El paraíso español. Por José Ramón Rivera Guitián

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Sigo las noticias relativas al affaire Ferrovial, y ni que decir tengo, que aun cuando Rafael del Pino no figura en la lista de mis simpatías, en este caso me posiciono declaradamente a su favor. Es curioso destacar que esta banda de ladrones está tan borracha de poder que pretende doblarle el brazo a cualquiera que no le rinda vasallaje, aunque al grito de: ¡Rebeldía, traición etc. etc.! Ferrovial no se ha dejado extorsionar. Ya no llega con el tres por ciento del enano ladrón y su acólito de mente separatista y geta granítica, ni el manejo del sindicalismo progubernamental, el mensaje ofensivo de los ministros y los enfados de la masona climatérica al amenazarle con abrir la caja de Pandora contra su entidad. Estas aptitudes refuerzan nuestra imagen de casa de Lenocinio financiera en manos de unos pendejos agresivos, alentados por rateros declarados que cada día nos sorprenden con un nuevo fraude, mientras jueces y magistrados lamen disciplinadamente las manos que les otorgan cargos. Ante este estado de cosas, conviene recordar que Chile levantó su situación económica con el gobierno de Pinochet, que puso fin a las desventuras de aquel mamarracho insigne que se adueñó del poder presidencial.

En el mundo financiero los errores se cuantifican en dinero. Ya están un poco lejos aquellos tiempos en que la delincuencia internacional, capitaneada por Francia y Gran Bretaña, organizaban golpes de estado en los países tercermundistas, víctimas de su explotación.

En la actualidad, todas las naciones reciben con los brazos abiertos al capital extranjero, y aquí seguimos pretendiendo, por medio del matonismo mafioso, que los capitales tengan el criterio de no pisar este país, donde imperan los Garzón, Roures y Conde, y el robo está a la orden del día a todos los niveles. La demagogia comunista vende nuestra imagen internacional y donde estos sinvergüenzas han logrado corromper hasta a la Guardia Civil y, por si esto no llegase, al Club de fútbol Barcelona. Lo cierto es que, en materia de honradez, “La tacones” es una dama pía en comparación con nosotros.

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La triste conclusión es que, dentro del marco arrogante de una Europa venida a menos, aún destacamos por nuestra soberbia e incapacidad y, en medio de este caos político social, aún nos sentimos ofendidos cuando alguien pone en cuestión nuestro linaje. El resultado, vamos camino de ser el coño de la Bernarda, con Zapatero de proxeneta y muñidor de chanchullos internacionales y el payaso de la Moncloa sodomizado un día sí y otro también por los macarras autonómicos de medio pelo, que juegan con él a su antojo recordándole que, al igual que el pedófilo, ha de tener caramelos suficientes para llevar al niño al recinto donde pretende consumar sus guarrerías. Y a él le corresponde lo mismo, así que un consejo: Pierdan con elegancia, olviden el totalitarismo, respeten el liberalismo y calmen sus ardores vaginales con ese dedo que dedican a señalar a los disidentes.

Resulta lamentable pensar que nuestra España zozobra en el oleaje internacional víctima de, a lo sumo, CIEN MIL HIJOS DE PUTA y la falta de huevos de unos pocos.

Y POR FAVOR RECUERDEN: Los imbéciles, cuando votan a Yolanda, se decantan a favor del comunismo marxista en su estado más totalitario y caribeño ¡Sigan, sigan! ¡ya lo sufriremos todos!