan en contabilidad OTAN, inversiones de UME más propias de bomberos o protección civil que tampoco computan y partidas presentadas por duplicado. No cuela. Y ya no es solo que no cumplamos, es que pretendemos engañar y además no tenemos ninguna posibilidad de cumplir porque ni hay gobierno para aprobar nada ni mayoría parlamentaria que avale plan alguno. Tic tac.

El anzuelo del pescador

• El Supremo ya cuenta con los WhatsApps y los emails que García Ortiz había borrado. Vayan comprando palomitas

• El gobierno ‘aceita’ a la prensa escrita con 65 millones de euros para librarla de la esclavitud del click. ‘Compra’ un poco de paz mediática, pero la situación actual no hay quien la tape.

• La recaudación de Hacienda es un 52% superior que antes de la pandemia. La no deflactación de la tarifa ha hecho que la fiscalidad haya subido sustancialmente.