Después de cada escándalo protagonizado por los familiares de Pedro Sánchez o por algún político socialista parece difícil pensar en que a los pocos días un nueva tropelía saltará a la luz pública para emponzoñar aún más el enrarecido ambiente en el que nos desenvolvemos los españoles desde la llegada del autócrata monclovita al poder. Sin embargo, el PSOE nos demuestra, con inusitada insistencia, que siempre está dispuesto a superarse a sí mismo, de tal forma que cada semana nos encontramos con una nueva fechoría, una nueva conspiración en marcha, un nuevo ataque a la Justicia y al Estado de Derecho o una nueva cesión a los independentistas. De esta forma, el hediondo viento de la corrupción socialista no cesa de golpear a España de este a oeste y de norte a sur, amenazando con arrasarla definitivamente.
Así, durante los últimos días se ha conocido que el Gobierno socialcomunista está decidido a imponer por la fuerza a sus candidatos para presidir la Sala de lo Penal y la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo. Para ello, los vocales izquierdistas del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) han acordado bloquear la elección de los presidentes de dichas Salas Segunda y Tercera del Alto Tribunal, así como la designación de los jueces que han de presidir otros tribunales, paralizando así la renovación de la judicatura. Tanta obstinación sólo puede responder a una férrea e ilegítima defensa de los intereses del Partido Socialista, ya que la Sala de lo Penal es la que se encarga de los procesos judiciales que afectan al círculo familiar y político de P. Sánchez, mientras que la Sala de lo Contencioso-Administrativo tiene la función de controlar la legalidad de las disposiciones generales y los actos administrativos emanados del Gobierno y los altos organismos del Estado. Ante tan bochornosa situación, la presidenta del CGPJ, Isabel Perelló, ha denunciado el ataque del ministro de Justicia, Félix Bolaños, a la independencia del Poder Judicial, por su intento de colonizar el Tribunal Supremo. En definitiva, con su actuación, incomprensiblemente alineada con los intereses del PSOE, los vocales izquierdistas están entorpeciendo de manera espuria el normal funcionamiento de la Justicia, con la finalidad de garantizar un trato judicial de favor a todo aquel procesado que mantenga algún tipo de vínculo con el psicópata monclovita.
Asimismo, también durante los últimos días, el diario El Confidencial ha desvelado una serie de audios que demuestran de forma incontestable el execrable intento de la cúpula socialista de propagar bulos con los que deslegitimar las actuaciones de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, por ser el organismo policial encargado de la investigación de los casos más graves de delincuencia y crimen organizado y, por ello, de los múltiples casos de corrupción que afectan al PSOE. De hecho, el empresario Víctor de Aldama -imputado por ser el nexo corruptor en el caso Ábalos- ya señaló hace dos meses la existencia de lo que denominó ”las cloacas socialistas”, en las que Santos Cerdán, actual secretario general de Organización del PSOE, dirigía una red de “fontaneros” encargados de desprestigiar mediante la difamación a todo opositor al régimen sanchista. Entre los fontaneros citados por Aldama se encontraba la militante socialista Leire Díez, la cual, con el objetivo de echar por tierra las investigaciones llevadas a cabo por el jefe del Departamento de Delincuencia Económica de la UCO, esto es, el teniente coronel Antonio Balas, inició una serie de contactos para conseguir sacar información que le pudiera desacreditar. Con este zafio proceder esta socialista de carnet, tan fea por dentro como por fuera, lo cual ya es mucho decir, entabló relaciones con dos personajes de turbio proceder, como son el comandante de la Guardia Civil Rubén Villalba -acusado de cohecho y pertenencia al crimen organizado por su participación en la trama de la venta de mascarillas durante la pandemia- y el empresario Alejandro Hamlyn -investigado por fraude fiscal y pertenencia a organización criminal por su participación en la trama de los hidrocarburos-, es decir dos joyas del crimen organizado. A cambio de sus servicios, al comandante le ofreció exonerarlo de sus cargos y posteriormente darle un alto cargo dentro del Instituto Armado. Por su parte, al empresario le garantizó que conseguiría un acuerdo con la Abogacía del Estado y la Fiscalía para que su condena fuera la mínima posible. Agravando la situación, en ambos casos Leire Díez afirmó que hablaba en nombre del Gobierno y que, por lo tanto, sus promesas no caerían en saco roto. En definitiva, lo que S. Cerdán y sus fontaneros pretendían con tan tortuosas maquinaciones no era otra cosa que invalidar los informes realizados por el teniente coronel A. Balas en relación a los delitos cometidos por Begoña Gómez, David Sánchez, Miguel Ángel Gallardo, José Luis Ábalos, Koldo García, Álvaro García Ortiz y la cúpula de la Fiscalía General del Estado, entre otros insignes socialistas.
Tras conocerse este fraudulento enjuague para lograr la impunidad delictiva de la plana mayor del socialismo patrio, el PSOE rápidamente se desligó de su infatigable fontanera, señalando que Leire Díez podría ser militante socialista, pero que en ningún caso tenía relación directa con la dirección del partido socialista. Sin embargo una cosa son los embustes del PSOE y otra bien distinta la realidad puesta de manifiesto por los hechos acaecidos. Así, lo cierto es que Leire Díez no solo es militante socialista, sino que también ha sido concejal del PSOE en el Ayuntamiento de Vega de Pas (Cantabria) entre 2011 y 2015, ocupó altos cargos en empresas públicas como ENUSA y Correos de 2018 a 2021, ha sido fotografiada en diferentes ocasiones al lado de P. Sánchez y S. Cerdán y ha sido vista entrando y saliendo en numerosas ocasiones de la sede socialista de la calle Ferraz. Como cualquier persona mínimamente sensata puede entender tal cúmulo de cosas no pueden ser producto de la casualidad, sino que, muy por el contrario, demuestran de forma harto evidente la estrecha vinculación existente entre Leire Díez y la cúpula socialista. De esta forma, se pone de manifiesto que el PSOE, desde la llegada de P. Sánchez al poder, es una máquina perfectamente engrasada, cuya principal función es la propagación de mentiras y la difamación de toda persona que de una forma u otra contribuya a desmontar su falsaria narrativa, la cual, en los tiempos que corren, solo resulta apropiada para resentidos por la derrota que sus antepasados sufrieron, incautos sin capacidad reflexiva y vagos jugosamente subvencionados.
Cuenta el Libro del Génesis que en Sodoma y Gomorra, dos ciudades situadas en las llanuras del río Jordán, reinaba el vicio y la depravación, llegando la maldad hasta tal punto que Dios reveló a Abraham que estaba decidido a destruirlas. Sin embargo, el patriarca del pueblo hebreo, preocupado por el destino su sobrino Lot que vivía en Sodoma, pidió a Dios que si encontraba en ellas al menos 10 personas justas no castigara a dichas ciudades. Dios aceptó el trato, pero al no encontrar ni tan siquiera tan reducido número de inocentes procedió a su destrucción, dejando que Lot y su esposa abandonaran previamente Sodoma. A la luz de esta bíblica historia, resulta obvio el paralelismo existente entre Sodoma y Gomorra y un PSOE definitivamente reconvertido por obra y gracia del sanchismo en una secta mafiosa y corrupta, donde la dignidad y la honorabilidad hace tiempo que dejaron de tener cabida, para dar paso a la ignominia y la indecencia.
Autor
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Rafael García Alonso.
Doctor en Medicina por la Universidad Complutense de Madrid, Especialista en Medicina Preventiva, Máster en Salud Pública y Máster en Psicología Médica.
Ha trabajado como Técnico de Salud Pública responsable de Programas y Cartera de Servicios en el ámbito de la Medicina Familiar y Comunitaria, llegando a desarrollar funciones de Asesor Técnico de la Subdirección General de Atención Primaria del Insalud. Actualmente desempeña labores asistenciales como Médico de Urgencias en el Servicio de Salud de la Comunidad de Madrid.
Ha impartido cursos de postgrado en relación con técnicas de investigación en la Escuela Nacional de Sanidad.
Autor del libro “Las Huellas de la evolución. Una historia en el límite del caos” y coautor del libro “Evaluación de Programas Sociales”, también ha publicado numerosos artículos de investigación clínica y planificación sanitaria en revistas de ámbito nacional e internacional.
Comenzó su andadura en El Correo de España y sigue haciéndolo en ÑTV España para defender la unidad de España y el Estado de Derecho ante la amenaza socialcomunista e independentista.
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