Fernando Bartolomé Benito analiza su obra Gondomar. El embajador. Diplomacia y arcabuces (SND). Por Javier Navascués

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Fernando Bartolomé Benito. Aragonés. Catedrático de Lengua española y Literatura. Editor, conferenciante y estudioso de la cultura y la historia del Siglo de Oro, simultanea la crítica y la investigación histórica con la creación literaria. Autor de un gran número de obras: literarias, relatos, novelas, estudios…que pueden comprobar en este enlace: Fernando Bartolome Benito – SND EDITORES

¿Por qué un libro sobre Gondomar hoy?

Este libro era un trabajo de cinco años que debía publicarse en el 400 aniversario del nombramiento de don Diego Sarmiento como conde de Gondomar en 2017. Pero los fastos se vinieron abajo por la dejadez del alcalde de tal villa y me seguía llegando documentación importante que me impedía cerrar la obra. Luego llegó el covid y todo se vino abajo. Hasta que hace unos meses encontré un nuevo patrocinador, el Puerto de Vigo, pues el anterior no terminaba de cerrar los últimos flecos y cada vez ponía más dificultades, tenía que ser en gallego, en fin la cosa se puso en los cuernos de la luna, hasta que los astros se alinearon y apareció la editorial SND y paralelamente el Puerto y en poco tiempo salió el embajador a la calle. Con algún retraso, pero ahí está.

¿Cuál es la importancia que tuvo el personaje en la Historia de España?

Era después del Vaticano y Viena la tercera en importancia con Paría, si bien esta lo era por los pactos matrimoniales, Londres por ser la más difícil de todas. Era la parrilla de San Lorenzo, siempre en brasas y enfrentamientos por religión, piraterías, incautamientos de mercancía a mercaderes ingleses en España y porque los ingleses et non solum nunca aceptaron que el Nuevo Mundo lo repartiera el Papa entre España y Portugal. Siempre hubo una guerra abierta o soterrada entre ambas potencias y el odio a España era parte de la política de Estado inglesa.

¿Qué balance hace de su papel como embajador?

Magnífico. Nunca hubo y hasta ahora no ha existido mejor embajador en Inglaterra. Llegó cuando la guerra era inevitable y él algo más que un pretensor molesto en la corte madrileña. El Duque de Lerma, que lo admiraba y lo odiaba pensando que le hacía sombra, se lo quitó de delante siguiendo una política necia, el mejor o el que más moleste a una embajada, para don Diego la más difícil. Paró la guerra, se hizo amigo del rey inglés y de su primer ministro Bacon de Verulam, enfrentó a Inglaterra con Francia y hubiera casado a la infanta si Olivares y Buckingham no hubieran jodido tan fino encaje, acabó con la piratería y colgó al primer caballero inglés, durante trece años gobernó Inglaterra o, por decir mejor su política, exterior.

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¿Por qué fue un personaje tan querido y odiado a la vez?

Aterrorizó al pueblo inglés y a su iglesia mientras era agasajado por gran parte de su nobleza y se levantó contra él la mayor fábrica de literatura de vituperio jamás vista en la historia del mundo. En Inglaterra sólo Hitler ha sido más odiado…Era Belial, el demonio del sur que ha venido a embrujar a nuestro rey y a copular con nuestra reina, el caballero Negro que ha engañado a nuestro Príncipe de Gales, el Zorro que corrompe Europa para conseguir la Monarquía Universal española y por su doblez el gran Maquiavelo español.

En Inglaterra se ha achacado a la influencia de Gondomar sobre su rey la ejecución del pirata Raleigh que había atacado la América española sin permiso de Jacobo I. ¿Fue realmente así?

Tres veces fue a Inglaterra como embajador en la primera consiguió la cabeza de Raleigh y toda la nobleza inglesa aplaudió, pero en el año que estuvo en España, enfermo, siempre mala salud, el triunfo se volvió odio y ya en la segunda embajada todo fue más difícil pero supo anudar la boda española y paralizar la ayuda inglesa a Flandes. Menos brillo pero grandes resultados y en la tercera ya no llegó a Inglaterra y se quedó haciendo de todo en Flandes, espía, diplomático y consejero de Isabel Clara Eugenia…

¿Cómo compagina su alta responsabilidad internacional con su amor a su querida Galicia y a la tradición y culturas locales?

Morir quiero en Galicia como fidalgo gallego. Ahí se resume la final y grande arela (deseo) de un hombre que tuvo una vida alternante entre Galicia y la corte, España y Europa, las armas y las letras. Defensor con las armas en la mano de su matria hasta que se le quedó pequeña, defendió y rescató las perdidas libertades e instituciones del reino de Galicia con otros gallegos ilustres, amante de sus lenguas y sus tradiciones en sus escritos y en su cotidianeidad; su pazo acuartelado es el símbolo permanente de amor terruñero de un hombre universal.

Autor

Javier Navascués: Subdirector de Ñ TV España. Presentador de radio y TV, speaker y guionista.

Ha sido redactor deportivo de El Periódico de Aragón y Canal 44. Ha colaborado en medios como EWTN, Radio María, NSE, y Canal Sant Josep y Agnus Dei Prod. Actor en el documental del Cura de Ars y en otro trabajo contra el marxismo cultural, John Navasco. Tiene vídeos virales como El Master Plan o El Valle no se toca.

Tiene un blog en InfoCatólica y participa en medios como Somatemps, Tradición Viva, Ahora Información, Gloria TV, Español Digital y Radio Reconquista en Dallas, Texas. Colaboró con Javier Cárdenas en su podcast de OKDIARIO.

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