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La Casa de Saboya es una dinastía que posee una milenaria vinculación con la Iglesia. Es asimismo la casa real que le infligió una de las heridas más dolorosas que haya recibido. En 1855, el rey Victor Manuel II de Saboya, durante el proceso unificador del Reino italiano estuvo a punto de aprobar la ley Rattazzi que iba a desposeer a 5400 religiosos de sus bienes y derechos. La toma de Roma (20 de septiembre de 1870) marcó la derrota de los Estados Pontificios bajo Pio IX. Además, entre 1870 y 1873 reinó en España Amadeo de Saboya (hijo de Víctor Manuel II) pero el nuevo monarca nunca logró ganarse la confianza ni del pueblo ni de los poderes del Estado y finalmente abdicó.
El Condado de Saboya fue un estado integrante del Sacro Imperio Romano Germánico que existió entre 1003 y 1416, momento en el que su título nobiliario fue ascendido a Ducado por el emperador Segismundo (creador de la Orden del dragón en 1408 mediante Abramelin el Mago de la secta más antigua de Egipto).
En 1147 Amadeo III de Saboya “El cruzado” acompañó a su sobrino Luis VII de Francia y a su esposa Leonor de Aquitania en la Segunda Cruzada. En su expedición se alistaron numerosos barones de Saboya.
Hay que recalcar que Mafalda de Saboya fue la primera reina consorte de Portugal casada con el primer rey de Portugal Alfonso I (1146) y que en este país, el rey Dioniso I asignó en 1319 las propiedades portuguesas de los templarios a la recién fundada Orden de Cristo (continuación de la Orden del Temple). La Orden de Cristo mantenía una fuerte vinculación con la corona portuguesa que se arrojó desde el principio el derecho a nombrar el Gran Maestre y recibió hasta la aprobación pontificia por parte del papa Juan XXII.
Tras una victoria sobre los musulmanes, Alfonso I concedió al capitán de su comitiva (Gonçalo) el privilegio de tomar por esposa a la más hermosa de las prisioneras moras. La elegida fue la joven Fátima, que por Mafalda se convirtió al catolicismo y se bautizó como Oureana, si bien falleció poco después de la boda. Gonçalo decidió retirarse en el monasterio cisterciense de Alcobaça y mandó trasladar el cuerpo de su mujer a una localidad vecina que tomó el nombre de Fátima. La reina Mafalda mandó construir una capilla en Fátima y pidió ser sepultada allí, a donde llegó en peregrinación (2 siglos después) el príncipe Felipe II de Saboya-Acaya. Una hija de Felipe II (Sor Filippina) fue monja en el convento dominico de Santa María Magdalena de Alba, fundado por la beata Margarita de Saboya. Sor Filippina murió en octubre de 1454 después de recibir “revelaciones” donde vio un pueblo llamado Fátima, una estatua de la Virgen que profetizó acontecimientos futuros muy graves y a Satanás que iba a desatar una terrible guerra.
Fue en Portugal donde se exiliaron en 1849 el primer artífice de la Revolución Italiana: el rey Carlos Alberto de Saboya así como el último soberano de la Casa de Saboya, Humberto II. El 18 de junio de 1946 se proclamó oficialmente la República en Italia y Humberto II tuvo que abandonar el país después de reinar 33 días aunque en ningún momento renunció a sus derechos que continuó ejerciendo desde el exilio. Al parecer, su partida se debió a una petición de Pío XII que lo recibió en secreto, pidiéndole que abandonara Italia a fin de evitar una masacre. La familia noble Pacelli siempre estuvo unida a la familia de los Saboya, lo que explicaría la visión del “milagro de sol” (octubre de 1950) que tuvo Eugenio Pacelli en los jardines del Vaticano. Además, Pio XII fue enterrado el 13 de octubre de 1958, aniversario del “milagro del sol” mientras que Juan Pablo II fue tiroteado el 13 de mayo de 1981, día de la primera aparición de Fátima. Los Pacelli siguen siendo vinculados hoy día (Giorgia Pacelli y su amigo el Saboya-Genovese Carlo Massimo). La princesa Giorgia es dueña de la mafia georgiana y el Príncipe Ascanio Pacelli es comandante nazi-fascista romano, copropietario de la mafia georgiano-rusa. ¿Quién se sorprenderá?
En cuanto al duque Manuel Filiberto de Saboya, perteneció a la Orden de la Jarretera y sirvió militarmente a Carlos V que le hizo caballero de la Toison de Oro. Participó en la matanza de San Bartolomé en 1572. Fue enterrado en la Catedral de Turín, a la que había trasladado la Sábana Santa en 1578. El sudario había sido comprado por los Templarios hasta la disolución de la Orden en 1314. Estuvo custodiado por los Saboya desde 1453 en Chambery tras la caída de Constantinopla cristiana en manos de los turcos hasta marzo de 1983, después del fallecimiento de Humberto II. La última voluntad del rey fue que la Sábana Santa se donará al Vaticano. Juan Pablo XII decidió que la Síndone permaneciera en la catedral de Turín.
En el siglo XIII, la ciudad de Turín pasó a pertenecer a la Casa de Saboya y en el XIX, se estableció como capital del reino durante el periodo de la unificación de Italia (1861) bajo la monarquía de los Saboya. La historia alternativa dice que fue fundada por Phaetón: faraón egipcio (descendiente de la diosa Isis) quien se encargó de erigir el templo dedicado al dios Apis (representado por un toro). Se toleraron allí expresiones ocultistas puesto que podían servir a los propósitos nacionalistas y reducir al mínimo los Estados Pontificios. Turín es un vértice de dos triángulos mágicos: uno que responde a magia blanca y otro a la magia negra (eje Turín-Londres-San Francisco). En el punto más oscuro del eje en la Piazza Statuto, se encuentra desde 1979 el monumento al Traforo del Frejus: pirámide de piedras en cuya cima se halla una estatua de Lucifer. Esta plaza se levantó sobre una antigua necrópolis romana y durante mucho tiempo fue lugar de ejecuciones capitales (en el siglo XIX se encontraba allí una guillotina). En cuanto al Portón del Diablo en el Palacio construido en 1675 por orden de Trucchi di Levaldigi (encargado de las finanzas de Carlo Emanuele II de Saboya), lleva una cabeza de diablo con 2 serpientes. Se dice que en este sitio se fabricaron barajas del Tarot. En la baraja, el arcano número 15 es el del Diablo, y justo 15 años después de la construcción del edificio, se instaló esta puerta. Además, la fuente del Tritón está ubicada muy cerca de la Catedral de San Juan Bautista donde se encuentra la Sábana Santa. De igual forma, el centro de la ciudad cuenta con galerías subterráneas (grutas alquímicas) a las que se atribuye la realización de ritos. En los sótanos de una de las residencias de los Saboya: el Palazzo Madama, se encontraron laboratorios alquímicos. De hecho, el Conde (ocultista-alquimista) de Saint Germain fue hijo ilegítimo de una princesa de Saboya.
Actualmente, el príncipe Vittorio Emanuele IV de Saboya (hijo de Humberto II) tiene vínculos con la mafia genovesa, además de haber pertenecido a la mafia de la Magliana y a la Propaganda Due cuando los escándalos del Banco Ambrosiano llevaron a la desaparición de los tres niños (secuestrados por la Magliana): Mirella Gregori, Emmanuela Orlandi y José Garramón entre mayo y diciembre de 1983. Tres niños que se parecen extrañamente a los videntes de las apariciones de Fátima: Lucia, Jacinta y Francisco. Este uso de simbología extrema fue seguramente aprobado por Monseñor Hnilica, fanático difusor del mensaje de Fátima y canalizador del dinero enviado al Sindicato polaco Solidarnosc. El príncipe Vittorio se libró y se sigue librando de todos los cargos e investigaciones en su contra, incluido el asesinato del hijo del Dr Hamer, médico alemán que propuso una medicina alternativa para curar el cáncer.
La familia Saboya es una de las principales autoridades en Suiza: Génova en italiano es la misma palabra que Ginebra en suizo. De hecho, el escudo de armas de Saboya y la bandera de Suiza son idénticos. María Gabriela de Saboya, hermana de Vittorio, es una autoridad de alto nivel en Ginebra (ONU, OMC, OMS). El ex alcalde de Nueva York, Rudy Giuliani fue nombrado caballero de la Orden de los Santos Mauricio y Lázaro creada por la Casa de Saboya en 1572. Esta familia puso a Benito Mussolini en el poder y el dictador estableció el Vaticano como una nación soberana a través del Tratado de Letrán de 1929. El Rey Victor Manuel III fue el encargado de encomendar a Mussolini la tarea de firmar las Leyes Raciales Fascistas. En cuanto a Savoy Capital, es una banca de inversión de capital de riesgo en Estados Unidos que hace pagos criminales disfrazados de préstamos a agentes de las familias reales. El príncipe Vittorio se ha infiltrado en Wall Street y extorsiona a los hombres de negocios americanos mediante sus socios comerciales británicos y alemanes (Deutsche Borse). Emanuele Filiberto de Saboya, casado con la actriz francesa Clotilde Courau, es Príncipe de Venecia y propietario de la mafia veneciana. Dennis Savoie es pariente del linaje Saboya así como embajador de Canadá ante la Santa Sede. Fue jefe de los Caballeros de Colón que suelen infiltrarse en la policía, la política y proteger la mafia italiana para el Vaticano. En cuanto al banquero JP Morgan, fue nombrado caballero de la Orden de San Lázaro y Steve Burke (Director de JP Morgan Chase) es un banquero católico de los Saboya. Respecto al príncipe masón Aimone de Saboya-Aosta que trabajó para este banco en el Reino Unido, es propietario de la mafia de Apulia “Sacra Corona Unita” además de supervisar la mafia rusa.
Sancta Crux sit mihi lux, et diabolus non sit mihi dux. Recede satana. Vanitatis non suggeris mihi.
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