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La Tradición Cultural, Política y Judicial Grecorromana, de la que somos »herederos» las naciones y pueblos de todo Occidente, y buena parte de Oriente, tiene un elevado sentido del honor, de la excelencia al servicio público y de la Justicia.

La Lex Romana, a pesar de sus rigorismos y falta de caridad en ocasiones, perfeccionó mucho las formas orientales, en concreto las de origen persa y heleno.

Esta visión política y judicial, bien asentada en el Imperio Romano durante siglos, se vio perfeccionada por la influencia del Cristianismo, especialmente el Catolicismo, del que somos »hijos espirituales y religiosos» todos nosotros, se crea más o menos.

A la Justicia de la Lex Romana se unió la Justicia de la Ley de Cristo, Su Palabra, y del Magisterio de la Iglesia, la Tradición Apostólica, y fueron calando suavemente en la Administración Pública Romana consolidándose en el 325 d.C, cuando se reconoció como Religión del Imperio Romano a la Católica, y a la Iglesia como administradora y moderadora de Justicia por medio de sus obispos y pastores, siendo los monjes fuente de santidad y justicia.

Durante más de 15 siglos este sublime, santo y divino sentido de la Justicia formó nuestra política nacional y nuestro sentido personal de de lo que es Bueno y Justo para la administración política y nacional de los pueblos.
En los últimos tres siglos, pérfidas influencias venidas de organizaciones cabalísticas, talmúdicas, masónicas y gnósticas o »New Age» pervirtieron la acción política y publica justa y buena.
Los responsables políticos fueron chacales, más que buenos pastores, y se dedicaron al plan llamado Nuevo Orden.

La Tradición Política o Judicial Católica y Romana quedó resumida en la sentencia latina: »Tirannum occidere non modo licitum est, sed aequum et iustum».

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Es decir: Buscar la deposición o cese del tirano e injusto servidor público no sólo es lícito sino que es Causa Justa y Necesaria.

Este es el motivo por el que la Campaña que ha iniciado la Organización Unión Activa Valencia, para el ámbito de las tres provincias valencianas y buena parte del Levante Hispánico, junto con la Manifestación del próximo 15E en Valencia, no sólo es buena sino que es Causa Justa, pues los servidores públicos mencionados (Ximo Puig, Pte de la Comunidad Valenciana, y Pilar de la Oliva, Pta del TSJCV) están en su puesto contra el Pueblo Valenciano al servicio de la Élite Financiera y Usurera, y están legislando contra la Ley de Dios, que es la que realmente nos hace libres e iguales como hijos de Dios (somos hijos por ser cristianos y criaturas por ser fruto de sus manos).

El que esta Campaña comience este viernes después de La Epifanía de Reyes, y en el periodo navideño, la hace especialmente Santa y a los que la promovemos nos hace responsables ante Dios y debemos ser conscientes.

Él nos encomienda la limpieza y la justicia de los que suponen una verdadera pandemia y virus para la sociedad y para nuestra Nación, Hispania, Católica y Tierra de María.

Este es el motivo por el que este Digital Patriota, El Correo de España, y todos nosotros, apoyamos esta Causa Justa contra estos traidores al pueblo valenciano y a su Tradición, con la Ayuda de Dios y de Nuestra Señora de Guadalupe e Inmaculada… ¡¡¡ Viva Cristo Rey Siempre !!!

Autor

Daniel Ponce Alegre
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