21/11/2024 19:38
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Voy a hablar un poco de la decadencia de España y lo que creo que se nos viene encima. Vemos las personas con un mínimo de sensatez que España va de mal en peor. La falta de pulso vital del país es pavorosa. Nos habíamos convertido en la tasca de Europa y ahora por culpa de la pandemia ni eso ya. Y…¿a que se dedican ante esto nuestros políticos?
El PSOE vemos que se dedica a repartir entre sus votantes paguitas y subvenciones.
Podemos a alterar el orden de las calles y a traernos debates decadentes sobre la cultura de la muerte.
Ciudadanos anda enfrascado en su búsqueda de identidad.
El PP anda en dar un giro hacia la socialdemocracia en busca de un electorado que nunca le va a votar.
VOX anda a ocupado en ser un PP II, dividir a la derecha y en renunciar a los símbolos más sagrados.
Todos los demás están en la tarea de romper España y de llevarnos a la ruina.
Y vemos ante nuestros ojos el espectáculo del crepúsculo de estos diosecillos que se creen por encima de los demás.
Nadie propone un plan serio para salvar a nuestro país de la ruina, más preocupados en andar a la búsqueda del centro perdido.
Creo sinceramente que vendrá una hambruna sobre nuestro desgraciado país y después una dictadura de patriotas.
Porque la partitocracia y su régimen del 78 andan exhalando sus últimas boqueadas.
Así que aunque seamos pocos como los de Don Pelayo en Covadonga no debemos desfallecer ni perder la fe. Se acerca el momento en que el pueblo español despertará y se acordará de que nosotros estamos ahí.
En los últimos artículos de mis compañeros veo desánimo y desfallecimiento.  No nos dejemos llevar por ellos. Se acerca nuestra oportunidad de arreglar España. Debemos unirnos de una vez en un Frente Nacional y arrebatarle el poder a las hordas marxistas.
Ya saldrá alguna personalidad excepcional por algún lado que nos lidere. 
Y habrá que presentar un plan de reconstrucción nacional. Que ponga en marcha inmensas obras públicas y que ofrezca a los emprendedores la oportunidad de sacar adelante sus empresas.
Pero ante todo debemos volver los ojos al Señor y abandonar el camino hedonista y superficial que hemos tomado.
Polonia y Hungría lo han hecho así y ya ven los frutos de sus esfuerzos.
Estoy escribiendo desde la sala de espera de un Hospital pues tengo un familiar enfermo. Pero a pesar de las malas circunstancias soy optimista en cuanto nuestro futuro devenir patrio.
Pues la Primavera brillará liderada por nosotros, aunque ahora seamos los últimos de Filipinas. 
Por que los dioses de la «democracia» asisten a su desaparición crepuscular, aunque no se den cuenta de ello. 
Enfrascados en sus dudas y titubeos no se dan cuenta de que los españoles están despertando de su largo letargo.
Y llega nuestra hora, pálido el amanecer de momento pero que irá soleándose según avance el tiempo.
Así que compañeros, por favor, no os rindáis justo ahora en que nuevas esperanzas se otean en el horizonte.
Llega nuestra mañana brillante, así que ánimos y permanezcamos inasequibles al desaliento con la mirada puesta en el porvenir.
En Europa ya van conociendo a toda esta calaña que se creen inmortales y no se opondrán a nuestra tarea de regeneración. Por España y por la civilización cristiana os ruego que no vea más el desánimo en vuestros artículos y comentarios, compañeros y camaradas. 

Autor

REDACCIÓN