|
Getting your Trinity Audio player ready...
|
En el 2014, “misteriosamente” desapareció en el Océano Indico, el Malaysia MH370.
El vuelo MH370 de Malaysia Airlines despegó el 8 de marzo de 2014 desde el Aeropuerto Internacional de Kuala Lumpur en Malasia con destino al Aeropuerto Internacional de Pekín en China. Sin embargo, aproximadamente 40 minutos después de despegar, la aeronave desapareció de los radares y nunca llegó a su destino.
El último punto donde se detectó el vuelo MH370 en los radares primarios fue aproximadamente a 120 millas náuticas (220 kilómetros) al noroeste de la isla de Penang virando hacia el océano indico. Esto ocurrió aproximadamente a las 2:22 a.m. hora local.
Curiosa la hora.
Las autoridades y sus plebeyos, los medios de confusión, -como de costumbre- nos contaron camelos varios para “marear la perdiz” y que nadie se enterara de nada. Yo estudié aviación en California y me saqué el título de piloto comercial – el siguiente ya era el ATP – , por lo que algo de aviación sé.
Los aviones – todos – y sobre todo los de línea, llevan balizas de posicionamiento, o sea, “transpondedores”.
Al menos dos transpondedores. Estos se denominan transpondedores de modo A/C y transpondedores de modo S.
El Transpondedor de modo A/C, es el más antiguo y se utiliza principalmente para la identificación de la aeronave. Proporciona información básica como el código de identificación del vuelo (MH370) asignado por el control de tráfico aéreo y el nivel de vuelo (FL350 ; Flight Level, 35,000 ft. de altura).
El transpondedor de modo S es una versión más avanzada y sofisticada que también es capaz de recibir y transmitir datos adicionales. Estos datos pueden incluir información de velocidad, altitud, posición GPS, identificación única de la aeronave y mensajes de tráfico y vigilancia ADS-B (Automatic Dependent Surveillance-Broadcast).
Cuando una aeronave se encuentra en una situación de peligro o emergencia, se selecciona un código especial en el transpondedor para indicar esta condición. Este código es conocido como código transponder 7700.
El 7700 se emplea en casos como una avería crítica, una situación de amenaza a la seguridad, problemas médicos a bordo, condiciones meteorológicas extremas o cualquier otra emergencia que requiera atención inmediata.
En caso de secuestro de la aeronave, el código “transponder“utilizado para comunicar la situación a las autoridades y controladores de tráfico aéreo es el código 7500.
Cierto es que se pueden desconectar desde la cabina, pero es extremadamente sospechoso que alguien que quiera estrellar un avión, desconecte los transpondedores porque ¿para qué?
La versión oficial nos cuenta que se encontraron algunos restos en las costas del oeste de Australia algún tiempo después.
¿Fue entonces un secuestro?
Los pilotos -por regulaciones internacionales- van encerrados en la cabina y si una azafata quiere entrar, tiene que llamar a la puerta. Los pilotos miran a través de la cámara y si ven algo raro, no abren. Y lo que seguro que harían, es poner el código 7500 si es que hubiera un intento de secuestro donde ,por ejemplo, amenazaran a la azafata con un cuchillo.
¿Entonces nos tendríamos que creer que un pirado secuestró el avión en Malasia que volaba en dirección nordeste – hacia China – para luego estrellarlo cerca de Australia, pero virando hacia el Océano Indico que está en dirección opuesta, no?
En ningún momento esto sucedió.
La prensa oficialista intentó culpar veladamente al comandante, Zaharie Ahmad Shan, tratando de colar que el solito secuestro el avión y lo escondió en algún lugar o que se lo llevo cerca de Australia antes de estrellarlo.
Porque le apetecía dar un paseo hasta ahí antes de entrar en barrena y llevarse por delante a todos los chinos (casi todos lo eran) que volaban en el aparato. Y se quedaron tan pimpantes los “perrodistas” aquellos.
Para más misterio, además de los transpondedores, existe una baliza de seguridad específica que se utiliza en caso de una avería o emergencia en un avión. Esta baliza se conoce como ELT (Emergency Locator Transmitter), que traducido al español sería «Transmisor Localizador de Emergencia».
El ELT es un dispositivo autónomo que se activa automáticamente o manualmente en caso de una situación de emergencia, como un aterrizaje forzoso o una situación de peligro inminente. El propósito del ELT es enviar una señal de radiofrecuencia o una señal de satélite para ayudar en la localización y el rescate de la aeronave. Cuando el ELT se activa, envía una señal de socorro que puede ser detectada por los servicios de búsqueda y rescate, así como por otros aviones equipados con sistemas de vigilancia de emergencia. Esto ayuda a las autoridades y equipos de rescate a determinar la ubicación aproximada de la aeronave y emprender acciones para su localización y asistencia. Es importante destacar que los aviones están equipados con ELTs de acuerdo con las regulaciones de aviación civil, y estos dispositivos deben cumplir con los estándares y requisitos de funcionamiento establecidos para garantizar su efectividad en situaciones de emergencia.
Pero, no. No se conectó. Obama tampoco abrió la boca hasta dos semanas después de la supuesta desaparición.
Lo que si se conoce, es que Boeing invento un sistema ya en el 2006 para tener la capacidad de operar sus aviones a distancia. Además del sistema, obtuvo la licencia pertinente para poder tomar el control de cualquier aparato de manera remota, según ellos, en caso de “hijack” (secuestro).
Lo que también se conoce, es que el avión dio un giro a la altura de Penang y puso rumbo Oeste, suroeste. Hacia el sur de la península india.
Al suroeste de la península Malaya no hay prácticamente nada, tan solo el océano hasta llegar a África. A no ser por una base militar perteneciente al Reino Unido y a EEUU en un atolón de 14 kilómetros totalmente militarizado llamado Diego Garcia. Su base principal tiene por evocador nombre: Cueva del trueno (Camp Thunder Cove).
En Diego Garcia tan solo existen militares, ya que a los lugareños los expulsaron a todos. Unos 4000 uniformados cuidan de la importante y estratégica base aérea y algunas instalaciones subterráneas secretas de investigación. El punto terrestre más cercano se encuentra a 1800 kilómetros, por lo que se puede considerar la base más aislada – y segura – del planeta.
El ex premier de Malasia, Mahatir Mohamad que gobernó el país por 22 años y a la postre tenía 88 años, insinuó que la CIA estaba detrás y que el aparato había sido secuestrado de forma remota.
Cuatro días después de volatilizarse, apareció una extraña fotografía tomada desde dicha base, por el teléfono (Iphone 5 que muestra las coordenadas ) de un operador de la IBM llamado Philip Wood, que coincidentemente era un pasajero de aquel fatídico «777».
Lo que tampoco ningún medio de desinformación masiva comento es quienes iban en aquel aparato que se esfumó por arte de birlibirloque.
La compañía Freescale Semiconductors tenía a 4 de los 5 propietarios de unas importantísimas patentes sobre semiconductores líquidos en aquel vuelo que precisamente se dirigía hacia China.
Tras desaparecer enigmáticamente los 4 socios de aquella multibillonaria patente, la posesión de dicha patente paso al único socio que no desapareció con aquel avión. Este no era otro que Mr. Burns, Jacob Rothschild.
¿Semiconductores líquidos? me pregunto para qué se podrían utilizar y si tendrá algo que ver con el famoso grafeno…
¿Y para qué se dirigían a China? Otro misterio.
Cuatro meses después fue derribado el MH17 mientras surcaba los cielos del este de Ukrania en dirección a Australia.
¿Ukrania? Sí, Ukrania, y coincidentemente también pertenecía a la misma compañía aérea, Malaysian Airlines.
¡Dos en cuatro meses, vaya mala suerte!
No se comentó en casi ningún medio – qué raro- que entre aquellos 283 pasajeros y 15 de “Crew” asesinados, también volaba el neerlandés Dr. Joeb Lange.
El Dr. Lange era un mundialmente renombrado especialista en la investigación sobre el SIDA (HIV) y había denunciado que dicha enfermedad era manufacturada (creada en laboratorio) y que ciertos elementos de la administración norteamericana eran los causantes directos.
El Dr. Lange se dirigía precisamente hacia Melbourne para atender a la veinteava Conferencia internacional sobre el SIDA.
Poco tiempo después, el presidente de la sociedad internacional del SIDA (International AIDS Society), Dr. Lange, debía presentarse para declarar contra Faucci (si, Antoñito el que secuestró America con mordaza y todo) a quien ya lo había denunciado públicamente por genocida.
Obviamente no llego a hacerlo, cosa que debió dejar a Faucci (Director del Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas 1984-2022 ) y a su panda, mucho más tranquilos…
Una novia taiwanesa que yo tenía, aunque hablaba muy bien español, solía confundir la palabra misterio con ministerio.
Quizás Valentina – así se llamaba la bella manceba – no fuera tan desencaminada…
Autor
Últimas entradas
Actualidad26/12/2023Reinventando la historia. Magnicidio frustrado. Por Fernando Infante
Destacados15/08/2023Lepanto. ¿Salvó España a Europa? Por Laus Hispaniae
Actualidad15/08/2023Entrevista a Lourdes Cabezón López, Presidente del Círculo Cultural Hispanista de Madrid
Actualidad15/08/2023Grande Marlaska condecora a exdirectora de la Guardia Civil
Interesante!
Sí, como ya se ha dicho, muy interesante. Pero la conferencia de marras era la «vigésima» pues un «veinteavo» es el número racional resultado de dividir 1 entre 20. Y yo estoy segura de que ustedes lo han sabido alguna vez. Les ruego lo recuerden, POR FAVOR…