Getting your Trinity Audio player ready...
|
Cuando se organizó en Torrevieja un foro llamado “termómetro Sanitario del Sur de Alicante”, se analizó la situación caótica de la asistencia sanitaria, tras su reversión de gestión pública a privada, en una población que durante el verano supera los seiscientos mil habitantes.
La asistencia sanitaria es un bien cuya provisión es pública, a través de los presupuestos del Estado, pero que se puede gestionar indistintamente por el sector público o el privado al aplicar el principio de la racionalidad económica, según el cual se debe elegir el método de producción de cualquier bien o servicio público minimizando el coste y garantizando la mejor calidad.
En Torrevieja durante quince años se pudo disfrutar de una experiencia novedosa: un modelo de gestión privada manteniendo la propiedad pública del hospital, que se impulsó en Alzira, Torrevieja y Elche y en algún hospital de Madrid, con un contrato de gestión conocido como “modelo Alzira” ya que fue allí donde primero se implantó.
Desde que llegaron los socialistas al gobierno de la Comunidad Valenciana se realizó la reversión de pública a privada de los hospitales de Alzira y Torrevieja, siendo desde entonces un 40% más caros que cuando la gestión era privada y con una pésima calidad en el servicio. Ninguno de los dos hospitales al revertirse a público tenía más plan estratégico que la gestión del día a día y el “sálvese el que pueda”.
El sistema público de asistencia sanitaria no solo es mucho más caro que el privado, sino que tiende a desincentivar a los profesionales, al recibir el mismo sueldo y trato los más brillantes como aquellos otros que entorpecen a los pocos profesionales que trabajan con dedicación, eficacia y vocación.
La única forma de garantizar que la sanidad sea un bien universal y gratuito para los españoles en los próximos años es que la gestión de este recurso pase a ser privada, y que la administración controle y garantice la calidad del servicio, en lugar de ser un lugar donde hacer demagogia e ideología partidista.
En este momento parece que este principio liberal solo lo defiende VOX, ya que el PP que fue el partido que instauró este modelo de gestión sanitaria en su época liberal, no solo no ha defendido ese principio de racionalidad económica, sino que en las últimas semanas tanto el Alcalde de Torrevieja como el portavoz del PP en sanidad han puesto de manifiesto que prefieren que la gestión sea pública en lugar de privada, aunque la primera sea más cara y de peor calidad. Este cambio ideológico solo se explica si se tiene en cuenta las palabras de Rajoy hace 14 años en el Parque Municipal de Elche. En su intervención, afirmó que en su partido caben todos, «incluso la socialdemocracia», llegando a decir que «quien quiera irse al partido liberal, que se vaya«. Seguramente, aunque VOX no nació hasta cinco años después, puede ser que este discurso fuera un revulsivo para su constitución.
Autor
Últimas entradas
- Actualidad15/07/2024Pedro Sánchez y las doce reglas prohibidas del poder. Por Salvador Ruso Pacheco
- Actualidad19/06/2024El amanecer de las ideologías. Por Salvador Ruso Pacheco
- Actualidad19/01/2024Por qué el gobierno de la Comunidad Valenciana repudia el modelo de concesión sanitaria que el PP puso en marcha. Por Salvador Ruso Pacheco
- Actualidad20/11/2023Javier Milei: La Libertad es posible. Por Salvador Ruso Pacheco