21/11/2024 14:51
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(A Daniela y Julen por su inolvidable clase magistral sobre biología molecular)

Precisemos. Exactamente el aislamiento de un nuevo coronavirus. Al  principio denominado 2019-nCoV (en inglés, 2019-novel coronavirus, nuevo coronavirus de 2019). Posteriormente, Sars-Cov-2. Y la causalidad, posteriormente establecida, entre este virus y una nueva enfermedad a la que denominaron covid-19. Hasta aquí, la versión oficial. Falsa hasta el mismísimo tuétano, pero la bola de nieve desde enero, imparable.

Nuevo coronavirus todavía sin aislar

Les refresco el  caletre. Wuham, una de las ciudades más hipercontaminadas del mundo. Ergo, población muy propensa a padecer toda una miríada de enfermedades respiratorias de todo pelaje y condición. Y, «surgen», súbitamente, neumonías de causa desconocida. Investigación, escudriñar la génesis. La virología oficial lo tiene fácil: un virus. Averigüemos confirmación. Virólogos procedentes de los CDC chinos (dato que, en principio, podría viciar la posterior pesquisa) se ponen a la tarea. El equipo lo dirige Na Zhu. Acaban publicando, en The New England Journal of Medicine (otro dato revelador), A Novel Coronavirus from Patients with Pneumonia in China, 2019. En ese estudio «dicen» haber aislado el nuevo coronavirus causante de esas » anómalas y novedosas» neumonías. Vuelvo a leerlo. Dos amigos- bióloga y médico- me auxilian esta vez. La conclusión de ambos, como cuando lo estudié por vez primera, deviene luminosa: ese artículo académico en absoluto es la descripción del aislamiento de un nuevo coronavirus. Punto pelota.

¿Entonces?

El artículo describe varias fases que «demostrarían» el aislamiento del nuevo virus asesino. En primer lugar, se extrajeron células de personas afectadas de esa presunta neumonía. Esas células se cultivaron. Del cultivo, a continuación, extraen un ARN que ellos suponen que pertenece al virus porque en el cultivo se produjo muerte celular.  Afirman que se produjo muerte celular. Y SIN PRUEBA ALGUNA se infiere que existiría un virus criminal actuando y matando, en el ínterin, las células. Repito, pura y dura suposición. ANTICIENCIA: suposición no es demostración. Más que nada porque la muerte celular en cultivo puede obedecer a múltiples causas. Y eso cualquier virólogo mínimamente honesto lo sabe de sobra. Y cualquier virólogo sabe que el asunto sobreviene mucho más complejo.

Todo cultivo celular exige «matar de hambre», debilitar, “apagar” a las células que se van a utilizar. Eso sin contar con toda la carga de antibióticos que les chutan a las células del cultivo. Estas células, previa y altamente intoxicadas antes de dar comienzo la búsqueda de cualquier patógeno, son destruidas por el propio proceso de cultivo. No hace falta ningún agente patógeno que lo provoque.

Gansterismo intelectual

Teniendo en cuenta este crucial asunto, los investigadores chinos extraen un ARN SIN PRUEBA ALGUNA DE QUE SEA DE UN NUEVO VIRUS. Posteriormente, sacan fragmentos del ARN –repito, fragmentos- del cultivo y, mediante complejas técnicas de tratamiento informático genético, lo van amalgamando a otros materiales genéticos. Tal cual. Léanlo. Y van «rellenando huecos» para poder obtener la secuencia del nuevo coronavirus. En esos “boquetes” de la secuencia genética, absoluta manipulación. Delincuencia intelectual. Anticiencia. Vete a saber qué fragmentos de ARN y procedente de qué fueron incrustando para poder presentar el genoma completo de un nuevo coronavirus. Lo dicho estafa intelectual.

Y eso por no volver a repetir lo ya dicho en tantas ocasiones. Se saltaron con un par los postulados de Koch. Los chusmetas de Newtrola afirman que  los postulados sí se cumplieron. Al menos, «tal y como se entienden en el siglo XXI”. Cuánta majadería anticientífica en frase tan breve. Los postulados no se satisficieron en ningún momento- admitido por los autores del estudio- y sin esos postulados el aislamiento de un virus es harto dudoso, equívoco, cuestionable. Imposible, diríase mejor. Pero si ya la embustera busilis del propio estudio donde dicen haber aislado (“dicen que”) el virus es que te despollas. Y sin olvidar, ya se lo comenté en anteriores ocasiones, que parte del cultivo celular estaba formado por células cancerígenas (pulmón). Rigor científico, di que sí.

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Todo, estafa científica

¿Y el ARN que pulula por todo el orbe, incluso con sus propias y muy chulas micrografías? Pues ya ven cómo se secuenció. Chapucería. Virus sin aislar, todavía. Científicamente, indemostrado. ¿Y existen otros estudios publicados de investigadores que hayan aislado el virus? NO. Todo el coronapollas se fundamenta en base a semejante gansterismo científico. ¿Y entonces las PCR? Pues ya ven, basada en la secuencia genética anteriormente descrita. O vete saber qué secuencia genética corretea por los mundillos de la mafia médico-sanitaria  ¿Y los test rápidos? Lo mismo. Sin virus aislado, tampoco puedes utilizar proteínas de ese virus. Salvo la falaz secuencia genética que se sacaron de la manga. Of course. ¿Y las vacunas más allá de su ineficacia y letalidad? Pues lo mismo. Sin virus aislado y «secuenciado» sin aislar (“secuenciar” sin aislar/purificar. descojonación:), no existiría futura “inmunidad” sobre nada. Sin virus aislado el chiringo se les cae a trozos.

Verdad y mentira en sentido moral

La verdad se sabe de sobra: todo es un colosal engaño planetario. El intelecto, nos aclaró Nietzsche, no guarda relación alguna con la verdad y la mentira, su misión no es «conocer la verdad», como creyeron desde siempre los filósofos, sino «engañar», «pergeñar ficciones, ilusiones, simulacros», «razonablemente verosímiles», que permitan al hombre sobrevivir, tanto frente a otros seres como ante sí mismo, haciéndole soportable la existencia, «ilusionándole» con delirantes quimeras, que le permitan tolerar mínimamente la vida. Pero una cosa, les recuerdo, es el cacumen y otra bien distinta, vestirse por los pies. ¿Entonces? Les recuerdo una bellísima y aleccionadora parábola judía…

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…Un día la Mentira y la Verdad se encontraron.

La Mentira dijo a la Verdad:

– Buenos días, doña Verdad

Y la Verdad fue comprobar si realmente era un buen día. Miró hacia arriba, no vio nubes de lluvia, varios pájaros cantaban y viendo que realmente era un buen día, respondió a la Mentira:

– Buenos días, doña Mentira.

– Hace mucho calor hoy, dijo la Mentira.

Y la Verdad viendo que la Mentira decía la verdad, se relajó.

La Mentira entonces invitó a la Verdad a bañarse en el río. Se quitó la ropa, saltó al agua y dijo:

– Venga doña Verdad, el agua está deliciosa.

Y una vez que la Verdad sin dudar de la mentira se despojó de su noble y virtuosa ropa y se lanzó al río, la Mentira salió del agua y se vistió con la ropa de la Verdad y a su vez la Verdad se negó a vestirse con la ropa de la Mentira y por no tener que avergonzarse, salió desnuda caminando por la calle.

…Pues lo dicho. Ayer, hoy y siempre, a los ojos de casi toda la peña es más fácil aceptar la mentira vestida de verdad que la verdad desnuda, cruda e impía. En fin.

https://www.nejm.org/doi/pdf/10.1056/NEJMoa2001017

Autor

Luys Coleto
Luys Coleto
Nacido en Bilbao, vive en Madrid, tierra de todos los transterrados de España. Escaqueado de la existencia, el periodismo, amor de juventud, representa para él lo contrario a las hodiernas hordas de amanuenses poseídos por el miedo y la ideología. Amante, también, de disquisiciones teológicas y filosóficas diversas, pluma y la espada le sirven para mitigar, entre otros menesteres, dentro de lo que cabe, la gramsciana y apabullante hegemonía cultural de los socialismos liberticidas, de derechas y de izquierdas.