17/05/2024 05:28
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La familia es anterior al estado y éste no debe ni puede definir lo que es y lo que no es familia. Esta ley de (anti)familias favorece la inestabilidad familiar y la destroza.

Pero en España quieren asesinar a la familia. América: prepárate para lo que viene. Sí, se le quiere dar un golpe mortal con una nueva Ley de familias, al diluirla en 16 tipos de “familias” distintas, reguladas todas ellas. Algunos ejemplos de nuevas familias: familia biparental, familia monoparental o “monomarental”, familia LGTBI monoparental o “monomarental”, familia en el exterior, familia intercultural, familia transnacional, personas solas…

¿Por qué decimos que esta Ley quiere asesinar a la Familia? Porque si todo es familia, nada lo es: el objetivo es destruirla directamente. La familia es anterior al estado y éste no debe ni puede definir lo que es y lo que no es familia.

#LaFamiliaNoSeToca. Esta ley de (anti)familias favorece la inestabilidad y se destroza la herencia familiar, las raíces, los valores que se dan en las familias como escuelas de vida. Esta ley es solo es una pieza más de la estructura social diseñado por la izquierda.

#LaFamiliaNoSeToca. Esta ley de (anti)familias se hace por tramitación administrativa urgente del anteproyecto de Ley de Familias. Esta Ley de (anti)familias, que la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, del gobierno de Pedro Sánchez, quiere aprobar… ¿cómo destruye el concepto de familia? Fácil: al diluirlo en 16 tipos de familias distintas. Como hemos dicho, familia biparental, monoparental o monomarental, LGTBI monoparental o monomarental, intercultural, transnacional… y así hasta 16 tipos.

#LaFamiliaNoSeToca. En esta ley de (anti)familias, todos los grupos sociales y todas las excepciones posibles son incluidos en el concepto de “familia”, aniquilando así a la familia como célula básica de la sociedad, donde hay siempre un padre, una madre y, por regla general, unos hijos. El Gobierno sustituye lo que son “circunstancias familiares” (que siempre existen, existirán, y que algunas de ellas son dramáticas y necesitadas de una asistencia especial desde lo público), por la propia “Familia” con mayúsculas.

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#LaFamiliaNoSeToca. Esta ley de (anti)familias impone un modelo social diseñado ideológicamente: no solo rompe con lo que antropológicamente se conoce como “familia”, núcleo y nexo determinante de cualquier comunidad humana, sino que impone una ideología cuyo fin es enterrar definitivamente lo que este Gobierno interpreta como “familia tradicional”.

#LaFamiliaNoSeToca. Esta ley de (anti)familias, por si fuera poco, quiere acabar con la libertad de los padres para educar a sus hijos, prohibiendo el Pin Parental, veta el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos: el art. 24 elimina el derecho fundamental de los padres a decidir e influir en la educación de sus hijos (esto es directamente inconstitucional). Prohibición del «Pin Parental»: entre sus novedades más destacadas la Ley incluye “la prohibición expresa de que los padres o tutores impidan el acceso a contenidos sobre diversidad familiar en el marco educativo” a fin de evitar, como dijo la ministra “una restricción de los derechos de los niños, niñas y adolescentes a la educación y al libre desarrollo de su personalidad».

Esto, lo que realmente supone es un atentado contra un derecho fundamental consagrado en el artículo 27.3 de nuestra Constitución, así como en la Carta de Derechos Humanos, artículo 26 y la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea, artículo 14.

#LaFamiliaNoSeToca. Esta ley de (anti)familias impone expresamente la obligatoriedad de que los niños estudien todos esos modelos de familia. Se colarán por ley en el currículo educativo, quieran los padres o no. Esta obligatoriedad es la prueba de que no responde a una auténtica necesidad administrativa, jurídica o laboral para subsanar algo que el Estado no cubre aún, sino que se trata de doctrina pura y dura.

#LaFamiliaNoSeToca. Esta ley de (anti)familias ataca la esencia de las familias numerosas: elimina el concepto de Familia Numerosa y lo sustituye por el de Familias con mayores necesidades de apoyo a la crianza de categoría especial, sumándose a las familias numerosas otros muchos tipos de familia en diversa circunstancia. Los 200 euros al año que contempla no sirven más que para esclavizar y generar personas que ansían estar subvencionados, no para fomentar la natalidad, de la que no se habla en la ley.

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No podemos permanecer impasibles, por ello acTÚa FAMILIA comienza esta campaña, La Familia No Se Toca, luchando junto a otras muchas asociaciones pro-familia, para detener el mayor ataque a la institución familiar, célula básica de la sociedad, que se ha visto en el mundo occidental. El responsable de este atropello es Pedro Sánchez, que gobierna junto a los comunistas de Podemos.

Y para hablar de ello, de la importancia de la Familia, de qué es, y de qué proyectos hay para su destrucción, hemos organizado este nuevo ENCUENTRO Familia.Vida.Libertad, invitando a varios expertos en la materia. Los tres son precisamente amigos y miembros del Consejo Asesor de acTÚa FAMILIA. Auténticos especialistas en “Familia”. En primer lugar, nuestra imprescindible Elsa Méndez, ex-diputada en Querétaro, México, y conocida defensora de la familia y la vida. Impulsora allí de la “perspectiva de familia”. También a María Menéndez, gran batalladora contra la ley española y conocedora de la misma, es presidenta de Familias Numerosas de Madrid. Y mi amigo José Luque, médico, activista familiar y ex-político en Málaga.

Sabrás todo sobre el mayor ataque que se está produciendo contra la familia y las acciones para combatirlo, de la mano de estos tres expertos, a los que tuve el honor de moderar.

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Daniel Antonio Jaimen Navarrete

El ataque a la familia y su desprotección jurídica e institucional actual tiene raíces en el satanismo practicante y fervoroso de las oligarquías mafiosas globales y globalistas. Ahora bien, también es una cuestión eminentemente práctica para ellos, puesto que la familia es el lugar natural de formación y transmisión de capitales privados. Este función social de la familia les contraria porque obstaculiza sus planes de control total. Quieren una masa de individuos pobres y solos, sin recursos propios y redes de solidaridad, dependientes de las oligarquías mafiosas financieras para el crédito y las oligarquías mafiosas políticas para la subvención. No quieren una sociedad de hombres libres sino una de ratas de laboratorio con un comportamiento moldeable con estímulos.

La abolición de la propiedad privada, de iure o como derecho efectivo, afectaría al grueso de la población, mientras que las oligarquías mafiosas oligopólicas sí tendrían propiedad y familia, además de planificarles centralmente a los demás sus insumos, consumos y prosumos. El objetivo último del feaminismo rockerfelleriano es una sociedad análoga la de los Mo suo en China, donde, para la gran mayoría, no hay linajes paternos y las mujeres poseen todo lo necesario para vivir y trabjar pero, para una minoría regente, sí hay propiedad privada y patrilinealidad. Sin matrimonio no hay patrimonio,

Por cierto, progres, ya podían aprobar la familia polígama -con consentimiento- entre las opciones legales.

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