La Paz. Por Alejandro Descalzo

El 18 de julio de 1964 y en el ámbito del Seguro obligatorio de enfermedad, se inauguró El Hospital Universitario La Paz. Administrado por el Servicio Madrileño de Salud y dependiente de La Consejería de Sanidad, desde un primer momento se puso a la vanguardia técnica de avances médicos tanto a nivel nacional como internacional. En los años 60, La Paz, nombre que hace referencia a los primeros 25 Años de Paz y grandeza de esta España, era modelo y referente de avances técnicos médicos internacionalmente como de carácter nacional. Las obras, dada la envergadura del proyecto, se fue escalonando. Así, el primer edificio que se inauguró aquel 18 de julio ya mencionado fue la Residencia General. Imponente edificio de 14 plantas y 30.000 m².

Al año siguiente se inauguró el Hospital Maternal y el Infantil dentro de un proyecto de integración de camas nido en las propias habitaciones de las madres, haciendo que estas tuvieran control sobre los pequeños. Esta innovación técnica fue muy valorada dentro y fuera de nuestras fronteras. En 1966 abre las puertas El Hospital de Traumatología y Rehabilitación que cuenta con 300 camas y un centro de quemados referente a nivel internacional.

Entre 1964 a 1972, el hospital La Paz fue el hospital de urgencias quirúrgicas de referencia casi exclusiva en la capital. En 1970 se convirtió en Hospital Clínico de la Universidad Autónoma, cuya Facultad de Medicina había entrado en funcionamiento dos años antes. En 1975 se crea el Servicio de especialidades médicas y además el 20 de noviembre muere en una habitación del mismo hospital creado por él, Francisco Franco.

Yo por razones personales he vivido muchas épocas de mi vida en el Hospital de La Paz y siempre tendré un recuerdo de agradecimiento a todas esas personas, médicos, enfermeras y celadores, fisios y personal administrativo que tuvieron alguna relación con un niño, yo, que me movía en un ambiente que gracias a todos ellos nunca fue ni hostil ni doloroso.
La obra de Franco encarnada entre otras muchas buenas obras en un complejo hospitalario que fue la envidia del mundo. La obra de Franco, un centro hospitalario, entre otros, con un nombre que es resumen y filosofía de un verdadero espíritu de concordia exacta y verdadera: La Paz.