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Lo recuerdo perfectamente. Fue durante la campaña electoral para las elecciones del “15-J” (las primeras que se celebraban tras el Régimen de Franco), o sea, el 15 de junio de 1977… y fue el “Leitmotiv”  de la UCD, de Adolfo Suarez: el “Voto útil”.

La TVE del Gobierno (por entonces no había otra), la Prensa del Movimiento, los periódicos subvencionados, las revistas controladas, los Grupos teledirigidos y cada megáfono o altavoz que resaltara el grito del “voto útil” no dejó de sonar a todo gas durante aquellos días que España entera se puso a cantar “libertad sin ira” y con un único mensaje: “Habla, pueblo, habla”.

Y todo porque Suarez se temía que el voto sociológico (le llamaban así para no llamarle “franquista”) se lo llevara la AP de los 7 magníficos de Fraga, porque eso sería la división y la pérdida de las elecciones, ya que según las encuestas que se publicaban por primera vez daban por ganador al PSOE de Felipe y Guerra.

— ¡El voto útil! Señores que queréis la Democracia y el sistema de libertades, por el que lucha y va a luchar la UNIÓN DEL CENTRO DEMOCRATICO… españoles, amigos, no os dejéis engañar, la Izquierda solo quiere dividirnos por aquello de que “¡divide y vencerás!”… hay que votar unidos y hay que votar al que más posibilidades tiene de vencer en las urnas… que no es otro que la UCD, el partido de las libertades. Cualquier otra decisión (naturalmente, aunque no las mencionaban se referían a la AP de Fraga y a la “FN” de Blas Piñar) será inútil y los votos se perderán. HAY QUE GANAR EL VOTO ÚTIL, el que sirve para sumar y no para restar.

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Y en esas estamos otra vez. El PP de los cobardicas que hoy okupan Génova 13, se está desgañitando pidiendo ya el voto útil ante el temor (y en este caso con razón) de que el voto “sociológico” (que sigue siendo el del franquismo sin Franco) de que VOX le de el sorpaso que se merece en las próximas elecciones, sean cuando fueren y cuando se produzcan.

Pero, con una novedad, que también ha resucitado del pasado: la del “TONTO ÚTIL”

¿Y qué fue, o quién, el “tonto útil” de antaño?

Yo recuerdo que la Prensa del Movimiento y todos los periódicos llamaban así a los pocos, poquísimos,  (al principio, porque luego se multiplicaron de hora en hora), españolitos que con precaución apoyaban cualquier iniciativa de los comunistas (ya saben que en tiempos de Franco todo el que  se oponía al franquismo era comunista) y eso era peligroso “los abajofirmantes” incluso, muchas veces firmaban con pseudónimos para no señalarse y que los pudieran fichar los de La Social. ¿Y quién es el “tonto útil” de hoy?

Por lo que estamos viendo en los últimos acuerdos del PSOE y el PP  el “tonto útil” de hoy tiene nombre y apellido. Se llama don Teodoro García Egea (aunque muchos le conocen más por “el don Teo, fullero y compravotos de Murcia”). Y es el “tonto útil” porque, creyéndose que con eso ganan el Centro político y van a barrer a VOX, han caído en la trampa y están facilitando la labor de zapa, del presidente Sánchez… ya que sin darse cuenta don Teo y el PP se han sentado a negociar con los mismos que en la otra mesa se sientan con sus socios comunistas, independentistas, bilduetarras, nacionalistas, podemitas, anarquistas y demás ralea… ¡tontos de capirote!… que sin darse cuenta con ello están ayudando a blanquear a los terroristas de ETA y a los Chavistas y Maduritos de Iglesias.

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O sea, el “tonto útil” del que se está aprovechando el listo Rey Eteocles de la Moncloa.

Pero, los españolitos ya saben de qué van los cobardicas de don Casado y don Teo  y lo tendrán en cuenta el día de las urnas. Al tiempo.

Autor

Julio Merino
Julio Merino
Periodista y Miembro de la REAL academia de Córdoba.

Nació en la localidad cordobesa de Nueva Carteya en 1940.

Fue redactor del diario Arriba, redactor-jefe del Diario SP, subdirector del diario Pueblo y director de la agencia de noticias Pyresa.

En 1978 adquirió una parte de las acciones del diario El Imparcial y pasó a ejercer como su director.

En julio de 1979 abandonó la redacción de El Imparcial junto a Fernando Latorre de Félez.

Unos meses después, en diciembre, fue nombrado director del Diario de Barcelona.

Fue fundador del semanario El Heraldo Español, cuyo primer número salió a la calle el 1 de abril de 1980 y del cual fue director.