21/11/2024 19:57
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Santiago Javier Armesilla Conde es escritor, politólogo y doctor en economía. Redes sociales: Twitter, Instagram, TikTok (@armesillaconde). Canal de Youtube (Santiago Armesilla). Facebook (Santiago Armesilla). Web: www.armesilla.org.

Analiza brevemente para El Correo de España el conflicto de Ucrania.

¿Cuál es su valoración del conflicto entre Rusia y Ucrania?

Cuando un conflicto bélico está en curso, la valoración sobre el mismo siempre es limitada, en caliente. Por lo que una valoración ponderada del mismo requiere que este acabe y analizarlo en clave histórica, en clave de investigación. Y teniendo en cuenta que esta investigación también tiene sus limitaciones. Diría que, en vista de lo que podemos conocer hasta ahora, era un conflicto evitable si Ucrania no hubiese pedido explícitamente su entrada en la OTAN, si ésta no se hubiese extendido hasta las mismas fronteras rusas.

Pero el golpe de Estado de 2014 contra el presidente pro-ruso Víktor Yanúkovich, y el apoyo desde el gobierno nuevo en Kiev a grupos neofascistas xenófobos contra la población ucraniana de origen étnico granrruso, o que solo habla ruso, ha sumido al país en una guerra civil en su parte oriental que tiene tintes de limpieza étnica. Europa del Este siempre ha sido un avispero para estas cosas porque la construcción nacional política burguesa en esta región del mundo nunca fue tan cerrada como la que ocurrió en Europa occidental, algo que el propio Lenin reconoció. Pero Putin tiene razón cuando afirma que la aplicación del «derecho de autodeterminación» (en realidad, privilegio de secesión) a las unidades administrativas que los bolcheviques generaron en la URSS (las «repúblicas») sentó las bases también de lo que ha ocurrido a nivel de antecedentes históricos. Es decir, una nula construcción nacional política, una idea de nación más asociada a lo étnico que a lo político en el mundo eslavo, la idea de «autodeterminación» defendida por los bolcheviques en la URSS y los acontecimientos posteriores a la caída de la Unión Soviética explicarían todo esto.

¿Considera legítimo que Rusia haya enviado sus tropas a Ucrania?

La legitimidad o no de la invasión rusa a Ucrania va a depender del resultado de la misma. Si Rusia gana la guerra e instaura su Pax, la Pax Rusa, será legítima. Si pierde, será ilegítima. La legitimidad la tendrá la Pax de la OTAN. La paz es siempre el orden que logra imponer el vencedor. En 1994 Rusia acordó con Ucrania respetar sus fronteras y su integridad territorial. Pero los acontecimientos que describo en la pregunta anterior cambiaron la situación, sobre todo después de la «revolución naranja» de 2004 y, sobre todo, del golpe del Euromaidán diez años después.

Usted afirma que se ha evitado tomar totalmente Kiev para evitar un baño de sangre…

Lo que afirmo es que el Ejército Ruso no pretende arrasar y destruir Ucrania, como hizo la OTAN en Libia, Siria o Irak. Busca acabar con efectivos militares que atenten contra los planes y programas geopolíticos rusos, y también con su soberanía e integridad territorial, pues todo va en el paquete. Y pretenden evitar un exceso de muertes civiles que dé una excusa a la OTAN para entrar en Ucrania. Rusia ha dicho, además, que no va a tolerar el retorno de Crimea a Ucrania, que es parte de Rusia, aunque fuera entregada por Nikita Kruschev a Ucrania en la década de 1954. Rusia, por supuesto, tiene sus planes imperiales también: necesita llevarse bien con el eje franco-alemán en la Unión Europea para que ésta dependa de su energía, sobre todo del gas. Y también tener buenas relaciones con China, India e Irán, así como con los países de la antigua URSS. Rusia busca asegurar la estabilidad en Eurasia para, así, poder tratar de unir en torno suyo al mundo eslavo. Eurasia y paneslavismo son las claves que explican la política exterior rusa.

No es un proyecto universalista, como lo es el de EEUU (Globalización, liberalismo, capitalismo, democracia, protestantismo cultural). Pero, a mi juicio, hay que decir que la defensa de un mundo multipolar por parte de Rusia y China es una estrategia temporal para poder colocarse como nuevo hegemón a muy largo plazo. Esto también evidencia que China y Rusia son aliados frente a terceros, pero que también tiene intereses contrapuestos. Si EEUU, a cambio del apoyo de China, les entrega Taiwán, Rusia se quedaría más sola. Pero Mike Pompeo, que quiere ser presidente de EEUU en 2024, ha dicho que reconocería la soberanía estatal de Taiwán. Como vemos, el futuro es incierto.

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También asegura que Putin no quiere acabar con la vida de Zelensky, sino sentarse con él a negociar la paz.

Eso ha dicho para calmar las aguas en la OTAN. Zelensky también ha dicho que quiere hablar con Putin. Negociar la paz es negociar una paz que beneficie a Rusia, desde la perspectiva de Putin. Zelensky estoy seguro que está siendo asesorado desde fuera de Ucrania en sus movimientos. No sé qué resultará de la guerra. Pero Zelensky está siendo elevado a la condición de gran estadista. La «izquierda» lo ve como un nuevo Salvador Allende, y la «derecha» como un nuevo Lech Walesa. Allende acabó muerto, y Walesa, aunque fue presidente de Polonia, hoy es un tipo casi arruinado y venido a menos. Zelensky podría acabar defenestrado si EEUU ya no le necesitase.

¿Por qué considera necesario que Ucrania siga bajo la influencia de Moscú?

Para Moscú eso sería lo bueno. Una victoria de Moscú en esta guerra pondría en cuestión la hegemonía anglogermánica capitalista. Pero si pierde, el colapso de Rusia y su posible balcanización, y la entrada de la OTAN en el Cáucaso, Asia Central y Siberia, pondría en aprietos a China. Los anglosajones siguen pensando en términos del Área Pivote de MacKinder, quien domine Siberia y Asia Central dominará el mundo. Su discípulo, Spykman, afirma que quien genere inestabilidad en la media luna que rodea el Área Pivote, en el Rimland que va del Mar Báltico al Sureste Asiático, dominará el mundo. Diría que la OTAN, hoy, combina ambas doctrinas, y que quiere dominar el Rimland y generar inestabilidad en el Área Pivote.

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Aparte, la guerra en Ucrania es también una guerra económica ante la que Rusia lleva preparándose décadas. La dependencia de Alemania del gas ruso, la cantidad de reservas en oro que Rusia acumula, la alternativa que ha construido frente al SWIFT (el SPFS que podría combinarse con el CIPS chino, aunque es problemático), el cierre de la bolsa de Moscú estos días, que tengan a China, la India y Pakistán con una posición de neutralidad benévola, por el momento, a su favor, es indicador que Rusia juega bien sus cartas. Las sanciones al gas ruso y al uso ruso del SWIFT por parte de la Unión Europea no han sido tan fuertes como se dice, y Rusia sigue llenando la UE de gas. Rusia podría enfrentarse a una depresión, sin duda, y eso generaría inestabilidad dentro. Pero la UE y EEUU se pueden enfrentar a una estanflación y una recesión más fuerte que la de 2008. La FED de Atlanta prevé un crecimiento de la economía estadounidense que no rebasaría el 0,5% este año. Así pues, en Ucrania se juega el futuro de las próximas décadas.

Se busca un Minsk III, con el arbitraje, incluso, de China. ¿Cree que es posible?

Eso depende de cómo vaya la guerra y las negociaciones. Ya ha habido dos rondas. No descartemos que Ucrania pueda acabar partida en dos, como ocurrió con Alemania o Corea en la Guerra Fría. Pero insisto, solo podemos hablar ahora de posibilidades. No hay certezas.

¿Cuáles son los escenarios posibles actualmente en el conflicto?

Ya los he mencionado en las preguntas anteriores. Lo que es más que probable es que el escenario geopolítico europeo y mundial esté cambiando de manera acelerada. Como dijo Lenin, «hay décadas en las que no pasa nada, y luego hay semanas en las que pasan décadas».

Autor

Javier Navascués
Javier Navascués
Subdirector de Ñ TV España. Presentador de radio y TV, speaker y guionista.

Ha sido redactor deportivo de El Periódico de Aragón y Canal 44. Ha colaborado en medios como EWTN, Radio María, NSE, y Canal Sant Josep y Agnus Dei Prod. Actor en el documental del Cura de Ars y en otro trabajo contra el marxismo cultural, John Navasco. Tiene vídeos virales como El Master Plan o El Valle no se toca.

Tiene un blog en InfoCatólica y participa en medios como Somatemps, Tradición Viva, Ahora Información, Gloria TV, Español Digital y Radio Reconquista en Dallas, Texas. Colaboró con Javier Cárdenas en su podcast de OKDIARIO.