18/05/2024 08:29
Getting your Trinity Audio player ready...

Según ha llegado a mi mesa de trabajo el calificativo con el que el traidor a la patria don Pedro Sánchez ha calificado el otro día en el Congreso a los de la Policía Nacional que intervinieron en Barcelona el 17 de octubre del año 2017 para detener el flagrante Golpe de Estado, ha sido, está siendo, un verdadero vendaval entre la Policía y la Guardia Civil, cansados ambos Cuerpos del mal trato que reciben sistemáticamente del Gobierno.

Al parecer un grupo de Asociaciones de amigos, personales y sin ánimo de lucro, y sin subvenciones de ningún tipo, amantes de la Historia, entre las que figuran:

 

La «Asociación Fernando III el Santo», de Sevilla.
La «Asociación José María Pemán» de Cádiz».
La «Asociación Julio César» de Córdoba.
La «Asociación Virgen de la Cabeza» de Jaén.
La «Asociación Hernández del Pulgar» de Granada.
La «Asociación Palos de Moguer» de Huelva.
La «Asociación Crucero Baleares» de Almería. 
La «Asociación Gibralfaro» de Málaga.

 

Se han percatado del malestar que existe entre esa gente, tan distinta pero tan igual, en la Policía y la Guardia Civil, que se están movilizando para celebrar en fechas próximas una Manifestación o Concentración en Sevilla, como capital de la Comunidad Andaluza (en la Plaza de España) como repulsa contra un Gobierno que, según ellos, está rompiendo España.

Según se sabe ya el simple hecho de celebrar un acto así está despertando tal entusiasmo que ya se habla de organización, estrategia a seguir y de los posibles costos que ello conlleva.

LEER MÁS:  Así son los nuevos apóstatas. Por Julio Merino

Y todo, de momento, se piensa bajo un lema común y unitario: 

“SÍ somos PIOLINES ¿y qué? Si defender España va a ser un delito de las Fuerzas de Seguridad del Estado vamos a tener que ser todos PIOLINES”.

Así que nosotros también nos sentimos “Piolines”, y el “Correo de España” estará en primera fila y sintiéndose orgulloso de ser “Piolines de los de Cataluña”.

Autor

Julio Merino
Julio Merino
Periodista y Miembro de la REAL academia de Córdoba.

Nació en la localidad cordobesa de Nueva Carteya en 1940.

Fue redactor del diario Arriba, redactor-jefe del Diario SP, subdirector del diario Pueblo y director de la agencia de noticias Pyresa.

En 1978 adquirió una parte de las acciones del diario El Imparcial y pasó a ejercer como su director.

En julio de 1979 abandonó la redacción de El Imparcial junto a Fernando Latorre de Félez.

Unos meses después, en diciembre, fue nombrado director del Diario de Barcelona.

Fue fundador del semanario El Heraldo Español, cuyo primer número salió a la calle el 1 de abril de 1980 y del cual fue director.