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Hoy es un día para lanzar ese grito en Granada. Allí, tendrá lugar un acto verdaderamente “recordatorio” de la Historia. A las once de la mañana, el mayor número de españoles del resto de la nación, debería sintonizar “13TV” para unirse a quienes asisten a la beatificación de dieciséis mártires de la Cruzada (1936 a 1939). (¡Usemos los sustantivos adecuadamente!) No creo haber llamado nunca “guerra civil española” a lo que fue realmente, un Alzamiento de un pueblo en “Cruzada” con tra los enemigos de Dios y de la Patria –la última habida— o una “Guerra de Liberación”. Utilizar el término “guerra civil” es de acomplejados o temerosos de llamar a las cosas por su nombre.
Sin duda, hoy, es un día para que todos cuantos se siente católicos y españoles griten. ¡Viva la Memoria Histórica! , aunque estén solos en su casa, mientras le piden a Dios que las nuevas generaciones no olviden a los miles de mártires y héroes de nuestra Cruzada. Ese “¡viva!”, será un relámpago que permitirá iluminar las salvajadas cometidas por los “padres” de los autores de la Ley infame. La verdadera memoria histórica tiene testimonios como los representados por los nuevo beatos que nos ilustra sobre lo salvajes que eran aquellos criminales, y nos advierte de nuestro futuro si no abrimos los ojos a tiempo y los echamos de la Moncloa.
Lamento no tener los relatos del martirio de los nuevos beatos, “asesinados por los rojos”. El “IDEAL” de Granada –que sintetiza su martirio en dos líneas– dice sobre Miguel Moreno Rojas: “Nacido en el pueblo donde se le martirizó, acababa de ser ordenado cuando fue detenido y enterrado vivo para que un caballo le pisoteara la cabeza. Tenía 24 años”
¿Qué les parece de ese “instinto natural democrático” propio de quienes viven el social-marxismo, y cuya “exquisitez manifiesta” podemos admirar en la ejecución de sus crímenes? ¡Enterrar vivos y aplastarles la cabeza! Son unos genios inventando “muertes democráticas” para los “fachas”. Es que a mí, esas féminas que rigen nuestros destinos, me tienen robado el corazón por su dulzura y buenos instintos aunque me retrotraen a lo vivido, con ocho años, en la «zona roja” montañesa –lo tengo grado en forma indeleble– cuando veía a las “marimachos con mono” y pistolón al cinto, “confraternizando” con los milicianos en la cervecería “La Polar”, en la Alameda de Santander.
Disculpen que me salga del camino. Mañana es un día grande para la Memoria Histórica, por las lecciones que encierra…
Mientras esperamos su borrado de nuestra legislación (del B.O.E.), aprovechemos días como hoy para recordar los crímenes de quienes se han emperrado en hacernos ver a su modo y desvirtuar la Justicia del Régimen de Franco —que si de algo pecó fue de blandengue—y hacerla pasar como un “instrumento de venganza” . (Por suerte el Caudillo nos libró de ver lo que habría sucedido si los vencedores hubieran sido los rojos. Stalin a su lado sería beatificarle…)
Lo más triste es que la derecha acomplejada no ha sabido agradecérselo al Generalísimo ni a sus “padres” que le ayudaron a limpiar de estiércol la España del 36. Llevo medio siglo intentando comprender ese misterio llamado “acomplejamiento” de los vencedores.
Si los españoles no hubieran degenerado en forma tan alarmante, lo normal hubiera sido poder comprobar que en España no quedaba ni una brizna de marxismo, ni de separatismo, ya que la derrota de los mismos fue tan fulminante que fueron arrasados y todas las generaciones desde 1940 deberían sentirse orgullosas de ser la UNICA NACIÓN que desde la Revolución rusa, ha vencido en una guerra contra los rojos. Inexplicable que hasta los llamados “nuestros” con medios de comunicación en su mano, dudan en llamar las cosas por su nombre muchas veces. Y sin quererlo parecen acomplejados,
El único consuelo es que “la Verdad es autopropulsada y al fin se abre paso” y más teniendo como testigos los miles de mártires que, contra su voluntad algunos Jerarcas católicos van subiendo a los altares como beatos y santos. Eso sí, sin atreverse a llamar a los asesinos por su nombre y, si es posible, procurando que nadie se entere del todo de que fueron los rojos y separatistas quienes los asesinaron.
De todos maneras – y como no puede ser de otro modo–, Dios sabe lo que hace y se ve obligado a reprocharnos constantemente su queja: ¡Hombres de poca Fe!, ¿por qué teméis?
Es impresionante el conocimiento de la Historia de España si alcanza el grado suficiente. No hay otra igual. Leí no hace mucho que en tres años, nuestra Patria dio a la Iglesia más más mártires que en los tres primeros siglos juntos con las diez persecuciones del Imperio Romano… Ahí radica, –y en su Historia de los siglos XV y XVI –creo yo, el secreto de la insumergibilidad de nuestra Patria que tenía desconcertado a Bismark.
Considero una buena iniciativa invitar a todos los españoles a unirnos a las once de la mañana, asistiendo a la beatificación de los dieciséis mártires granadinos, Y esto me trae a la memoria el recuerdo de un gran amigo, nacido en Guadix, ya fallecido (probablemente m conocido de muchos lectores del Correo de España, Carmelo Amezcua, pues fue un activo luchador y directivo en nuestro sindicato, Fuerza Nacional de Trabajo —y que me contó que a un hermano de su padre, lo asesinaron por falangista, enterrándolo vivo, y que a su padre durante el día lo escondían en un pozo del que le sacaban por la noche. Se ve que en esa zona ese sistema de asesinar tenía sus partidarios…
Por supuesto además del viva a la Memoria Histórica, hagamos algo más positivo, pidiendo a los nuevos beatos que protejan no solo a Granada y Andalucía, sino sobre todo a Cataluña, Vascongadas y Galicia, donde intentarán crear el clima necesario para volver a los años treinta del siglo pasado. La misa de Beatificación es un excelente momento para ello. Y tal como está el mundo, viviendo momentos muy parecidos a la toma Danzig, con la toma de Kiev, y siendo sábado podríamos hacer un esfuerzo puesto que solo Nuestro divino Maestro y su santísima Madre y nuestra pueden cambiar lo que la Sinagoga de Satanás tiene ya bien controlado para esclavizarnos sin tardar mucho..
Autor
- GIL DE LA PISA ANTOLÍN. Se trasladó a Cuba con 17 años (set. 1945), en el primer viaje trasatlántico comercial tras la 2ª Guerra mundial. Allí vivió 14 años, bajo Grau, Prío, Batista y Fidel. Se doctoró en Filosofía y Letras, Universidad Villanueva, Primer Expediente. En 1959 regresó a España, para evitar la cárcel de Fidel. Durante 35 años fue: Ejecutivo, Director Gerente y empresario. Jubilado en 1992. Escritor. Conferenciante. Tres libros editados. Centenares de artículos publicados. Propagandista católico, Colaboró con el P. Piulachs en la O.E. P. Impulsor de los Ejercicios Espirituales ignacianos. Durante los primeros años de la Transición estuvo con Blas Piñar y F. N., desde la primera hora. Primer Secretario Nacional.
